Ángel Di María, extremo de la Juventus, fue sancionado este martes con dos jornadas de suspensión por el Juez Deportivo de la Serie A tras la tarjeta roja directa que recibió en el pasado partido ante el Monza por dar un codazo a un rival, mientras que José Mourinho, entrenador de la Roma, recibió una sanción de una jornada por su expulsión ante el Atalanta.
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Di María fue uno de los señalados en la derrota de la Juventus ante el recién ascendido Monza (1-0), propiedad de Silvio Berlusconi, al protagonizar un torpe episodio que le costó la roja directa en el minuto 41 de la primera parte, que dejó a los suyos con un hombre menos durante toda la segunda.
Di María no podrá jugar, por tanto, ni ante el Bolonia en casa ni contra el Milan en San Siro, una salida complicada en un momento delicado para la 'vecchia signora', que marcha octava, fuera de puestos europeos, sumida en una crisis de juego y resultados.
Por su parte, Mourinho no pudo contenerse y protestó de manera exagerada, entrando al campo, la decisión del colegiado de no pitar penalti a favor de los suyos en el encuentro frente al Atalanta que se saldó con derrota de la 'Loba' por 0-1. El portugués verá desde la grada el importante encuentro ante el Inter en San Siro