Muerte de un viajante

Willy Loman es un viajante de comercio que, en los umbrales de la vejez, ha visto fracasar todas sus ambiciones y se siente perseguido por un pasado mediocre. Los recuerdos lo llevan a hacer un examen de las relaciones que ha tenido con su mujer, Linda, comprensiva a pesar de todo, y sus dos hijos, que ahora lo desprecian y que en otro tiempo lo consideraban como un hombre superior al resto de los demás.

Nueva versión de la famosa obra de Arthur Miller, que lo convirtió en uno de los dramaturgos más importantes de América. En esta ocasión el encargado de dirigirla fue Volker Schlöndorff, director alemán avezado en dirigir adaptaciones literarias (“El tambor de hojalata”, “El honor perdido de Katharina Blum”), que se aventuró a mediados de los 80 en el cine americano con “Muerte de un viajante”. Schlöndorff se limitó a filmar la obra de teatro que se estaba realizando en Broadway, en un proyecto pensado inicialmente para televisión pero que el final fue distribuida cinematográficamente. Destaca la riqueza de los diálogos y las interpretaciones de los protagonistas, Dustin Hoffman y un entonces desconocido John Malkovich.