La mansión donde vivieron (y murieron) los duques de Windsor en París se convertirá en museo

Los duques de Windsor residieron en esta villa durante 30 años, hasta la muerte de Wallis Simpson en 1986.

Eduardo VIII y Wallis Simpson

Bettmann

La antigua residencia de los duques de Windsor en París se convertirá en museo, según acaba de anunciar el ayuntamiento de París. El magnífico edificio situado en el Bois de Boulogne, conocido como ‘Villa Windsor’, fue el hogar del antiguo rey Eduardo VIII y su esposa, Wallis Simpson, durante 30 años, hasta la muerte de la duquesa en 1986. La mansión también iba a ser el hogar de Diana, la princesa de Gales, que visitó la propiedad con su pareja, Dodi Al Fayed, horas antes de su fatal accidente en 1997. 

Situada en un terreno de dos hectáreas a las afueras del distrito XVI de París, esta casa de piedra caliza tiene 14 dormitorios, una puerta de entrada con pilares, balcones de hierro forjado y ventanas en forma de arco. La grandeza y elegancia típicamente aristocráticas pueden admirarse en la tercera temporada de The Crown, donde aparece como residencia del duque de Windsor.

La duquesa de  Windsor en su casa del Bois de Boulogne, 1974

United Archives/Getty Images

La mansión de los duques de Windsor, 1974

United Archives/Getty Images

El ayuntamiento de París ha cedido la villa, que ha perdido parte de su antiguo esplendor, a la Fundación Monsart para convertirla en un lugar abierto al público con el fin de fomentar el patrimonio, la cultura, la naturaleza y la agricultura urbana, según declaraba el ayuntamiento.

Eduardo VIII y Wallis Simpson abandonaron el Reino Unido tras la decisión del rey de abdicar para poder casarse con una mujer divorciada. La pareja alquiló la magnífica residencia parisina al ayuntamiento de 1956 a 1986. Bajo la atenta supervisión de la recién nombrada duquesa de Windsor, la mansión fue redecorada con la ayuda de Stéphane Boudin, un diseñador que más tarde participó en el diseño de las habitaciones de Jackie Kennedy en la Casa Blanca. 

La reina Isabel II con el príncipe Carlos durante una visita a los duques de Windsor, 1972

Hulton Archive/Getty Images

“Cuesta creer que haya existido jamás un interior más absolutamente pulcro”, afirmaba el fotógrafo de Vogue Horst V Horst sobre la mansión, según publicaba Architectural Digest, "donde el cristal fuera más genuinamente brillante y la porcelana más luminosa, o donde pudiera decirse con mayor exactitud que la madera y el cuero, pulidos hasta alcanzar la consistencia de una piedra preciosa, brillan". Los duques murieron en la casa, en 1972 él y en 1986 ella. La reina, el duque de Edimburgo y el príncipe Carlos visitaron a los duques de Windsor en la propiedad poco antes de la muerte del duque de Windsor.

Tras la estancia de sus primeros residentes reales, Mohammed Al Fayed firmó un contrato de alquiler de 50 años y redecoró la mansión, bautizándola como ‘Villa Windsor’. Afirmó que estaba destinada a convertirse en el hogar de la princesa Diana y su hijo, Dodi Al Fayed. Ambos hicieron una visita de media hora el día antes de sus trágicas muertes. 

La Fundación Monsart tiene por objeto preservar y promover el patrimonio francés y gestiona una gran colección de archivos y obras de arte, que exhibe a un amplio público cada año, según cuenta en su página web. El anuncio se produce pocos días antes de la visita de Estado del rey Carlos III y la reina consorte a Francia

Artículo publicado por Tatler y traducido por Isabel Escribano Bourgoin. Acceda al original aquí.