Ernesto de Hannover, 70 a�os en el ojo del hurac�n

Ernesto de Hannover, 70 a�os en el ojo del hurac�n

Joaquina Due�as MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

La vida del pr�ncipe alem�n y exmarido de Carolina de M�naco ha estado siempre envuelta en la pol�mica

26 feb 2024 . Actualizado a las 17:13 h.

Ernesto de Hannover ha cumplido este lunes 26 de febrero 70 a�os. Siete d�cadas de una vida repleta de esc�ndalos y controversias que siguen acompa��ndolo 25 a�os despu�s de su matrimonio con la princesa Carolina de M�naco, de quien se separ� oficialmente en el verano del 2009 y con quien contin�a casado a pesar de llevar una nueva vida en Madrid y de mantener desde el 2021 una relaci�n con Claudia Stilianopoulos, hija del diplom�tico filipino Mike Stilianopoulos y de Pitita Ridruejo.

Primog�nito de Ernesto Augusto IV, pr�ncipe de Hannover y duque de Brunswick y L�neburg, y de la princesa Ortrud de Schleswig-Holstein-Sonderburg-Gl�ksburg, desde bien joven apuntaba maneras. Solo ten�a 15 a�os cuando le retiraron el carn� de motos por ocasionar un accidente. Despu�s de aquel incidente se march� a estudiar a Inglaterra, donde estuvo un trimestre en un prestigioso internado para ingresar a continuaci�n en el Royal Agricultural College de Cirencester, desde donde dio el salto a Canad� para continuar con sus estudios.

En agosto de 1981, se cas� con Chantal Hochuli, rica heredera de un multimillonario arquitecto suizo que no ten�a sangre real pero que se convirti� en una de las mujeres m�s influyentes de la sociedad europea. La pareja se instal� en Londres y tuvieron dos hijos, Ernesto Augusto y Christian.

La figura de Ernesto de Hannover era conocida en los c�rculos aristocr�ticos y en la prensa especializada, pero no llamaba especialmente la atenci�n hasta que en 1996 comenzaron a surgir los rumores que le relacionaban con una amiga de toda la vida, Carolina de M�naco. �l continuaba casado y, sin embargo, se lo ve�a junto a la princesa monegasca recorriendo el mundo. No fue hasta 1997 cuando el alem�n y su esposa se divorciaron y solo dos a�os despu�s, en enero de 1999, daba el �s�, quiero� a la hermana de Alberto de M�naco. En julio de ese mismo a�o nac�a su primera y �nica hija en com�n, Alejandra.

El alem�n no llev� nada bien convertirse en objetivo de la prensa y fueron sonados sus enfrentamientos con fot�grafos y periodistas. De hecho, antes incluso de su boda, en 1998, fue condenado por agredir a un fot�grafo en el Festival de Salzburgo. Adem�s de mostrar conductas violentas de manera recurrente, su afici�n a la bebida era notoria y se le vio miccionando en p�blico, amenazando a empleados e incluso a polic�as. Los esc�ndalos se suced�an hasta en los compromisos internacionales. Para el recuerdo queda la imagen de la princesa Carolina llegando sola con su traje de chaqueta celeste y pamela a juego a la boda del pr�ncipe Felipe y Letizia tras el plant�n de Hannover que se recuperaba de una tremenda resaca.

Los problemas con el alcohol fueron tan graves que, en abril del 2005, solo unos d�as antes de la muerte de su suegro, Rainiero de M�naco, fue ingresado de urgencia por una pancreatitis aguda que lo llev� a permanecer en coma durante varias horas. Fue el principio del fin de su matrimonio, que termin� en el 2009, y el primero de varios graves problemas de salud que se han venido sucediendo. En el 2011 tuvo una infecci�n abdominal que lo oblig� a ingresar en un hospital de Ibiza. En el 2016 fue operado de urgencia de coraz�n y en el 2019 volvi� a sufrir una pancreatitis y varias hemorragias internas, al tiempo que le era diagnosticado un tumor maligno en el cuello.

Sin embargo, su delicada salud no le libr� de seguir vi�ndose implicado en esc�ndalos y en el 2021 fue condenado a diez meses de prisi�n en Austria por herir ebrio a un polic�a y amenazar a otro con un bate de b�isbol. Una pena que le fue suspendida y por la que tuvo que ir a terapia. Una vida plagada de desmanes que le llevaron a dilapidar su fortuna hasta quedar al borde de la bancarrota, seg�n la prensa alemana.

Entre el 2007 y el 2014 don� a su hijo mayor, Ernesto Augusto, el control de la fortuna familiar, incluido el castillo de Marienburg, uno de los emblemas de los Hannover que el hijo don� al estado de Baja Sajona en el 2018 para poder hacer frente a los gastos de mantenimiento. Esta decisi�n provoc� un cisma entre padre e hijo que termin� en los juzgados.

En medio de toda esta vor�gine, el pr�ncipe alem�n encontr� la estabilidad al lado de la artista Claudia�Stilianopoulos. Los hemos visto viajar, salir a comer y disfrutar en familia, pero tambi�n discutir acaloradamente en plena calle, aunque la �ltima imagen que tenemos de la pareja es del pasado 13 de febrero, compartiendo almuerzo en un exclusivo restaurante de Madrid con Christian de Hannover, hijo menor del primer matrimonio de Ernesto, y Casilda Garaiz�bal, una de las dos hijas que Claudia tuvo con el artista conceptual Juan Garaiz�bal, nieto del fundador de Viajes Marsans. Un plan familiar que parec�a satisfacer a todos a tenor de las sonrisas de los cuatro.