Mar�a Le�n: "Llega un momento que est�s con el barro tan hasta el cuello que te olvidas del sentido real de la vida"

"�C�mo est�s? �No crees que nos lo preguntamos poco?"

"T�a, �qu� bonito! Me parece una pregunta preciosa. Estoy muy bien, aunque tengo que confesarte que no siempre se puede decir".

Hablar con Mar�a Le�n podr�a ser como hablar con la reencarnaci�n de la Pachamama. La naturaleza, "la madre Tierra", su centro de gravedad es clave para la actriz. Es como sentarte con una colega a la que no has visto en a�os, pero pareciese que hubieras estado con ella el d�a anterior. Te invita a confiar, conf�a; te invita a hablar, habla; te invita a pensar, piensa.

Porque Mar�a Le�n piensa mucho, le da vueltas a su cabeza, reflexiona, empatiza, humaniza... Sin ello y, sobre todo, sin su familia Mar�a Le�n se habr�a perdido o habr�an dejado que se perdiera. Sin embargo, la actriz, que con solo 27 a�os consigui� la Concha de Plata a la mejor actriz en el Festival de San Sebasti�n y el Goya a la mejor actriz revelaci�n por su magn�fica Pepita en La voz dormida, sabe a d�nde quiere ir y hasta d�nde quiere llegar, tanto que ni lucha contra el miedo, se hace amigo de �l y tira. Tira todo lo lejos que pueda, como un �caro, pero sin que el sol la queme. O, tal vez, s�.

Ha sido Pepita, ha sido Mar�a, ha sido Dolores, ha sido Nines, ha sido tantas mujeres que pensar en cine y en ficci�n espa�ola sin pensar en Mar�a Le�n es casi imposible. Hija de actriz (Carmina Barrios), hermana de actor y director (Paco Le�n) muchos pensar�n que Mar�a Le�n ten�a las cartas de su vida escritas. Pudiera ser. La realidad es que ella es qui�n decide qu� cartas jugar y cu�ndo guardarse un as en la manga. El �ltimo, siendo Cristina, la guardia civil que se convirti� en la sombra de Rosario Porto tras su detenci�n por la muerte de su hija Asunta Basterra. El caso Asunta, la serie estrenada este viernes en Netflix sobre uno de los cr�menes m�s terribles en la historia de Espa�a, ha marcado a la actriz. No se atreve a asegurar si ha sido el papel m�s duro al que se ha enfrentado, pero no duda ni un segundo en reconocer que la ha llevado a "much�simas reflexiones", algunas de ellas "muy duras".

�Y a qu� reflexiones te ha llevado El caso Asunta?

A much�simas, pero una de las m�s interesantes es lo dif�cil que es enfrentarse a un caso tan duro como este. En este crimen donde est� tan presente la muerte, mi personaje cuenta tambi�n qu� es la vida. En este tipo de series se habla mucho de la muerte, en esta se habla de la muerte de una ni�a, pero tambi�n se habla de la necesidad y de las ganas de querer procrear m�s vida en un mundo como este.

�Es tan duro este mundo?

La vida es as� de dura. Nos enfrentamos continuamente a momentos tan oscuros como en este caso con la muerte de una ni�a y, sin embargo, hay algo que nos mantiene vivos todo el tiempo, que nos da �nimo para continuar y que es todo lo contrario a lo que se vivi� con este caso. Son dos cosas muy contradictorias, pero que est�n muy latentes y que al final es lo que m�s humaniza.

�Nos estamos deshumanizando?

S�. Corremos el riesgo de perder la primera capa de piel y dejar de empatizar con el de enfrente hablando de cosas tan duras y convirti�ndolas en cosas cotidianas cuando deber�an ser cosas que nunca deben servir para un tema de conversaci�n sino que deber�an servir para mucha reflexi�n.

�No hubo reflexi�n en el crimen de Asunta Basterra?

Fue muy poca o se qued� solo en unos pocos. Lo que m�s suena alrededor de este caso es el comentario, el querer hablar todo el mundo, el hacerse protagonista y part�cipe de una historia tan terror�fica. Nadie evidentemente quiere asesinar a un hijo, pero cuando ocurre hay que plantearse no solo el hecho sino c�mo se ha podido llegar a ese punto. �Para qu�? Para poder empatizar, para poder frenarlo en un futuro, para poder ayudarnos. La persona que lo hizo estaba enferma y no estamos acostumbrados a ir a la ra�z para encontrar la cura. Estamos acostumbrados a contar el problema, pero no qu� llev� a ese problema.

Mar�a Le�n se ha enfrentado durante sus 18 a�os de carrera a muchos papeles. Ha hecho comedia, ha hecho drama, ha hecho thriller... Se ha enfrentado a interpretaciones con las que incluso meses despu�s se emocionaba al recordarlos. Porque si algo transmite es emoci�n, no solo delante de la pantalla, tambi�n detr�s de ella.

Se escucha ladrar a sus perros, pide perd�n, retoma la conversaci�n y vuelve a la empat�a, a la humanidad, a esa naturalidad que por mucho que quiera frenar le es imposible. Cuando hizo de Pepita en la pel�cula de Benito Zambrano la cr�tica aplaudi� su intensidad controlada, su manera de vivir y hacer que los espectadores vivieran con ella la historia. De aquella Pepita, de aquella Mar�a Le�n queda todav�a mucho: "Los intereses de cada uno, que son muchos, nunca pueden hacer que perdamos nuestra humanidad. Si ocurre te desdibujar como persona y desconectas tanto que pueden suceder cosas tremendas como ocurri� con Asunta".

Mar�a, �y de qu� depende la vida?

La vida parece que es lo que tenemos o donde estamos, pero la realidad es que la vida es c�mo respiramos. Si a ti se te ha olvidado saber c�mo respiras t� no vas a poder empatizar con la respiraci�n de todos los dem�s. No s� si me explico. Lo que quiero decir es que t� te crees que porque t� no respires no respiran los dem�s y llega un momento que est�s con el barro hasta el cuello y te olvidas de cu�l es el sentido real de la vida.

�Y qu� m�s muestra El caso Asunta?

Lo que muestra es que cada personaje tiene una vocaci�n y cada uno tiene un inter�s por estar de pie en esta historia. Incluso todo el momento amarillista de la prensa que lleva esta historia por diferentes derroteros, pero que tambi�n muestra el da�o y lo peligroso que es una mala informaci�n. C�mo se puede llegar a tener tanto poder desde la mentira y c�mo ese poder, esa mentira, puede llegar a destruir a las personas. Y eso nos puede llevar a que no se busque la ra�z del conflicto y nos quedemos simplemente en el esc�ndalo.

�Se nos est� yendo todo un poco de las manos?

Es complicado porque ya te digo que la falta de empat�a y la necesidad de estar en la noticia nos desdibuja como seres humanos. Si no empatizas, si no te pones en la piel del otro pierdes la realidad como ser humano y pierdes muchas cosas de ti. Pierdes lo m�s bonito que tiene la vida: compartir, amarnos y poder permitirnos y permitir al otro que se equivoque y equivocarnos. Estamos viviendo momentos que estamos mucho m�s en la cr�tica que en la defensa y creo que si fu�ramos m�s inteligentes nos defender�amos m�s entre nosotros porque llegar�amos mucho m�s lejos.

"La mentira y el poder de la mentira puede llegar a destruir a personas"

Cuando a Mar�a Le�n le preguntas por Trist�n Ulloa y su papel como Alfonso Basterra, la actriz te corta inmediatamente: "Te lo tengo que decir: creo que elegir a Trist�n para que hiciera este papel ha sido de los aciertos m�s grandes porque jam�s habr�a imaginado tanta humanidad de un personaje tan ca�tico y tan destructor".

�Se puede humanizar a un personaje as�?

El trabajo que ha hecho Trist�n es el gran ejemplo porque �l ha demostrado en ese personaje la dualidad que existe en todo ser humano. Interpretar a un personaje que es un mierda y defender a un mierda desde la interpretaci�n y desde el amor solo lo hace alguien que es capaz de humanizar con cualquier cosa y ese es nuestro trabajo como actores, humanizar los personajes.

Aunque Cristina es una guardia civil que se enfrenta a una madre que ha matado a su hija, la actriz insiste en que ha intentado darle un punto de humanidad y de realidad. "Cristina intenta escuchar a estos verdugos sin se�alarlos desde el primer momento. Los coloca como personas e intenta entender que son enfermos, que son v�ctimas de su propia personalidad y que terminan siendo verdugos, pero que antes de juzgarlos hay que observarlos como lo que son, personas".

�Y qu� le da miedo a Mar�a Le�n? �Los verdugos, los juicios, el amarillismo...?

Tengo miedo a muchas cosas, pero intento que no me d� miedo ninguna. Te lo digo con la mano en el coraz�n, tengo miedo a muchas cosas, pero el miedo es algo que intenta regir nuestras vidas y con el miedo intentan regir a un pueblo. Por eso el miedo es algo que deber�amos intentar acompa�ar, que nos ayude a estar alerta, pero que no sea una herramienta ni para anularse a uno mismo ni para anular a los dem�s.

�Entonces?

Entonces tengo miedo a la mentira. Me da miedo la falta de informaci�n, me da miedo que mientan y me da miedo la deshumanizaci�n. Esas cosas me dan miedo porque no est�n en mi mano. A lo que est� en mi mano puedo controlarlo, el resto no. Hay muchas cosas en mi vida que espero que est�n siempre y el miedo tambi�n es una de ellas, pero control�ndolo yo. El miedo hace que tengas o�do y puedas escucharme. Me dar�a miedo si no tuviera o�do, me dar�a miedo quedarme sin empat�a, me dar�a miedo quedarme sin coraz�n.

�Y cu�les son las herramientas con las que lo toreas?

Pues el trabajo personal, la tierra, mi madre, mis hermanos, mi familia, mi trabajo... Mi profesi�n es de las cosas que m�s me ayudan a torear la vida en general porque gracias a ella tengo muchas satisfacci�n. Me da la oportunidad de contar muchas historias y de entrar en muchos corazones y mentes de mucha gente. Creo que tengo cosas en mi vida lo suficientemente guays que me han costado mucho y que las labro cada d�a para sostenerme cada d�a. Y te voy a decir una cosa, parece que vamos todos a alg�n sitio y que vamos a llegar unos antes que otros, pero verdaderamente vamos todos a la caja de pino, todos acabamos en el hoyo.

�Compensa esto todo lo malo de ser una persona p�blica?

Ser medi�tica te hace muy vulnerable, pero la libertad es algo que nos une. Siempre que exista libertad esta cosa medi�tica va a ser algo maravillo, pero cuando no existe la libertad puede convertirse en un arma de doble filo. Quiero pensar que todo es parte del juego. Claro que puede fastidiar estar en manos de mucha gente que ni siquiera te conoce y, claro que es complicado, pero no significa que sea algo malo. A la larga, la mentira tiene las patas muy cortas y lo he comprobado en estos 18 a�os.

�Hemos cambiado mucho en estos 18 a�os o nos queda mucho por avanzar?

Nos han cambiado las redes para bien y para mal. Yo he estado muchas veces a punto de bajar del carro, pero he tenido mucha suerte de tener siempre a mi familia que me han ayudado. Nos vamos transformando en muchas cosas cosas, pero siempre hay que mantener una ra�z y yo la tengo.

Hablas mucho de la libertad...

Insisto, la libertad es una palabra que se suele utilizar en muchos conceptos y con mucha facilidad sin saber exactamente lo que significa. Creo que la libertad es algo que nos tiene que unir siempre.

Por Mar�a Le�n seguir�amos hablando horas de la vida, de la libertad, de la mentira, dela vulnerabilidad, "la que tenemos todos los seres humanos y del poder que tenemos todos tanto para hacer el bien como el mal". "No podemos perder la humanidad. Nunca".