Jason Tanner
Mansoor, a 3-year-old girl is given intravenous fluids and a mango fruit juice drink by her brother, Answais on a ward at a hospital in Muzzafargarh (Pakistan). Mansoor and her family were evacuated from flooding that devastated their village. She was brought to the hospital today with symptoms of diarrhoea, vomiting and high fever. As fears of waterborne diseases spreading to those in the affected areas, Aid agencies have been warning of the dangers of an outbreak of cholera since the onset of the floods.
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Enfermedades diarreicas

7 de marzo de 2024

Datos y cifras

  • Las enfermedades diarreicas son la tercera causa de muerte en niños de 1 a 59 meses de edad. Son prevenibles y pueden tratarse.
  • Cada año, la diarrea mata a 443 832 niños menores de 5 años y a otros 50 851 niños de 5 a 9 años.
  • Una proporción importante de las enfermedades diarreicas puede prevenirse mediante el suministro de agua potable salubre y un saneamiento e higiene adecuados.
  • A nivel mundial, cada año se producen casi 1 700 millones de casos de enfermedades diarreicas infantiles.
  • La diarrea es una de las mayores causas de malnutrición en niños menores de 5 años.

Generalidades

Las enfermedades diarreicas son la tercera causa de muerte en niños menores de 5 años: cada año mueren 443 832. La diarrea puede durar varios días y dejar el cuerpo sin el agua y las sales que necesita para vivir. En el pasado, la deshidratación grave y la pérdida de líquidos eran, en la mayoría de casos, las principales causas de muerte por diarrea. En la actualidad es probable que otras causas, como las infecciones bacterianas septicémicas, sean responsables de una proporción cada vez mayor de muertes relacionadas con la diarrea. Los niños malnutridos o inmunodeprimidos, así como las personas que viven con el VIH, son los que presentan el mayor riesgo de padecer enfermedades diarreicas potencialmente mortales.

Se define como diarrea la deposición, tres o más veces al día (o con una frecuencia mayor que la normal para la persona), de heces sueltas o líquidas. La deposición frecuente de heces formes (de consistencia sólida) no es diarrea, ni tampoco la deposición de heces de consistencia suelta y pastosa por bebés amamantados.

La diarrea suele ser un síntoma de infección en el tracto digestivo, que puede estar ocasionada por muy diversos organismos bacterianos, víricos y parásitos. La infección se transmite por alimentos o agua para beber contaminados, o bien de una persona a otra como resultado de una higiene deficiente.

Las intervenciones destinadas a prevenir las enfermedades diarreicas, en particular el acceso al agua potable salubre, un saneamiento mejorado y el lavado de las manos con jabón, permiten reducir el riesgo de enfermedad. Las enfermedades diarreicas deberían tratarse con una solución de rehidratación oral (SRO): una mezcla de agua limpia, sal y azúcar. Además, el tratamiento durante 10 a 14 días con suplementos de zinc en comprimidos dispersables acorta la duración de la diarrea y mejora los resultados.

Hay tres tipos clínicos de enfermedades diarreicas:

  • la diarrea líquida aguda, que dura varias horas o días; por ejemplo la provocada por el cólera;
  • la diarrea con sangre aguda, también llamada disentería;
  • y la diarrea persistente, que dura 14 días o más.

Alcance de las enfermedades diarreicas

Las enfermedades diarreicas son una de las mayores causas de mortalidad y morbilidad en la niñez en el mundo, y por lo general son consecuencia de la exposición a alimentos o agua contaminados. En el mundo hay 780 millones de personas que carecen de acceso a suministros mejorados de agua potable y 2 500 millones de personas que no cuentan con servicios de saneamiento mejorado. La diarrea causada por infecciones es frecuente en los países en desarrollo.

En países de ingreso bajo, los niños menores de 3 años sufren, de promedio, tres episodios de diarrea al año. Cada episodio priva al niño de los nutrientes necesarios para su crecimiento. En consecuencia, la diarrea es una importante causa de malnutrición, y los niños malnutridos son más propensos a sufrir enfermedades diarreicas.

Deshidratación

La amenaza más grave de las enfermedades diarreicas es la deshidratación. Durante un episodio de diarrea, se pierde agua y electrolitos (sodio, cloruro, potasio y bicarbonato) en las heces líquidas, los vómitos, el sudor, la orina y la respiración. Cuando estas pérdidas no se restituyen, se produce deshidratación.

Los grados de deshidratación pueden ser tres:

  • deshidratación grave (se observan al menos dos de los signos siguientes):
    • letargo o pérdida de conocimiento
    • ojos hundidos
    • incapacidad o casi incapacidad para beber
    • retorno lento (2 segundos o más) a la normalidad después de pellizcar la piel
  • deshidratación moderada (se observan dos o más de los signos siguientes):
    • desasosiego o irritabilidad
    • ojos hundidos
    • ganas de beber, sed
  • ausencia de deshidratación (no hay signos suficientes para diagnosticar una deshidratación grave o moderada).

Causas

Infección: la diarrea es un síntoma de infecciones ocasionadas por muy diversos organismos bacterianos, víricos y parásitos, la mayoría de los cuales se transmiten a través de aguas contaminadas por heces. La infección es más común cuando hay escasez de higiene y servicios de saneamiento adecuados, y de agua potable para beber, cocinar y lavar. Entre los niños menores de 5 años, los agentes patógenos virales más comunes son los rotavirus, norovirus, adenovirus y astrovirus. Entre los patógenos bacterianos figuran Escherichia coli, Salmonella spp., Shigella spp. y Campylobacter spp., y entre los patógenos parásitos Cryptosporidium, Giardia y Entamoeba spp. Los rotavirus y las bacterias E. coli son los patógenos más comunes entre los niños de todos los grupos de edad, mientras que los patógenos parásitos son frecuentes en los niños de 3 a 5 años. Los patógenos bacterianos, entre ellos E. coli, Salmonella y Shigella, son comunes en el grupo de edad de 6 a 10 años, igual que lo eran los rotavirus, norovirus y sapovirus. Es necesario tener en cuenta etiologías específicas de cada lugar.

Malnutrición: los niños que mueren por diarrea suelen padecer malnutrición subyacente, lo que les hace más vulnerables a las enfermedades diarreicas. A su vez, cada episodio de diarrea empeora su estado nutricional. La diarrea es una de las mayores causas de malnutrición en niños menores de 5 años.

Fuente de agua: el agua contaminada con heces humanas procedentes, por ejemplo, de aguas residuales, fosas sépticas o letrinas, es particularmente peligrosa. Las heces de animales también contienen microorganismos capaces de ocasionar enfermedades diarreicas.

Otras causas: las enfermedades diarreicas también pueden transmitirse de persona a persona, en particular por falta de higiene personal adecuada. Los alimentos elaborados o almacenados en condiciones poco higiénicas son otra causa principal de diarrea. El almacenamiento y la manipulación del agua para el hogar de forma insegura es también un factor de riesgo importante. Asimismo, pueden ocasionar enfermedades diarreicas el pescado y marisco de aguas contaminadas.

Prevención y tratamiento

Entre las medidas clave para prevenir las enfermedades diarreicas cabe citar las siguientes:

  • el acceso a agua potable salubre
  • el uso de servicios de saneamiento mejorado
  • el lavado de manos con jabón
  • la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida
  • una higiene personal y alimentaria correctas
  • la educación sobre salud en cuanto a los modos de transmisión de las infecciones
  • la vacunación contra rotavirus.

Entre las medidas clave para tratar la diarrea cabe citar las siguientes:

  • Uso de soluciones salinas de rehidratación oral (SRO). La SRO es una mezcla de agua limpia, sal y azúcar. Cada tratamiento cuesta unos pocos céntimos. Se absorbe en el intestino delgado y repone el agua y los electrolitos perdidos en las heces.
  • Complementos de zinc: reducen un 25% la duración de los episodios de diarrea y se asocian con una reducción del 30% del volumen de las heces.
  • Rehidratación con líquidos por vía intravenosa: en caso de deshidratación grave o estado de choque.
  • Alimentos ricos en nutrientes. El círculo vicioso de la malnutrición y las enfermedades diarreicas puede romperse continuando la administración de alimentos nutritivos —incluida la leche materna— durante los episodios de diarrea, y proporcionando una alimentación nutritiva —incluida la alimentación exclusiva con leche materna durante los seis primeros meses de vida— a los niños cuando están sanos.
  • Consultar a un profesional de la salud, en particular para el tratamiento de la diarrea persistente o cuando haya sangre en las heces o signos de deshidratación.

Respuesta de la OMS

La OMS trabaja con los Estados Miembros y con otros asociados para:

  • promover políticas e inversiones nacionales que apoyen el tratamiento de casos de enfermedades diarreicas y sus complicaciones, y que amplíen el acceso al agua potable salubre y a los servicios de saneamiento en los países en desarrollo;
  • realizar investigaciones orientadas a desarrollar y probar nuevas estrategias de prevención y control de la diarrea en esta esfera;
  • fortalecer la capacidad para realizar intervenciones de prevención, en particular las relacionadas con el mejoramiento de las fuentes de agua y el saneamiento, así como con el tratamiento y almacenamiento seguro del agua para los hogares;
  • desarrollar nuevas intervenciones de salud, como la inmunización contra los rotavirus, y
  • contribuir a la capacitación de los trabajadores de la salud, especialmente en el ámbito comunitario.