Mientras Genoveva Casanova (47 años) se mantiene alejada del foco mediático, fuera de Madrid, Federico de Dinamarca (55) continúa con su rutina con total normalidad. El heredero ha hecho caso omiso a los titulares de la prensa tras su encuentro con la socialité mexicana en la capital española y sigue con sus compromisos marcados en agenda. El último, una cacería real en Gribskov, a casi 50 kilómetros de Copenhague. 

Como estaba previsto, el pasado jueves, 16 de noviembre, el futuro Rey de Dinamarca llevó a cabo una cacería oficial de la Casa Real mientras su madre, la reina Margarita (83), organizaba una mesa de caza en el Salón de la Cúpula del Castillo de Fredensborg, donde es tradición brindar "por todos los valientes cazadores". Así lo explicaban desde Palacio, a través de sus redes sociales.

Fredensborg, un palacio de estilo barroco construido en el siglo XVIII y situado en las inmediaciones del lago Esrum, está pensado para el disfrute de la Familia Real danesa. Federico IV lo utilizaba durante la temporada de caza y actualmente es la residencia de verano de la reina Margarita. No obstante, como ha quedado demostrado en las redes de Casa Real, sigue siendo el punto de celebración de las cacerías reales. 

[Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova se conocieron "en una cacería" y lo que opina la prensa danesa]

Palacio de Fredensborg. Gtres

En ocasiones, la reina Margarita visita el palacio Fredensborg durante los meses de primavera y otoño, además de utilizarlo como recepción de las visitas de Estado. Allí también se lleva a cabo una curiosa tradición. La monarca pide a los visitantes que estampen su nombre en una cristalera del castillo, como hicieron recientemente Felipe VI (55) y Letizia (51). 

La reina de Dinamarca, en concreto, pide que se retire uno de los cristales de los ventanales de la Sala del Jardín, el Salón del Príncipe o la Sala de la Guardia del palacio de Fredensborg para que sus invitados lo firmen. 

Felipe VI y Letizia firmando el cristal de una ventana de Fredensborg. Instagram

Felipe VI y Letizia no fueron la excepción. El mismo día que la revista Lecturas publicó las imágenes de Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova en Madrid, los Reyes de España firmaron un vidrio con un curioso bolígrafo con punta de diamante que más tarde sería colocado en las ventanas de Fredensborg. Fue su último acto en la residencia estival de la reina Margarita, donde se hospedaron durante su estancia en Dinamarca.

El Palacio Fredensborg, tanto el edificio como sus majestuosos jardines, también se ha dispuesto para celebrar cumpleaños, aniversarios y bodas. Una de ellas, la de Federico y Mary de Dinamarca (51), que tuvo lugar en mayo de 2004 y que reunió a diferentes representantes de las casas reales europeas, como Felipe VI y Letizia, entonces Príncipes de Asturias. El matrimonio danés se dio el 'sí, quiero' en la catedral Nuestra Señora de Copenhague y celebró el banquete en la residencia de verano de la reina Margarita. 

Federico y Genoveva

En redes, donde se han publicado algunos detalles de la jornada de caza de Federico de Dinamarca, la polémica con Genoveva Casanova ha vuelto a estar a la orden del día. 

"¿Fue Genoveva?" o "¿Lo llevará a Madrid?", fueron algunas de las incómodas preguntas que recibió Federico de Dinamarca en el post de la Casa Real en el que se hacía referencia a su última jornada de caza. Cabe recordar que poco después de que saliera a la luz un reportaje gráfico en el que se le veía con la mexicana disfrutando de varios planes en la capital española, Susanna Griso (54) revelaba que el vínculo entre ambos "viene de la cacería". 

"Hay unas cacerías que para asistir a ellas hay que pagar muchísimo dinero", decía la presentadora de Espejo Público un día después de que se publicara el reportaje gráfico que descubría los planes de Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova en Madrid.

Y añadía: "En ellas están todos los royals, todos los hijos de las grandes familias. Se organizan sobre todo en Alemania y Austria. Son los fines de semanas y se hacen con presupuestos de hasta tres meses de antelación. Ahí Genoveva, que le gusta mucho y se ve que asiste con bastante frecuencia, conoce a Federico".