Federico IV de Dinamarca ▷ Información, Historia, Biografía y más.
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Federico IV de Dinamarca



¿Qué día cumple años Federico IV de Dinamarca?

Federico IV de Dinamarca cumple los años el 11 de octubre.


¿Qué día nació Federico IV de Dinamarca?

Federico IV de Dinamarca nació el día 11 de octubre de 1671.


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La edad actual es 352 años. Federico IV de Dinamarca cumplió 352 años el 11 de octubre de este año.


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Federico IV (Copenhague, 11 de octubre de 1671 - Odense, 12 de octubre de 1730). Rey de Dinamarca y de Noruega entre 1699 y 1730. Hijo de Cristián V y de Carlota Amalia de Hesse-Kassel.

Su época estuvo marcada por el florecimiento de la cultura nacional danesa y por la participación victoriosa en la Gran Guerra del Norte, que no representó grandes resultados para su país. El auge del comercio y sus obras de carácter religioso fueron también unas de sus obras más destacadas, lo mismo que una tormentosa vida privada.

Con la muerte de su padre en 1699, Federico accedió al trono noruego-danés como el tercer monarca absoluto de ese reino. Se había casado por conveniencia con Luisa de Mecklemburgo-Güstrow en 1695, pero en 1703 se casó, en matrimonio morganático, con Elisabeth Helene von Vieregg, cometiendo bigamia. Elisabeth murió de parto al año siguiente. Huyendo de la peste que azotó Copenhague, tanto el rey como la corte se establecieron en Koldinghus en 1711. Ahí, Federico conoció a Ana Sofía Reventlow, con quien inició una relación extramarital. En 1712, en Skanderborg, el rey se casó en secreto con Ana Sofía, concediéndole el título de "duquesa de Schleswig". La reina Luisa murió el 4 de abril de 1721, y tan sólo tres semanas después del entierro, Federico se casó nuevamente con Ana Sofía, esta vez de manera oficial, nombrándola reina. Ha sido el único rey bígamo en la historia de Dinamarca; sin embargo, su actitud nunca fue censurada por el clero danés.

Una gran parte del reinado de Federico IV estuvo marcada por la participación de Dinamarca en la Gran Guerra del Norte contra Suecia que duraría, con interrupciones, hasta 1720 y que lo confrontaría con sus primos, el rey Carlos XII de Suecia y el duque Federico IV de Holstein-Gottorp. En 1700, tropas danesas invadieron el ducado de Holstein-Gottorp, aliado de Suecia y cuya soberanía demandaba Dinamarca. Los daneses tuvieron que salir de la guerra y reconocer la independencia del ducado cuando Suecia invadió Selandia ese mismo año.

En 1709, Federico volvió a entrar a la guerra, alentado por la derrota de los suecos en la batalla de Poltava. Un gran ejército danés al mando de Christian Ditlev Reventlow invadió ese año las antiguas provincias danoparlantes del sur de la península escandinava, con la intención de arrebatarlas a Suecia. El ejército danés abandonó el sur de Suecia tras ser derrotado por Magnus Stenbock en Helsingborg en 1710.

Lo que Federico no pudo ganar en Escandinavia lo logró en Alemania, atacando las posesiones suecas y el ducado de Holstein-Gottorp. El propio monarca dirigió su ejército y aunque fue derrotado en la batalla de Gadebusch en 1712, logró derrotar a los suecos y capturar ese mismo año el principado sueco de Bremen y fomentar la entrada de Hannover a su lado en la guerra. Participó activamente en las acciones militares contra la Pomerania Sueca, en combinación con los ejércitos de Sajonia y Prusia. En 1715 consiguió la expulsión del ejército sueco del puerto de Stralsund y en 1716 la conquista de Wismar. Con sus victorias, Federico consiguió el control del norte de Pomerania.

Debilitada Suecia, Federico planeó en 1719 una nueva gran incursión contra las provincias sureñas, esta vez atacando desde Noruega. La expedición nunca se llevó a cabo, pues el 28 de octubre se pactó una tregua entre los beligerantes, y el 3 de julio de 1720 se firmó el tratado de Frederiksborg, en el que influyó de manera decisiva la Gran Bretaña, aliada de Suecia desde el año anterior. Aunque Dinamarca se hallaba en el lado vencedor, sus logros furon bastante pequeños: no pudo recuperar sus antiguas provincias del sur de la península escandinava y no pudo conservar sus conquistas en Pomerania. El logro más importante fue la reducción del ducado enemigo de Holstein-Gottorp, restableciendo así el dominio danés sobre todo el territorio de Schleswig-Holstein.

Introdujo una serie de reformas en la política interior. Se introdujo el calendario gregoriano y se abolió la vornedskabet, un tipo de servidumbre medieval que obligaba a los campesinos a permanecer en su lugar de nacimiento a menos que el propietario de las tierras consintiera su migración.

Después de la guerra, florecieron el comercio y la cultura, si bien el monarca no tenía grandes intereses culturales. Se creó el teatro danés con el inicio de brillantes carreras, como la del dramaturgo Ludvig Holberg. Federico, quien realizó dos viajes a Italia, ordenó la construcción de dos fastuosos palacios de estilo barroco italiano: el palacio de Frederiksberg y el palacio de Fredensborg. Ambos palacios fueron construidos con la finalidad de ser monumentos conmemorativos del final de la guerra contra Suecia.

Políticamente, su período estuvo marcado por su relación con los Reventlow, los parientes alemanes de su esposa Anna Sophie, al tiempo que el rey se mostraba receloso de la antigua nobleza.

Durante el gobierno de Federico, Copenhague sufrió dos desastres: la plaga de 1711 y el gran incendio de octubre de 1728 que destruyó la mayor parte de la ciudad medieval.

En su vejez, Federico se dejó envolver de pietismo. Estableció misiones protestantes en Groenlandia bajo la dirección de Hans Egede, que fueron el inicio de la colonización danesa en esa isla. Fundó 240 escuelas públicas en terrenos propiedad de la caballería real, las llamadas rytterskoler y creó el Orfanato Real de Copenhague.

Federicó IV murió el 12 de octubre de 1730 en el palacio de Odense y sus restos fueron trasladados a la catedral de Roskilde. Su viuda, la joven reina Ana Sofía, fue desterrada a Clausholm, su finca familiar.

Estuvo casado con Luisa de Mecklemburgo-Güstrow, Elisabeth Helene von Vieregg y Ana Sofía Reventlow. También tuvo una amante, Charlotte Helene von Schindel, con quien no se descarta que también se haya casado. Con todas ellas tuvo hijos, pero solo sobrevivieron dos a la edad adulta, ambos hijos de Luisa:






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