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Asesinato, violaci�n, infidelidad... Los cinco m�s grandes esc�ndalos de Hollywood
Hearst vs. Chaplin
El todopoderoso magnate de la comunicaci�n William Randolph Hearst estaba perdidamente enamorado de su amante, Marion Davies, una actriz rubia mucho m�s joven que no tuvo suerte en el cine a pesar de su vis c�mica. El millonario era muy celoso, agasajaba a Davies con deslumbrantes joyas y mansiones, pero no le permit�a que alternara con otros hombres. Cuando lleg� a sus o�dos que manten�a supuestamente una relaci�n con Charles Chaplin decidi� urdir un plan. A bordo de su yate Oneida, un fin de semana de noviembre de 1924 embarcaron los tres protagonistas junto al director Thomas Harper Ince, la periodista de cotilleos Louella Parsons y otras actrices de medio pelo. Uno de los pasatiempos de Hearst era matar gaviotas, pero cuando le pareci� ver que Chaplin y Davies estaban coqueteando no dud� en apuntar al genio del cine mudo. Con tal mala suerte que al disparar hiri� de muerte a Thomas Ince. Oficialmente se dijo que hab�a muerto de un ataque al coraz�n, pero en los anales de la historia de Hollywood es uno de los grandes esc�ndalos que est�n a�n por resolver. Y si no, que se lo pregunten a la periodista de cotilleos Louella Parsons que por callar lo que vio aquella noche consigui� un contrato millonario en los diarios de Hearst.
GTRES
