Contenido
- Jorge III: nacimiento y educación
- Jorge III: reinado temprano
- Jorge III: la revolución americana
- Jorge III: regla posterior y enfermedad mental
El monarca más antiguo de Inglaterra antes de la reina Victoria, el rey Jorge III (1738-1820) ascendió al trono británico en 1760. Durante su reinado de 59 años, logró una victoria británica en la Guerra de los Siete Años, llevó la exitosa resistencia de Inglaterra a la Revolución y la Francia napoleónica, y presidió la pérdida de la Revolución Americana. Después de sufrir episodios intermitentes de enfermedad mental aguda, pasó su última década en una niebla de locura y ceguera.
Jorge III: nacimiento y educación
La era georgiana (1714-1830) abarcó los reinados combinados de los cinco monarcas británicos del Electorado de Hannover, un estado miembro del Sacro Imperio Romano. George III fue el primer rey de Hannover nacido en Inglaterra en lugar de Alemania. Sus padres fueron Federico, príncipe de Gales y Augusta de Sajonia-Gotha.
¿Sabías? El planeta Urano fue originalmente llamado "Georgium sidus", la estrella georgiana, en honor al rey Jorge III de Inglaterra, que había financiado el telescopio de 40 pies que William Herschel usó en su descubrimiento.
A la muerte de su padre en 1751, George, de 12 años, se convirtió en príncipe de Gales. Fue atendido en relativo aislamiento por su madre y enseñado por el noble escocés Lord Bute.
Jorge III: reinado temprano
George III se convirtió en rey de Gran Bretaña e Irlanda en 1760 tras la muerte de su abuelo George II. En su discurso de adhesión al Parlamento, el monarca de 22 años restó importancia a sus conexiones de Hannover. "Nacido y educado en este país", dijo, "me glorío en el nombre de Gran Bretaña".
Un año después de su coronación, George se casó con Charlotte de Mecklenburg-Strelitz, la hija de un duque alemán. Fue una unión política que se conocieron por primera vez el día de su boda, pero fructífera, con 15 hijos.
George III trabajó para un final acelerado de la Guerra de los Siete Años (1756-63), adoptando una posición que obligó a su influyente ministro de guerra William Pitt el Viejo (que quería ampliar el conflicto) a renunciar en 1761. Al año siguiente, George nombró Lord Bute como su primer ministro, el primero en una rápida sucesión de cinco ministros ineficaces.
En 1764, el primer ministro George Grenville introdujo la Ley de sellos como una forma de aumentar los ingresos en la América británica. El acto se opuso fervientemente en Estados Unidos, especialmente por los panfletos a los que se les gravaría el papel. El parlamento revocaría la ley dos años después, pero la desconfianza persistió en las colonias.
Jorge III: la revolución americana
En 1770, Lord North se convirtió en primer ministro, comenzando un período de 12 años de estabilidad parlamentaria. En 1773 aprobó una ley que grava el té en las colonias. Los estadounidenses se quejaron de impuestos sin representación (y organizaron la fiesta del té de Boston), pero North se mantuvo firme con el respaldo de George.
La Revolución Americana comenzó el 19 de abril de 1775, con las Batallas de Lexington y Concord. Al año siguiente, la Declaración de Independencia expuso el caso de los estadounidenses por la libertad, retratando a Jorge III como un tirano inflexible que había desperdiciado su derecho a gobernar las colonias. En realidad, la situación era más compleja: los ministros parlamentarios, no la corona, eran responsables de las políticas coloniales, aunque George todavía tenía medios de influencia directa e indirecta.
El rey se mostró reacio a aceptar la derrota de su ejército en Yorktown en 1781. Redactó un discurso de abdicación, pero al final decidió aplazar las negociaciones de paz del Parlamento. El Tratado de París de 1783 reconoció a los Estados Unidos y cedió la Florida a España.
Jorge III: regla posterior y enfermedad mental
A fines de 1783, la coalición de Lord North fue expulsada por William Pitt el Joven, quien sería primer ministro durante más de 17 años. En 1778, George cayó en un período de meses de locura violenta. Fue sujetado con una camisa de fuerza y sufrió varios tratamientos a medida que se desarrollaba una crisis de gobierno a su alrededor. Se recuperó al año siguiente y reinó durante los siguientes 12 años como un monarca recién amado y símbolo de estabilidad en la era del caos revolucionario de Francia. El apoyo de George al papel de Inglaterra en las guerras revolucionarias francesas de finales de 1790 ofreció una resistencia temprana contra el gigante napoleónico.
George sufrió un segundo episodio de locura en 1804 y se recuperó, pero en 1810 cayó en su enfermedad final. Un año después, su hijo, el futuro Jorge IV, se convirtió en príncipe regente, dándole un gobierno efectivo para la Guerra de 1812 y la derrota final de Napoleón en Waterloo en 1815. George III murió ciego, sordo y loco el 29 de enero de 1820. Sus enfermedades pueden han sido causadas por porfiria, un trastorno metabólico hereditario, aunque un análisis de muestras de cabello realizado en 2019 sugirió una posible causa de envenenamiento por arsénico (de medicamentos y cosméticos).
