Isabel Carlota del Palatinado (Elisabeth Charlotte von der Pfalz), más conocida como Liselotte, fue una princesa del Palatinado y duquesa consorte de Orleans a través de su matrimonio con Felipe I. Cuñada del rey Luis XIV de Francia, Madame o Madame Palatine, como se la conoció tras desposarse, pasó a la posteridad por las ácidas descripciones que hizo en sus cartas sobre la corte del Rey Sol. En ellas relataba la vida cortesana en Versalles de una manera vívida y directa.
Madame describió cómo vivieron, celebraron, amaron y murieron sus curiosos contemporáneos, dejando para la posteridad, invaluables registros culturalmente históricos sobre la corte de su cuñado y amigo, el rey Luis XIV.
Una princesa particular
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| Retrato de Liselotte |
Isabel Carlota del Palatinado nació en el palacio de Heidelberg, Alemania, el 27 de mayo de 1652. Fue la segunda hija de Carlos I Luis del Palatinado y Carlota de Hesse-Kassel.
Isabel era bisnieta de la famosa reina María I de Escocia. Desde su infancia, Isabel fue conocida por el apelativo cariñoso de Liselotte, un acrónimo de sus nombres.
Sus padres tuvieron un matrimonio poco feliz y repleto de drama. Carlos mantenía una relación extramatrimonial con María Luisa de Degenfeld, una joven dama de honor de su esposa, incluso, se casó con ella sin antes divorciarse de su mujer.
Desde sus primeros años, Liselotte ya era obstinada y poco convencional. Ella poseía una pasión por la libertad y el aire fresco. Incluso, para sus enfermeras e institutrices, ella era una niña muy brusca y poco femenina. Liselotte escribió en una de sus cartas la siguiente experiencia:
Fraulein von Quaadt, fue nuestra primera institutriz, para entonces ya era muy vieja. Un día, ella quiso azotarme, porque de pequeña era bastante traviesa. Cuando trató de levantarme, luché tan violentamente, y pateé sus viejas canillas con tanta fuerza, que ambas caímos al suelo... por eso, ella insistió en renunciar.
Debido a la situación con sus padres, Liselotte, de cinco años, fue enviada a la ciudad de Hannover para vivir con su tía paterna; Sofía del Palatinado, esposa de Ernesto Augusto de Brunswick-Luneburgo, y madre del futuro rey Jorge I de Gran Bretaña.
La princesa consideró los siete años que vivió en Hannover, como los años más felices de su vida. Mientras vivía con su tía, Liselotte fue educada por Gottfried Leibniz, uno de los matemáticos y filósofos naturales más importantes de la Era de la Ilustración. Leibniz sirvió a la Casa de Hannover como historiador, asesor político y bibliotecario.
Durante este tiempo, Liselotte conoció a su abuela Isabel Estuardo, conocida por todos como “La Reina de un Invierno”. Allí también conoció a Guillermo de Orange (William of Orange), más tarde conocido como Guillermo III de Inglaterra.
Liselotte y William se llevaban muy bien. Ella tenía siete años y medio, y él nueve. Ambos pasaban el día corriendo juntos y realizaban arriesgadas acrobacias sobre las costosas alfombras del palacio.
Su tía Sofía parece haber sido la primera en mencionar un matrimonio entre Liselotte y William, pues, ambos tenían la misma religión, un gran linaje, eran casi de la misma edad y se querían el uno al otro. Aún así, el pequeño Guillermo no era el único a quien Sofia tenía en mente, otra opción era hacer de Liselotte la reina de Inglaterra o Dinamarca. La última opción era la que su padre prefería, pero el heredero de la corona danesa decidió casarse con otra persona.
Cuando Liselotte llegó a la tierna edad de catorce años, la idea de casarla con William volvió a surgir, pero su padre no la persiguió. Liselotte no era bella, pero tenía muchas opciones de partidos.
A la edad de dieciocho años, la idea de casarla con el Duque de Curlandia y Semigalia apareció, pero su padre rechazó la propuesta. Con aquella edad, y al menos algo informada de lo que estaba sucediendo, supo que, aunque su padre no favorecía demasiado a un duque de Curlandia y Semigalia, la madre de dicho duque estaba bastante interesada en la unión. También parece haber sabido que el propio duque estaba locamente enamorado de otra persona, pero no se le permitió casarse con la muchacha, porque los padres preferían a Liselotte como su novia.
Entre 1662 y 1663, Liselotte volvió a Heidelberg a vivir con su madrastra y sus catorce hermanos, entre ellos, Carlos II del Palatinado.
Liselotte tuvo trece medios hermanos a través de la relación de su padre con María Luisa de Degenfeld. Todos ellos tenían el apellido "von der Pfalz" y todos recibieron el título de Raugraf o Raugräfin (Raufgrave o Raufgravine en inglés). Cinco de sus medios hermanos murieron a una edad temprana. De los sobrevivientes, los cinco hijos murieron solteros y sin hijos, cuatro murieron en acción como soldados y uno murió en un duelo. De las tres hijas sobrevivientes, solo Carolina, la mayor, se casó.
- Carlos Luis (1658-1688): Soltero, muerto en acción.
- Carolina Isabel (1659-1696): Casada con Meinhardt Schomberg, Tercer Duque de Schomberg, tuvo cuatro hijos.
- Luisa (1661-1733): Soltera.
- Luis (nacido y muerto en 1662): Murió en la infancia.
- Amalia Isabel (1663 - 1709): Soltera.
- Jorge Luis (1664-1665): Murió en la infancia.
- Federico (1665-1674): Murió en la infancia.
- Federico Guillermo (1666-1667): Murió en la infancia.
- Carlos Eduardo (1668-1690): Soltero, muerto en acción.
- Sofía (nacida y fallecida en 1669): Murió en la infancia.
- Carlos Mauricio (1671 - 1702): Soltero, muerto en acción.
- Carlos Augusto (1672-1691): Soltero, muerto en acción.
- Carlos Casimiro (1675-1691): Soltero, asesinado en un duelo.
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