Bianca Maria Visconti fue la hija de Filippo Maria Visconti, el último gobernante de la dinastía Visconti en el Milanesado. En 1441, Filippo Maria Visconti dio a su hija en matrimonio con Francesco I Sforza, un soldado al servicio de su padre. El matrimonio fue visto como una unión estratégica que permitiría a Francesco I Sforza consolidar su poder en el norte de Italia. Como parte del acuerdo matrimonial, Francesco I Sforza recibió el título de duque de Milán en 1450, tras la muerte de Filippo Maria Visconti. Bianca Maria tenía una gran influencia sobre su marido, y se interesaba por la cultura y las artes. Favoreció a artistas como Leonardo da Vinci y Bramante, y patrocinó la construcción de edificios y la mejora de la ciudad. Después de la muerte de Bianca Maria en 1468, su esposo se casó con una viuda adinerada de Venecia, y su reputación como mecenas de las artes se desvaneció. Sin embargo, la relación entre Bianca Maria y Francesco I Sforza influyó en la historia del Milanesado y en el Renacimiento italiano.