YODONA
Lifestyle

Por qu� duran hoy tan poco las relaciones de pareja (�hay algo que podamos hacer para evitarlo?)

En Espa�a, conseguir una pareja de largo recorrido se est� convirtiendo en una epopeya digna de Guinness. �No queremos atarnos o no a cualquier precio? Un estudio pionero aporta respuestas, y varios testimonios tambi�n nos dan pistas.

Actualizado
Parad�jicamente hoy m�s que nunca, seg�n los expertos, las relaciones de pareja se basan en el amor. Por eso fracasan m�s a menudo.
Parad�jicamente hoy m�s que nunca, seg�n los expertos, las relaciones de pareja se basan en el amor. Por eso fracasan m�s a menudo.Shutterstock

Aunque no haya datos oficiales sobre la duraci�n de las parejas en Espa�a, s� sabemos que los matrimonios que acaban en divorcio (7 de cada 10) viven de media 16,5 a�os, dato que dice mucho sobre la volatilidad de las relaciones en la actualidad. Aun as�, a los espa�oles nos encanta tener pareja. Lo demuestra el hecho de que aproximadamente un 70% de la poblaci�n mantenga alg�n tipo de relaci�n de este tipo, seg�n datos del CIS (2021). Nos gusta ir por la vida en compa��a, con churri incorporado, y pese al surgimiento de nuevos modelos como el poliamoroso o la novogamia ('Novogamia. M�s all� de la monogamia y del poliamor', Jorge N. Ferrer, ed. Oberon), la monogamia suele ser el norte que rige, todav�a, nuestra br�jula amorosa.

Eso s�, no es una monogamia de por vida. Como ya describiera Deborah Anapol, una de las fundadoras del movimiento poliamoroso, el modelo imperante es el que consiste en m�ltiples relaciones mon�gamas sucesivas (complementadas o no con alg�n affaire secreto cada tanto)... aunque no sea exactamente lo que buscamos. Como escribe Tamara Tenenbaum en 'El fin del amor' (ed. Seix Barral), "vamos de una relaci�n a otra en busca de un ideal y tambi�n, de frustraci�n en frustraci�n, porque "esa 'tranquilidad' con la que so�amos, esa ilusi�n de seguridad, es una fantas�a".

Pues menudo baj�n.

En una investigaci�n pionera en nuestro pa�s, 'La gesti�n de la intimidad en la sociedad digital. Parejas y rupturas en la Espa�a Actual', dirigida por el catedr�tico F�lix Requena del Departamento de Sociolog�a de la Universidad de M�laga, y desarrollada por un amplio equipo de profesores e investigadores de dicho departamento, se revelan muchas de las claves para entender el fen�meno y -qu� remedio- aceptarlo como la normalidad sobre la que se desarrolla y (apuntan todos los indicios) seguir� desarroll�ndose nuestra vida en un futuro pr�ximo. Primera conclusi�n tras leer el estudio: Las parejas actuales duran 'poco' porque pueden.

La pareja como opci�n, no como destino

No es un chiste. En un proceso imparable que arranca en los a�os 90 del pasado siglo, el emparejamiento ha pasado de ser un destino a convertirse en una opci�n. "Hist�ricamente, el proyecto de vida en com�n se asentaba en la estabilidad alrededor de la econom�a, la uni�n de dos familias y los hijos", explican los investigadores. En ese proceso ha tenido mucho que ver la laicizaci�n de la poblaci�n espa�ola, definitiva a la hora de normalizar las parejas de hecho, las del mismo sexo, el divorcio y las uniones sucesivas. El resultado es la legitimizaci�n social de casi cualquier tipo de pareja, con o sin v�nculo sellado por una autoridad. El amor, escriben los expertos, se ha vuelto "m�s individualista o confluyente, donde lo importante no es la idea comunitaria de complementariedad (la media naranja) sino la suma de las dos partes, de las dos individualidades". Vamos, en esencia, que no te necesito para completarme, que estoy contigo porque me da la gana.

Con Tinder tienes m�s parejas, pero no te aclaras

Hacia este estado 'an�mico' general nos encamin�bamos con decisi�n cuando aterrizaron entre nosotros las webs y apps de contactos tipo Tinder. Como anillo con dedo, como hambre con ganas de comer result� que casaban el nuevo orden amoroso y el nuevo escenario digital, dando a luz "un aumento de las posibilidades de emparejamientos a lo largo de la vida". Y ahora, la madre de todas las paradojas: "Esta explosi�n de interacciones dificulta la estabilidad de las uniones dando lugar a lo que la antrop�loga biol�gica Helen Fisher denomina 'amor lento'". Vamos, que antes de considerar una relaci�n como 'formal', se toman mil precauciones y se pretende conocer a fondo a la posible futura pareja. "La Encuesta de Fecundidad (INE 2018) se�ala como a una de cada cuatro mujeres mayores de 35 a�os sin hijos les gustar�a tenerelos, pero no lo hacen por no encontrar pareja estable, porcentaje que asciende hasta el 50% en hombres de entre 40 y 55 a�os".

As� que las rupturas se suceden hasta encontrar a esa persona que 'sintamos' como la pareja perfecta. "En Espa�a, en comparaci�n con lo que ocurr�a en la d�cada de los a�os 80, donde las rupturas de pareja eran escasas y sancionadas socialmente, en la actualidad la sociedad es muy tolerante a la aceptaci�n del divorcio con unos niveles similares a la media europea", explica el estudio. Los sentimientos y las emociones se han convertido, a�ade, en el pilar b�sico de las relaciones, no la conveniencia, el deber o las expectativas sociales. Y cuando consideramos que esos sentimientos y emociones no son los que deber�an ser, pues... hasta luego, Federico. "Las parejas actuales apoyan sus relaciones sobre arenas movedizas mucho m�s flexibles, convirti�ndose en uniones mucho m�s fr�giles que las existentes en otras �pocas".

Relaciones intensas pero de cristal

"Muchas relaciones que comienzan de forma muy intensa", prosiguen los expertos, "acaban igualmente r�pido, apareciendo el desamor e incluso las 'relaciones negativas'; en otras ocasiones es el desgaste de las uniones, las infidelidades, la p�rdida de ilusi�n e incluso el deterioro del proyecto compartido, lo que perjudica a las parejas, de modo que la ruptura es una opci�n real durante todo el ciclo de vida". Si a eso sumamos la ya comentada aceptaci�n social de la ruptura y las 'facilidades' para asumirla (la independencia econ�mica de ambos miembros de la pareja, entre ellas), tenemos el c�ctel perfecto para decir adi�s sin m�s dilaci�n.

El efecto de esta permanente posibilidad de ruptura es "un amor m�s l�quido en el que es muy importante c�mo se sientan ambos miembros de la pareja, saber gestionar sobre todo los desacuerdos y estar preparados para un desencuentro emocional. Las parejas en el contexto actual, basadas casi exclusivamente en el amor, son m�s conscientes de la probabilidad de que pueda aparecer el desamor".

�Y esto va a seguir as� indefinidamente?

De cara al futuro, escriben los expertos, nuestra sociedad, cada vez m�s digital "se caracterizar� por la normalizaci�n de las rupturas en el sentido de que las generaciones se socializar�n en la ruptura, tanto por su padres como por la acumulaci�n de experiencias propias, y vivir�n este proceso de forma menos traum�tica que generaciones anteriores". Posiblemente, pronostica esta investigaci�n, "el mayor impacto respecto a las sociedades actuales sea la presencia de emparejamientos sucesivos tambi�n en las generaciones m�s mayores". En resumen, que caminamos hacia rupturas a�n m�s frecuentes e indoloras, porque estaremos preparados para ello. La pregunta inevitable es: �no nos dar� un perez�n tremendo?

La otra cara de la moneda

Sin embargo, hay parejas que duran hasta que la muerte las separa, y son felices. Un estudio estadounidense que lleva desde 1938 siguiendo las vidas de m�s de 2.000 personas para averiguar qu� es lo que las hace felices ha determinado, al menos de momento, que la piedra filosofal de la felicidad es... una relaci�n de pareja duradera y fuerte.

El problema es que esa idea que tenemos del amor... se queda un poco corta para las relaciones de largo recorrido. Si prestamos o�dos a los distintos estudios que se han realizado sobre la duraci�n de lo que consideramos enamoramiento, como uno realizado por bioqu�micos del Albert Einstein College of Medicine de Nueva York, resulta que lo que todos reconocemos como amor rom�ntico durar�a solo 28 meses y el enamoramiento intenso, un a�o y medio.

�Existe una f�rmula para el amor?

Los de este instituto cient�fico no son los �nicos investigadores que en las �ltimas d�cadas se han dedicado a la b�squeda de la f�rmula del amor, incluida la del amor duradero. Una de las teor�as m�s renombradas es la del psic�logo y profesor de Desarrollo Humano en la Universidad de Cornell Robert J. Sternberg, la llamada teor�a triangular del amor, seg�n la cual intimidad, pasi�n y compromiso ser�an los pilares de una buena relaci�n sentimental.

Sin embargo, esa teor�a ha sido posteriormente contestada por diversos estudios acad�micos, ya que el amor se ha convertido en un atractivo objeto de estudio para muchos investigadores y asociaciones. Como Richard Schwartz, profesor de Psiquiatr�a de la Harvard Medical School (HMS), que ha construido su carrera en torno al tema. Seg�n este experto, "sabemos mucho m�s cient�ficamente sobre el amor y el cerebro que hace un par de d�cadas... �pero creemos que de verdad eso nos hace mejores en el amor o en ayudar a las personas amorosamente? Probablemente no mucho". Al final, no hay una f�rmula, o al menos no una �nica que sirva para todo el mundo. Despu�s de todo, el amor es el resultado de una f�rmula tan compleja como lo son sus protagonistas. As� que hemos buscado parejas reales y que cuentan ya con un largo recorrido a dos para que nos den su opini�n sobre las claves que han convertido las suyas en parejas longevas.

Hablan los protagonistas

Respeto y apoyo mutuo.

Marelis y Luis, venezolanos

"Llevamos 17 a�os juntos. Diez de ellos los declaramos de 'supervivencia' (chavismo y destrucci�n de nuestro statu quo). Creo que ha prevalecido el respeto y el apoyo mutuo, sin lo cual no habr�amos podido seguir juntos cuando no hab�a pan en la mesa (ni agua, ni electricidad ni medicamentos). Nos convertimos en un equipo, me parece, en mejores amigos (aunque esto suene a clich�)... En fin, estar para el otro, respetarlo, apoyarlo y sentir que todo esto es rec�proco. Creo que es all� desde donde se construye el amor que nos tenemos".

Estar en el mismo 'mood'

Marta y Javier, madrile�os

"Pronto cumpliremos 17 a�os juntos. Para que una relaci�n dure creo que las dos personas deben estar en el mismo mood: quiero una relaci�n. Suena a perogrullo, pero es b�sico. Que se compartan intereses vitales; clave en mi relaci�n es que sabemos que los ni�os no son una opci�n para ninguno de los dos. Al margen de esto, la clave est� en escuchar, entender y ponerse en la piel del otro; respetar espacios, f�sicos o mentales. Lo mismo con los amigos. El humor (incluido saber re�rse de uno mismo). Y el respeto: si est�s con alguien, respeta sus peculiaridades, incluso sus defectos. Si son insalvables la relaci�n no durar�, pero los defectos de cada persona, eso que menos te gusta de ella, no va a cambiar por ti".

Tener los mismos gustos.

Ana y Antonio, madrile�os

"En febrero haremos 24 a�os casados y fuimos novios durante 11. �El secreto? Y yo qu� s�... Creo que es que nos gustan las mismas cosas y la misma forma de vivir. Ejemplos tontos: somos capaces de ir al bar de abajo de casa ocho viernes seguidos y no cansarnos. No nos gustan los cambios, no nos importa la rutina, no hacemos deporte, nos gustan (casi siempre) las mismas series y pel�culas, las mismas comidas... Yo creo que est� ah�. Por no hablar de los hijos (y del perro), que te atan. Tambi�n creo que al haber empezado tan j�venes no hay secretos: s� perfectamente qu� va a hacer y decir en todo momento, pero eso no me molesta ni me aburre, al rev�s, me da seguridad. Igual es m�s divertido otro tipo de relaci�n, pero tambi�n m�s insegura, y yo ya estoy de salida, es decir, solo quiero paz y tranquilidad en todos los �mbitos".

Conforme a los criterios deThe Trust Project

Saber más
LifestyleUna semana sin bragas, lo hemos probado y estas son las conclusiones
LifestyleEl pr�ncipe Harry, Joaqu�n de Dinamarca, Magdalena de Suecia y otros hijos respondones
LifestyleIsabel Preysler y Tamara, Carolina de M�naco y Carlota, Cayetana de Alba y Eugenia... �Se hereda la manera de amar?