El 5 de noviembre de 1975, dio inicio la Operación Carlota en África, a partir del apoyo de Cuba a Angola en su lucha por la independencia, una lucha contra siglos de colonización, de usurpación, de masacre. La Operación Carlota suponía además una forma de intentar resarcir la deuda histórica, la deuda de sangre que también nos une al continente africano. Por eso, por la significación que para Cuba tenía contribuir con la liberación de un pueblo arrasado por la esclavitud, cuya sangre se injertó al nuestro, la operación tomó el nombre de Carlota, una esclava matancera cuya historia de resistencia es nuestra historia y es la que #CimarronasRecuerda hoy.
Yumai Garrido - Cimarronas.- Un día como hoy de 1843 se produjo la sublevación en en el ingenio matancero de Triunvirato, la primera sublevación en Cuba dirigida por una mujer, la esclava Carlota. El 5 de noviembre Carlota junto a 250 mujeres y hombres armados con palos, piedras, machetes e instrumentos de labranza se sublevaron contra la esclavitud, quemaron el ingenio el Triunvirato y se dirigieron al ingenio de Arcana para socorrer a Fermina, otra mujer esclava que el 2 de agosto había encabezado una sublevación en dicho ingenio y había sido encerrada.
Prosiguieron liberando a los esclavos de los partidos de Santa Ana, Guanabana, Sabanilla del Encomendador, pertenecientes a los ingenios Concepción, San Lorenzo, San Miguel, San Rafael, y de cafetales y fincas ganaderas de los alrededores. La rebelión se extendería por toda Manzanas y alcanzaría además repercusión internacional, ya que el gobierno de Estados Unidos enviaría una corbeta de su marina de guerra ofreciendo ayuda al gobierno colonial español, para aplastar la sublevación. Carlota, junto a otros rebeldes, fue apresada y condenada por el colonialismo español a morir descuartizada como escarmiento a los esclavos y al movimiento abolicionista y borrar su impronta libertaria.
Contrario al deseo de sus verdugos, el nombre de Carlota ha sobrevenido para la historia de Cuba como símbolo de rebeldía, libertad y uno de los ejemplos más vivos de la rebeldía de la mujer cubana y su papel en las revoluciones y la lucha contra la opresión y la injusticia.
Más de 120 años después, su nombre devino símbolo de la operación que iniciaría la gesta solidaria de Cuba en Angola contra el colonialismo, el racismo y a favor la independencia de los pueblos, un aporte a la deuda histórica de los pueblos de América por los millones de africanos arrancados de sus tierras y obligados a vivir como esclavos que dejaron su impronta en la construcción de la nación cubana y las luchas de liberación e independencia.
