Federico VII de Dinamarca-Cronohistoria

Federico VII

Rey de Dinamarca

FEDERICO VII, rey de Dinamarca (1848-1863) y duque de Schleswig, de Holstein y de Lauenburgo.

Hijo de Cristian VIII, n, en Copenhague el 6 de octubre de 1808 y murió en el castillo de Glücksburg el 15 de noviembre de 1863. A los diez y siete años fue nombrado general de brigada. Viajó mucho por el extranjero, por lo que permaneció casi siempre alejado de la corte, y al advenimiento de su padre (1839) se le dieron los empleos de comandante general de las tropas de Jutlandia y de Fionia, de gobernador de Odense y de consejero privado.

En 1848 sucedió a su padre, en circunstancias ciertamente bien difíciles, puesto que se habían levantado los separatistas del Schleswig-Holstein pretendiendo su entrada en la Confederación germánica, llegando incluso a constituir un Gobierno provisional en Kiel. La primera medida del nuevo rey fue destituir al antiguo Ministerio, a excepción del conde A. W. Moltke de Bregentved, al que se nombró jefe del nuevo Gabinete, cuya política debía consistir principalmente en conservar a todo trance la integridad de Dinamarca y al mismo tiempo con ceder una amplia autonomía a los dos ducados germánicos.

No bastó esto, sin embargo, y hubo que recurrir de momento a la fuerza de las armas, enviándose 11.000 dinamarqueses al Schleswig, los cuales hubieron de replegarse ante la superioridad numérica de los alemanes. Mientras tanto, las enérgicas notas enviadas por Rusia, Francia y Suecia obligaron a Prusia a evacuar los territorios ocupados, firmándose los armisticios de Mulmoe (2 de Julio y 26 de Agosto de 1848).

Al año siguiente, Prusia invadió de nuevo el Schleswig, apoderándose de casi todas las posiciones que antes ocupara, hasta que el 2 de Julio de 1850 se firmó la paz con la Confederación germánica, pero esta paz no fue efectiva hasta mucho después, debido a que quedaron en el territorio litigioso muchos oficiales y voluntarios alemanes, contra los que el Gobierno dinamarqués emprendió una rigurosa campaña. Finalmente, en 1852 los últimos soldados alemanes abandonaron el Holstein.

Ya en 1849, una Asamblea constituyente, elegida por sufragio universal, había votado una Constitución muy liberal, reformada en 1854 en el sentido de mantener la competencia del Rigsdag para el reino y el de los Estados provinciales en cada ducado para los asuntos que particularmente les incumbiesen, mientras que para los asuntos comunes a las diversas partes de la monarquía instituía un Rigsraad simplemente consultivo. Esto promovió grandes protestas, y el ministerio Oersted, impotente para afrontar la situación, dimitió el 3 de Diciembre de 1854. Le sucedió el Gabinete Scheele, que consiguió hacer aprobar las modificaciones de la ley fundamental del 5 de Junio y pudo promulgar el 2 de Octubre de 1855 una Constitución común, creando un Rigsdag compuesto de 20 individuos designados por el rey y de 60 de elección popular. Esta Constitución, sin embargo, fue suspendida por lo que se refería a los dos ducados alemanes, ante las objeciones de las Dietas de Francfort y de Kiel (Abril de 1857).

Para acallar las continuas protestas de Alemania, en 1863 se votó una nueva Constitución común al reino y al ducado dinamarqués del Schleswig. En cuanto al Holstein y al Lauenburgo, tendrían su Dieta, su administración, su hacienda y hasta su ejército especiales. Sabido es que tampoco estas concesiones arreglaron la cuestión, ya que poco después de la muerte del soberano aquellos ducados pasaron a poder de Prusia.

Federico VII se esforzó en dotar a su país de todas las conquistas liberales. En 1851 se votó la ley sobre el matrimonio civil; el mismo año se dictó una disposición ampliando la libertad de la prensa; se adoptó el servicio obligatorio; se dejó a las parroquias en libertad de elegir a su pastor; se declaró la igualdad de los dos sexos en materia de sucesión y el derecho de la mujer de disponer de su persona y de sus bienes; se concedió mayor libertad a las artes e industria; los esclavos de las Antillas dinamarquesas fueron emancipados; el Código penal se reformó en sentido liberal; se establecieron numerosas líneas férreas y telegráficas, se promulgaron nuevas leyes comunales y la hacienda se mejoró notablemente. Federico VII era apasionado por la caza y la arqueología. Él mismo dirigió varias excavaciones y publicó diversos trabajos sobre el resultado de ellas. Muy popular en Dinamarca, tiene estatuas en varias ciudades, siendo la mejor de ellas la ecuestre que decora una de las plazas de Copenhague y es obra de Bissen.

Casó en primeras nupcias con su prima Guillermina Maria, hija de Federico VI, de la que se separó en 1837, contrayendo en 1841 nuevo matrimonio con Carolina, princesa de Mecklemburgo Strelitz, que, como la anterior, no le dio hijos. Le sucedió el príncipe de Glücksburg (Cristian IX).

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