Napoleón Hill (1883- 1970) fue un escritor, profesor y autor de grandes obras de autoyada y superación personal de Estados Unidos. Se considera el autor más influyente en el área de desarrollo de técnicas de éxito personal, y escribió obras de que tuvieron gran repercusión como «Las leyes del éxito» (1928), «Piense y hágase rico» (1937), «Las claves de la riqueza» (1945) y «Actitud mental positiva» (1959).
Sus escritos han ayudado a millones de personas y ha sido un importante referente en la vida de otros grandes autores motivacionales como W. Clement Stone Y Og Mandino.
Citas de Napoleón Hill
Eres el amo de tu destino. Puedes influir, dirigir y controlar tu propio entorno. Puedes hacer que tu vida sea lo que quieras que sea.
Más oro ha sido extraído de la mente de los hombres que de la tierra misma.
La única limitación es la que uno establece en su propia mente.
Pon tu pie sobre el cuello del miedo y no te preocupes por lo que otros piensan, hacen o dicen.
Oportunidad… a menudo viene disfrazada en forma de desgracia o derrota temporal.
El amor atrae solo una cosa y esa cosa es más amor.
Si te crees desgraciado porque has amado y perdido, deshecha ese el pensamiento. Alguien que ha amado verdaderamente, nunca puede perder por completo.
Quien ha amado verdaderamente, nunca puede perder por completo. El amor es caprichoso y temperamental. Su naturaleza es efímera y transitoria. Viene cuando le place, y se va sin aviso. Acepta y disfruta mientras permanece, pero no te preocupes por su partida. La preocupación nunca lo traerá de vuelta.
Los sabios, cuando dudan si hablan o callan, se dan el beneficio de la duda y callan.
Se necesita la mitad de una vida antes de descubrir que la vida es un proyecto de bricolaje.
Nuestras únicas limitaciones son las que establecemos en nuestra propia mente.
Cada adversidad, cada fracaso, cada angustia, lleva consigo la semilla de un beneficio igual o mayor.
El punto de partida de todo logro es el deseo. Mantén esto constantemente en tu mente. El deseo débil trae resultados débiles, al igual que un pequeño fuego hace una pequeña cantidad de calor.
No esperes. El momento nunca será el adecuado. Empieza donde estés ahora, trabaja con lo que tengas a tu disposición y encontrarás mejores herramientas a medida que sigas adelante.
El punto de partida de todo logro es el deseo.
Cuando la derrota llegue, acepta como una señal de que tus planes no son sólidos, reconstruye esos planes y vuelve a zarpar hacia tu codiciado objetivo.
Hay una diferencia entre DESEAR para una cosa y estar LISTO para recibirla. Nadie está listo para una cosa, hasta que crea que puede adquirirla. El estado de ánimo debe ser CREENCIA, no mera esperanza o deseo. La mentalidad abierta es esencial para la creencia.
Si no te conquistas a ti mismo, serás conquistado por ti mismo.
Las opiniones son los productos más baratos de la tierra. Cada uno tiene una multitud de ellas listas para ser escuchadas por cualquier persona que las acepte. Si estás influenciado por las «opiniones», cuando llegues a las decisiones, no tendrás éxito en ninguna empresa.
Si no controlas tu propia mente, puedes estar seguro de que no controlas nada más.
Las metas son sueños con un plazo.
El hombre que hace más de lo que le pagan, pronto será pagado por más de lo que hace.
Cada gran líder del pasado, cuyo registro he examinado, tuvo que enfrentarse a grandes dificultades y se encontró con más de una derrota temporal antes de llegar.
El roble más fuerte del bosque no es el que está protegido de la tormenta y escondido del sol. Es el que está al aire libre donde se ve obligado a luchar por su existencia, contra los vientos y las lluvias y el sol abrasador.
Fija tu mente en un objetivo bien definido y observa cómo rápidamente el mundo se aparta para dejarte pasar.
El descuido de no ampliar su punto de vista, ha mantenido a algunas personas haciendo la misma cosa toda su vida.
Ama tu visión y tus sueños como si fueran los hijos de tu alma, los planos de tus logros finales.
La acción es la medida real de la inteligencia.
Tienes que estar seguro de ti mismo antes de que puedas ganar un premio.
La causa de la depresión es un hábito mundial que surge de tratar de cosechar sin sembrar.
Lo que la mente puede concebir y creer, puede lograr.
Si no puedes hacer grandes cosas, haz pequeñas cosas de una gran manera.
Dile al mundo lo que intentas hacer, pero primero muéstraselo. Las acciones, y no las palabras, es lo que cuenta más.
El deseo respaldado por la fe no conoce la palabra “imposible”.
La guerra surge del deseo del individuo de ganar ventaja a expensas de sus semejantes.
Un objetivo es un sueño con un plazo.
Si no estás aprendiendo mientras estás ganando, te estás engañando a ti mismo y perdiendo la mejor parte de tu compensación.
Todos los descansos que necesitas en la vida esperan dentro de tu imaginación. La imaginación es el taller de tu mente, capaz de convertir la energía de la mente en logros y riqueza.
El fracaso es un tramposo con un agudo sentido de la ironía y la astucia. Es capaz de hacerte tropezar cuando el éxito está casi a tu alcance.
El deseo es el punto de partida de todo logro, no una esperanza, ni un sueño, sino un deseo pulsante que lo trasciende todo.
Primero viene el pensamiento; luego la organización de ese pensamiento, en ideas y planes; a continuación la transformación de esos planes en realidad. El comienzo, como puedes ver, está en tu imaginación.
Nadie puede hacerte celoso, enojado, vengativo o codicioso; a menos que tú lo dejes.
Recuerda que tus pensamientos dominantes atraen, a través de una ley definida de la naturaleza, por la ruta más corta y más conveniente, su contrapartida física. Ten cuidado en lo que tus pensamientos insisten una y otra vez.
Las «opiniones» son las materias primas más baratas de la tierra.
El mundo tiene el hábito de darle el espacio al hombre cuyas palabras y acciones demuestran que él sabe a dónde va.
Los miedos no son nada más que un estado de ánimo.
No hay limitaciones para la mente, excepto las que nosotros reconocemos.
La capacidad de superar el fracaso sin sentir desaliento, es el principal activo de toda persona que logra un éxito excepcional en cualquier campo.
Si amas demasiado seguramente puedes ser herido, pero vivirás en miseria si amas demasiado poco.
Un genio es simplemente aquel que ha tomado plena posesión de su propia mente y la ha dirigido hacia objetivos de su propia elección, sin permitir que influencias externas lo desalienten o engañen.
Si debes hablar mal de otro, no lo hagas, escríbelo en la arena cerca del borde del agua.
La felicidad se encuentra en hacer, no simplemente en poseer.
Tal vez podamos aprender, a medida que crecemos, que el «otro yo» es más poderoso que el yo físico que vemos cuando nos miramos en un espejo.
Es tu responsabilidad asegurarte de que las emociones positivas constituyen la influencia dominante de tu mente.
Cualquier cosa que hagas a otra persona, te lo haces a ti mismo.
La dilación es el mal hábito de dejar para el día después lo que deberías haber hecho antes de ayer.
El roble duerme en la bellota. El pájaro espera en el huevo, y en la más alta visión del alma, un ángel despierto se agita. Los sueños son las semillas de la realidad.
El miedo no es nada más que un estado de ánimo.
Cuando tus deseos son lo suficientemente fuertes, pareces tener poderes sobrehumanos para lograr tus objetivos.
El éxito y el fracaso son en gran medida los resultados del hábito.
Recuerda que no es el abogado que conoce la mayoría de las leyes, sino el que mejor prepara su caso, el que gana.
Cada hombre es lo que es, es la causa de sus pensamientos dominantes, aquellos que permite ocupar su mente.
No tenía nada para empezar, excepto la capacidad de saber lo que quería, y la determinación de soportar ese deseo hasta que el universo se dio cuenta.
La mayoría de los llamados FALLOS son sólo derrotas temporales.
Aquellos que triunfan de una manera excepcional, raramente lo hacen antes de los 40 años. Es más habitual que alcancen sus metas reales pasados los 50.
El camino del éxito es el camino de la búsqueda continua del conocimiento.
Cuando eres capaz de mantener tus más altos estándares de integridad, independientemente de lo que otros puedan hacer, estás destinado a la grandeza.
Nos negamos a creer lo que no entendemos.
Mantén una imagen de ti mismo larga y constante en tu mente, y serás atraído hacia ella.
Cada fracaso trae consigo la semilla de un éxito equivalente.
Si estás listo para el secreto, ya tienes una mitad de él, por lo tanto, reconocerás fácilmente la otra mitad el momento en que llegue a tu mente.
Eliminaré el odio, la envidia, los celos, el egoísmo y el cinismo, desarrollando el amor por toda la humanidad, porque sé que una actitud negativa hacia los demás nunca puede traerme éxito. Voy a hacer que otros crean en mí, porque voy a creer en ellos, y en mí mismo.
Cualquier idea, plan o propósito puede ser colocado en la mente a través de la repetición del pensamiento.
La fe elimina las limitaciones.
Helen Keller se volvió sorda, muda y ciega poco después del nacimiento. Pero a pesar de su enorme desgracia, escribió su nombre indeleblemente en las páginas de la historia de los grandes. Su vida entera ha servido como evidencia de que nadie será derrotado hasta que la derrota haya sido aceptada como realidad.
Te vuelves en lo que piensas.
