LITERATURA
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David Walliams, el rey de la literatura infantil: "Los ni�os quieren algo que les entretenga. �C�mo voy a competir yo con un m�vil?"

Ingenioso, incorrecto y autopar�dico, el escritor brit�nico leer� el preg�n del D�a de Sant Jordi en Barcelona: "El humor es como estar caminando por la cuerda floja, en tensi�n permanente".

David Walliams.
David Walliams.SERGIO ENR�QUEZ NISTAL
Actualizado

A David Walliams (Londres, 52 a�os) le importa lo justo lo que piensen de �l. Williams de nacimiento -un apellido demasiado gen�rico-, decidi� cambiar su nombre art�stico para darle un poco m�s de chispa y tomarse, de paso, un poco menos en serio. Como una caricatura de s� mismo, la de un brit�nico estereot�pico, pide un t� y unos chocolates para endulzar la conversaci�n a las cinco de la tarde. �Me gusta el chocolate negro porque puedo comer m�s�, aclara al tercer bomb�n.

El exitoso autor pasa unos d�as por Madrid antes de coger el tren a Barcelona, donde pronunciar� el preg�n del D�a de Sant Jordi esta misma tarde. �Para m� es surrealista escribir una historia y que alguien en Espa�a, a kil�metros de mi sal�n, la est� disfrutando tanto como yo. Si lo piensa, es demencial. As� que tener la oportunidad de encontrarme con los lectores y compartir este discurso tan importante me hace mucha ilusi�n y, a la vez, me pone muy nervioso�, reconoce.

Para saber m�s

Walliams es el primer escritor de literatura infantil y juvenil que goza de tal privilegio en toda la historia de SantJordi y, si echamos un vistazo a las listas de ventas, sobran las razones para su elecci�n: m�s de 56 millones de ejemplares de sus cuentos y novelas se han vendido en todo el mundo, traducidas a 55 idiomas -entre ellos, el espa�ol y el catal�n.En su curr�culo aparecen t�tulos como La abuela g�ngster, Perrobot y Bocadillos de rata.

Walliams ha alcanzado por m�rito propio el �xito, pero este provoca que, inevitablemente, su obra sea comparada con otro genio de la literatura brit�nica, Roald Dahl, con el que comparte el estilo sarc�stico y mordaz. �Agradezco existir en el mismo universo que Dahl, lo admiro much�simo y ha sido un maestro para todos los que nos dedicamos a esto. Pero intento no escuchar lo que dice la gente porque no siempre corres el riesgo de creerla: igual que te comparan con �l, pueden empezar a decir que tus libros son una mierda. Me limito a escuchar �nicamente a mi propia conciencia�, dice.

El a�o pasado, buena parte de la obra de Roald Dahl estuvo a punto de ser censurada en su versi�n original. La editorial Puffin, en connivencia con los herederos del escritor, quiso extirpar de las p�ginas de Charlie y la f�brica de chocolate, Las brujas o Matilda expresiones consideradas ofensivas, como �gordo�, �enano� o �vieja fea�. �Creo que lo pol�ticamente correcto se nos est� yendo de las manos, no pienso que a la gente le moleste que haya ciertas palabras poco apropiadas en un libro que se escribi� hace 50 o 60 a�os. Quiz� no estoy en el grupo social adecuado, pero no me ofenden esas cosas. Incluir una nota o aviso que explique el contexto puede ser educativo, pero alterar significativamente el sentido de un texto me parece vandalismo�, opina Walliams.

�Es algo que me preocupa porque �qu� vamos a llegar a hacer, entonces? �Vamos a cortar escenas de pel�culas, reeditar las letras de las canciones, cubrir los cuadros, prohibir obras de teatro? Nos vamos a volver locos con todo esto de la censura si no se pone fin, s�lo porque alguien decidi� empezar a se�alar lo que no le parec�a bien en un momento dado�.

Precisamente en El chico del vestido (2008) -ilustrado por Quentin Blake, como la mayor�a de los libros de Dahl- Walliams narra la historia de Dennis, un ni�o de 12 a�os aspirante a futbolista, que es animado por un amigo rebelde a travestirse. Las reacciones de su familia, colegas y compa�eros de colegio no se hacen esperar. Tampoco las de los lectores (adultos) y la cr�tica. �Por qu� los padres parecen m�s preocupados por lo que leen sus hijos que por las amenazas que pueden toparse en internet, lejos de su control?

Estamos siendo demasiado sobreprotectores, no dejamos que los ni�os encuentren algo que les resulte v�lido fuera de lo que consideramos estrictamente apropiado. Es una actitud bastante esnob�, se�ala Walliams. �De joven ve�a pel�culas de pistoleros, escenas de acci�n violentas donde daban bofetadas o se dirig�an a las mujeres de forma machista, como en la saga de James Bond. Yo sab�a que eso no estaba bien, he ido constat�ndolo conforme crec�a, pero nunca me provocaron un trauma�, sostiene.

Adem�s de escritor, el prol�fico David Walliams tambi�n ha desarrollado una multifac�tica carrera como actor, c�mico y presentador. Comenz� como humorista en las series de televisi�n Little Britain y Rock Profile y comparti� mesa de jurado con el pol�mico Simon Cowell en el concurso televisivo Britain's Got Talent. Explica que, en el humor, hay �una delgada l�nea� entre lo que puede decirse y lo que no: �A veces es como estar caminando por la cuerda floja, en tensi�n permanente, cuando se tratan temas inc�modos. Pero creo que, en cierto modo, todos nos autocensuramos a diario. Es algo tan simple como no decir todo lo que pensamos cuando estamos hablando con alguien�.

Las publicaciones de Walliams se han convertido en una de las marcas de entretenimiento multimedia m�s importantes del Reino Unido en la actualidad. Varias de sus novelas y cuentos han permanecido durante 79 semanas en el primer puesto de las listas generales de libros m�s vendidos y m�s de 241 semanas en las listas infantiles, un logro que ning�n otro escritor infantil ha alcanzado en su pa�s. Su universo literario incluye, adem�s, adaptaciones televisivas, producciones teatrales, una l�nea de merchandising e incluso una atracci�n en el parque tem�tico Alton Towers. A�n as�, en plena efervescencia tecnol�gica, Walliams reconoce que es m�s dif�cil que nunca llamar la atenci�n de los ni�os ya que �la competencia es demasiado atractiva�.

�Es todo un reto porque hay infinitas distracciones y est�mulos. Cuando yo era peque�o, s�lo hab�a un canal en abierto, y la programaci�n de dibujos animados empezaba a las cuatro y media de la tarde. El resto del tiempo, nada. Ahora mi hijo de 10 a�os tiene una consola, un iPad para ver series y pel�culas y un tel�fono m�vil. �Qu� vas a hacer contra eso? Los ni�os quieren algo que los entretenga, as� que yo trato de hacer mis libros lo m�s entretenidos posibles para estar a la altura de sus expectativas�, dice. �Es verdad que todos hemos le�do libros aburridos, es parte del proceso de formarnos como lectores, pero si conseguimos engancharlos con fen�menos intergeneracionales como el de Harry Potter, luego ser�n ellos mismos los que reclamen ir a la librer�a�.