Iberdrola ha sido el gran vencedor de la megasubasta de energía eólica marina del Reino Unido, con la adjudicación de 7.000 megavatios (MW), cuyo desarrollo en Escocia supondrá una inversión total de 22.500 millones de euros, según informó ayer la compañía.

El grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán ha conseguido el desarrollo de tres proyectos a gran escala; dos con tecnología flotante, que desarrollará en alianza con Shell, y un tercero sobre estructura fija. Galán destacó que estas adjudicaciones muestran “el compromiso del grupo con Escocia y con el Reino Unido”.

“Iberdrola es un líder global en eólica marina con más de 5.500 millones de euros invertidos en el Reino Unido, Europa continental y EE UU, y planes para alcanzar los 30.000 millones hasta 2030 gracias al refuerzo de nuestros mercados actuales y la entrada en varios países asiáticos —dijo Galán—. La enorme oportunidad de inversión que supone esta tecnología requiere crear alianzas, como la que tenemos con Shell para estos proyectos”.

Las áreas adjudicadas por la energética podrían suministrar energía limpia a casi 8,5 millones de hogares, tres veces el número de viviendas que hay en Escocia.

Se trata de los proyectos MarramWind, de 3.000 MW de tecnología flotante en la costa noreste de Escocia que será desarrollado conjuntamente con la compañía Shell; CampionWind, de 2.000 MW de tecnología flotante en la costa este escocesa, también con la petrolera, y Machair Wind, proyecto de 2.000 MW con cimentaciones fijas en aguas próximas a la isla de Islay, en las Hébridas, al oeste de Escocia, y que es propiedad exclusiva de Iberdrola.

Los emplazamientos de MarramWind y CampionWind, situados en aguas más profundas que el de Islay, se convertirán en los primeros parques eólico-marinos flotantes a gran escala del mundo y serán precursores de un nuevo sector industrial que tendrá a Escocia y el Reino Unido a la cabeza. Los tres proyectos estarán en funcionamiento en 2030.