LA LECTURA
Historia

Cuando el franquismo fue un para�so para fascistas, nazis y colaboracionistas: "No quer�an que los aliados les interrogaran sobre su ayuda al Tercer Reich"

Tras el final de la II Guerra Mundial, Espa�a fue el pa�s europeo que acogi� a los ultraderechistas que hab�an colaborado con el Tercer Reich. En 'Bajo el manto del Caudillo', Jos� Luis Rodr�guez Jim�nez ofrece el m�s completo estudio de la preferente atenci�n que recibieron, a veces por utilidad pol�tica, del r�gimen de Franco

L�on Degrelle, leyendo en el patio de su casa 
de campo, conocida 
como La Carlina, en Constantina, Sevilla.
L�on Degrelle, leyendo en el patio de su casa de campo, conocida como La Carlina, en Constantina, Sevilla.CEDIDA POR JOS� LUIS RODR�GUEZ JIM�NEZ
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Cuando en 1951 L�on Degrelle inici� la construcci�n de su lujosa casa en la finca La Carlina, a las afueras del sevillano municipio de Constantina, hab�an pasado poco m�s de seis a�os desde su aparatoso aterrizaje de emergencia a bordo de un Heinkel

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