Fuentes de palacio califican de "implacable y rápida" la decisión de Isabel II de retirar a su hijo Andrés todos los títulos. Ahora ha trascendido que los dos herederos directos de la Reina, para salvaguardar la institución, han pedido ver al duque fuera del país.

Nuevas revelaciones en torno a la histórica decisión de Isabel II de despojar a su hijo Andrés de todos los títulos y honores, incluido el de alteza real. Este es castigo que la monarca ha impuesto al príncipe después de que un tribunal en Estados Unidos anunciara que acepta a trámite la demanda contra él por presuntos abusos sexuales a Virginia Giuffre, cuando esta tenía 17 años. Giuffre era víctima del tráfico sexual de menores del millonario Epstein.

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El encuentro entre madre e hijo tuvo lugar el 13 de enero en el Castillo de Windsor. Isabel le comunicó a su hijo personalmente esta decisión, calificada por fuentes de palacio como "implacable y rápida", según publica Daily Mail. Además, estas mismas fuentes añaden que fue un acuerdo "ampliamente consensuado" entre la familia real.

Ahora, un día después de esta audiencia privada, ha trascendido que el príncipe Carlos y su hijo Guillermo habían pedido el exilio para Andrés. Un plan de salida del país, que se habría conocido el miércoles 12, cuando la soberana tomó su decisión de vetar a Andrés en el uso de sus títulos. El tajante comunicado oficial de Buckingham rezaba: "Con la aprobación y el acuerdo de la Reina, las afiliaciones militares y los patrocinios reales del duque de York han sido devueltos a Su Majestad". Además, se señala de forma expresa que el príncipe irá a juicio "como un ciudadano privado". 

Expertos analistas pronostican que "por el bien de la Reina" el duque debe llegar a un acuerdo en esta demanda. Sobre todo, para no empañar las celebraciones del 70º aniversario de la soberana, el Jubileo de Platino.

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