Pocas reinas de Inglaterra han sido tan queridas, respetadas y han dejado tan honda huella de afecto y veneración.
Fué descrita por una de sus queridas damas de honor el año 1785, Fanny Burney, de la siguiente manera.. Sus modales manifiestan una dignidad natural y, a la vez, la más encantadora sencillez, y posee esa auténtica nobleza.
Su nombre, Sofía Carlota de Mecklenburgo-Strelitz. nacida el 19 de mayo de 1744 en Mirow, el ducado alemán, era la número ocho de los diez hijos del príncipe Carlos Luis de Mecklemburgo-Strelitzy e Isabel Albertina de Sajonia-Hildburghausen.
Fué la elegida para esposa del joven rey de Inglaterra, Jorge III quien apenas contaba con 22 años., esta jovencita de apenas 17 años, fué del gusto de Augusta de Sajonia-Gotha, como esposa de su hijo, quien había heredado el trono.
Fué realmente amada por su marido, quien desde que la conoció se enamoró perdidamente de ella, siéndole fiel a este amor, toda la vida.
Inglaterra entera se encantó en su reina, mujer inteligente y culta, muy amante de las artes y gran soporte de numerosas obras de caridad, a las que protegió con entusiasmo. Fué una gran defensora de la educación femenina y de la botánica.
De ella nos quedó una amplia pinacoteca, retratos muy variados, entre ellos los del célebre pintor escocés Allam Ramsay, quien nos revela en sus retratos de enorme calidad, los rasgos evidentemente mulatos de la reina de Inglaterra.
En ellos de logra evidenciar, la clara mezcla racial de la soberana, quien pese a su pelo rubio, este era muy ensortijado y sus facciones, evidentemente muestran su mezcla racial africana.
¿ Y cómo es esto, se preguntarán muchos de ustedes ?
Repasemos la historia y la genealogía de tan distinguida dama.
El historiador Mario de Valdés y Cocom, estudioso de estos temas, se remontó hasta los Sousa, distinguida familia aristócratica portuguesa, a quienes los genealogístas conocen como la rama negra de la familia real de Portugal.
En entrevista con el diario norteamericano Washington Post declaró lo siguiente el historiador Valdés y Cocom, que a través de un experto en linajes de la Biblioteca Pública de Nueva York, ubicó a la esposa del Teniente Jean de Neufchatel de Borgoña, y llegó a Margarita de Castro y Souza, quien era descendiente de los Souza portugueses y es una antepasada de la reina Carlota.
A través de este logro llega a Alfonso III rey de Portugal, quien en el siglo XIII, luego de tomar la población del Faro, tomó como amante, a la hIja del gobernador moro, Madragana, este era su nombre y lo cambió por Maior al ser bautizada en la religión cristiana.
Esta mujer fué madre de dos hijos, Urraca y Martín Alfonso Chicharro, quien casó con Inés Lourico de Valadares de Souza , quien por su lado noble de los Souza , tenía también muchos linajes negros.
Esto no era mal visto en la corte portuguesa y en la sociedad de la época, muy al contrario , era visto con normalidad y completamente aceptado por todos los estratos sociales
Los descendientes de esta familia siguieron a su vez, casándose con otras personas de las mismas características raciales mezcladas.
El mismo médico Christian Friedrich Freiherr afirmó en su biografía que la reina tenía un verdadero y auténtico rostro mulato. Por supuesto que no faltan quienes niegan estas aseveraciones, pero realmente, con ver las pinturas, ya no queda duda alguna, era mulata.
Desgraciadamente el rey presentó un caso de locura, teniendo que ser confinado en los muros del castillo de Windsor donde permaneció hasta su muerte diez años después. Falleció el 17 de noviembre de 1818 la reina a los 74 años de edad.
La reina fue enterrada en la Capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor.
Su descendencia, reina actualmente, en algunas cortes reales europeas.
