Castillos de Escocia: los 10 castillos más famosos de Escocia

Castillos de Escocia

En Escocia la construcción más atractiva para cualquier viajero son sus antiguos castillos, residencia de clanes familiares y guarida de reinas exiliadas; escenario de batallas legendarias y protagonistas de mitos y leyendas escoceses. Rodeados, habitualmente, de un paisaje impresionante, son una visita obligada en Escocia.

Pero existen más de 3.000 (¡3.000!) castillos en Escocia, por lo que conviene hacer una selección de los que más nos interesa visitar antes de emprender el viaje.

¿Los imprescindibles en un primer viaje a Escocia? El Castillo de Edimburgo, el Castillo de Stirling y el de Urquhart. Pero hay muchos más y, si tienes tiempo suficiente en tu viaje por las Tierras Altas, podrás comprobarlo.

Vamos a conocer cuáles son los castillos más famosos de Escocia:

1. Castillo de Edimburgo

Una de las principales atracciones de Edimburgo es, sin duda, su castillo, o más bien el complejode edificios que forman parte de él, situados sobre el extremo más elevado de la Royal Mile, en el tramo conocido como Castlehill. Y es que el castillo de Edimburgo cuenta con varios puntos de interés, como el One o’clock Gun, la capilla de Santa Margarita, la Piedra de Scone, el famoso cañón Mon’s Meg, los Honores de Escocia (el tesoro de la Corona) o el Museo Nacional de la Guerra.

El Castillo de Edimburgo es el más visitado de toda Escocia y, además, ofrece una de las mejores panorámicas de la ciudad desde sus miradores. Durante el Festival de Edimburgo es el escenario donde tiene lugar el Military Tattoo, una puesta en escena con música y espectáculo en directo protagonizada por bandas militares procedentes de diversos países del mundo. ¡Un imprescindible!

2. Castillo de Stirling

El Castilo de Stirling es la visita estrella de la ciudad; al igual que el de Edimburgo, por razones defensivas, se sitúa sobre una colina elevada sobre el resto de Stirling, por lo que también cuenta con muy buenas vistas de los alrededores y del Monumento a William Wallace.

¿Te gustaría visitar el Castillo de Stirling? Recuerda que en nuestra excursión a Stirling y el Parque Nacional de los Trossachs tenemos tiempo para visitarlo.

Su aspecto de fuerte es inconfundible, y en su interior alberga varios espacios de interés como la Capilla Real, el Palacio Real o el Grab Salón. Tampoco hay que perderse las cocinas o los jardines de la reina Ana. Junto a él se encuentra un museo dedicado a los highlanders, un regimiento que formó parte de varios conflictos bélicos.

3. Castillo de Urquhart

En el tercer puesto de esta lista tenemos el Castillo de Urquhart, que también es el tercero más visitado de Escocia. Y no es para menos: situado en uno de los lugares más famosos de Escocia, a orillas del Lago Ness, la imagen de las ruinas del castillo enmarcadas por un entorno natural de gran belleza es inolvidable.

En nuestra excursión a Lago Ness y las Highlands tenemos tiempo para realizar un crucero por el Lago Ness que nos permitirá contemplar el castillo de Urquhart desde una perspectiva única. Además, te damos la oportunidad de visitarlo por dentro. ¡No te lo pierdas!

Este castillo existe desde nada menos que el siglo XIII, por lo que es uno de los más antiguos de Escocia, y fue construido por el clan de los Durward. Durante la guerra con Inglaterra en el siglo XVII, el Castillo de Urquhart quedó parcialmente dañado, y desde entonces nunca fue restaurado, así que tal cual quedó entonces, podemos contemplarlo hoy en día.

4. Castillo de Eilean Donan

En el extremo noroccidental de Escocia, poco antes de cruzar a la Isla de Skye, muy cerca de Kyle of Lochalsh, se encuentra este castillo de cuento que hará las delicias de los amantes de la fotografía. El Castillo de Eilean Donan luce espectacular en cualquier momento del día y en cualquier época del año (te sonará si has visto la película Los Inmortales o Braveheart) y es una visita obligatoria si viajas a Escocia y vas a visitar la Isla de Skye.

Unido a tierra solo por un puente, fue fundado a comienzos del siglo XIII y desde entonces ejerció como residencia para uno de los clanes escoceses más relevantes, la familia McRae, hasta su abandono definitivo en el siglo XVIII, cuando las coronas inglesa y escocesa quedaron unidas. No obstante, al contrario que el castillo anterior, el Castillo de Eilean Donan sí que sería reconstruido a comienzos del siglo XX, y desde entonces se ha convertido en uno de los castillos favoritos por los turistas que visitan Escocia.

5. Castillo de Blair

He aquí un castillo diferente a todos los anteriores; para empezar, el Castillo de Blair es de color blanco inmaculado, y se asemeja más a un palacete que a una fortaleza. Sin embargo, es prácticamente igual de antiguo que los castillos más visitados de Escocia: lleva en pie desde el siglo XIII, y ha sido residencia del clan Murray hasta la actualidad, que continúa siendo propiedad del duque de Murray.

Se encuentra situado junto al pueblo de Blair Atholl, a apenas unos kilómetros de Pitlochry, en las Tierras Altas, y puede visitarse por dentro para disfrutar de sus magníficas estancias y su exposición de armas, una de las mejores de la zona. En su jardín el protagonista indiscutible es un abeto de casi 65 metros de altura, bautizado como Diana’s Grove, y que presume de ser uno de los tres árboles más altos del Reino Unido. Pero por los terrenos del castillo también es habitual encontrarse algú ciervo e incluso un bisonte pastando tranquilamente.

6. Castillo de Inveraray

El Castillo de Inveraray fue fundado a mediados del XVIII por el primer duque de Argyll, y ha sido residencia de la familia Campbell, uno de los principales clanes de Escocia, desde entonces. Su estilo y arquitectura contrastan con la de la mayoría de castillos de Escocia, pues se nota que el Castillo de Inveraray fue construido más recientemente.

Inconfundible con sus torres rematadas en forma cónica, se puede llegar hasta el castillo fácilmente dando un paseo desde el propio pueblo de Inveraray, y visitarlo por dentro (no te pierdas el Salón Chino, la armería y la sala dedicada a la historia del clan Campbell) o pasear por sus magníficos jardines para sentirte dentro de un episodio de Downton Abbey (y no lo decimos por decir: en 2012, fue en el Castillo de Inveraray donde se rodó el capítulo especial de Navidad de la serie).

7. Castillo de Balmoral

El Castillo de Balmoral, construido a finales del siglo XIV, ha estado ligado desde sus oigenes a la familia real escocesa. Primero perteneció a Roberto II, y tras pasar por manos de varias familias de aristócratas de renombre, se convirtió en el siglo XVIII en una de las residencias oficiales de la familia real. Actualmente es la residencia veraniega de Isabel II y el Duque de Edimburgo.

Situado en Aberdeenshire, en las Highlands, el Castillo de Balmoral ocupa una enorme finca que incluye casi 20.0000 hectáreas de terreno, y parte de sus estancias se pueden visitar por dentro, como el salón de baile, la de mayor tamaño del castillo. Si hace buen día, merece la pena perderse por sus jardines y disrutar de un bonito paseo (la visita total el castillo te llevará alrededor de una hora y media).

8. Castillo de Dunnottar

La situación privilegiada del Castillo de Dunnottar, sobre un acantilado, lo convierten en una de las imágenes más fotografiadas de Escocia.

De él ya solo quedan las ruinas, conservadas hasta la actualidad desde el siglo XIV, que se asientanal borde de un cabo en la costa norte escoesa, muy cerca de Stonehaven. Esta localización no fue casual, pues por su situación elevada (y algunos expertos apuntan que también había una fortaleza en el lugar), desde el castillo se controlaban perfectamente las rutas marítimas, lo que le confirió un papel de especial importancia durante la Edad Media.

Se puede visitar el Castillo de Dunnottar accediendo a pie por un sendero y un tramo de escaleras que conducen hasta su entrada. La subida es considerable pero comprobarás que merece la pena una vez alcances el castillo, que nos brinda unas maravillosas vistas de la costa y de las especies animales que habitan sobre estos acantilados.

9. Castillo de Glamis

En el concejo de Angus encontramos este gran castillo construido durante el siglo XV, aunque no adquirió su aspecto actual hasta el siglo XVII, tras varias ampliaciones y reformas, y sería ya en el siglo XIX cuando se añadirían los jardines en los terrenos adyacentes.

Al igual que el Castillo de Balmoral, el Castillo de Glamis siempre ha estado vinculado a la Corona, y ha ejercido como residencia real durante varios siglos; María, Reina de Escocia lo visitó en 1562, y la reina madre de Inglaterra lo utilizó como residencia oficial en numerosas ocasiones. Aunque el Castillo de Glamis permanece cerrado durante el invierno, abre en el mes de abril y puede visitarse durante la temporada de verano.

10. Castillo de Fraser

Es uno de los castillos más peculiares de Escocia; y es que el Castillo Fraser, que data del siglo XVI, posee una arquitectura curiosa, con una planta en forma de zeta y un aspecto imponente con sus cinco pisos y una fachada de granito gris rodeada de una vegetación exuberante.

El Castillo Fraser se encuentra cerca de Aberdeen y constituye una visita más que recomendable: en su interior puedes recorrer la historia escocesa a través de las diferentes salas, en las que además podrás apreciar el antiguo mobiliario y algunos objetos personales originales que pertenecieron al clan de los Fraser.