Equipaje del rey José y colección del duque de Wellington. - Museo Nacional del Prado
formularioRDF
El recorrido <em>TITULORECORRIDO</em> se ha creado correctamente. Añade obras desde la página de Colección
Añadido <em>TITULOOBRA</em> en el recorrido <em>TITULORECORRIDO</em>

Enciclopedia > Voz

Equipaje del rey José y colección del duque de Wellington.

Xavier Bray

Muchas de las mejores pinturas que se exhiben en la Apsley House de Hyde Park Corner, la que fuera residencia londinense de Arthur Wellesley, más conocido como duque de Wel­lington, pertenecieron en su día a la colección real española. La triunfal campaña militar de Wellington contra las fuerzas napoleónicas durante la Guerra de la Independencia le valió el título de ­«Libertador de España», y en dos ocasiones fue recompensado con regalos de cuadros. La primera vez fue el 15 de agosto de 1812, tras la victoria de ­Wellington en la batalla de Salamanca y su entrada triunfal en Madrid, cuando la regencia española agradeció sus servicios con doce pinturas del palacio real de La Granja de San Ildefonso, próximo a Segovia. Pero los cuadros más importantes saldrían de lo que vino a ser conocido como «el equipaje del rey José», por una notable sucesión de acontecimientos que componen una ­curiosa historia de codicia castigada y caballerosidad premiada. En el ­verano de 1813, José Bonaparte, instalado en el trono de España en 1808 por su hermano Napoleón, huía ante el rápido avance del ejército de Wellington por el norte de la Península. El 21 de junio las fuerzas francesas sufrieron una derrota aplastante en la batalla de Vitoria. Después de la batalla, los soldados de Wellington encontraron el ­coche de José entre el abundante material y bagaje capturado. El propio José había ­logrado escapar protegido por la caballería francesa, pero en su coche se ­encontraron no solo documentos de estado, algunas cartas de amor y un orinal de plata, sino también más de doscientas pinturas sobre lienzo, desclavadas de sus bastidores y enrolladas, junto con dibujos y grabados. Todo ello lo envió ­Wellington a Inglaterra para ponerlo a salvo bajo la custodia de su hermano lord Maryborough. Los cuadros fueron al punto examinados por ­William Seguier, conservador de la pinacoteca real y más tarde de la National Gallery, quien diligentemente catalogó los principales en una lista de ciento sesenta y cinco. Pronto se dio cuenta, con sorpresa, de que José ­Bonaparte había sustraído muchas de aquellas pinturas de la colección real española y pretendía llevárse­las a Francia. Informado el duque de ­Wellington, ­ordenó devolver las pinturas sin dilación al recién repuesto rey de España Fernando VII. El 16 de marzo de 1814 pidió por carta a su hermano sir Henry Wellesley, entonces representante británico en España, que comunicase a Fernando VII el paradero de las obras y su deseo de devolverlas a España. Pero no recibió respuesta, y en septiembre de 1816 volvió a suscitar la cuestión en una carta al conde de Fernán Núñez, representante español en Inglaterra. A ésta respondió Fernán Núñez: «Adjunto os transmito la respuesta oficial que he recibido de la Corte, y de la cual deduzco que Su Majestad, conmovido por vuestra delicadeza, no desea privaros de lo que ha llegado a vuestra posesión por cauces tan justos como honorables». Resultado de ese generoso gesto es que una selección de magníficos cuadros que pertenecieron a la colección real española puedan verse aún hoy en el Wellington Museum de la Apsley House londinense. Son en total ochenta y tres pinturas del equipaje del rey José, de las cuales se puede rastrear el origen de cincuenta y siete gracias a los inventarios rea­les. Entre ellas se encuentran la Última Cena, de Juan de Flandes, que perteneció a Isabel la Cató­lica; una Sagrada Familia, de Giulio Romano, antaño atribuida a Rafael; Orfeo ­hechizando a los animales, de Padovanino, y Oración en el huerto, de Correggio. Otras obras maestras son la minuciosa ­Judith y Holofernes, de Elsheimer, y el imponente Aguador de Sevilla, de Velázquez.

Bibliografía

  • Kauffmann, Claus Michael, Catalogue of Paintings in the Wellington Museum, Londres, hmso, 1982.
Arriba