- Monarqu�a La peque�a 'corte' de Do�a Sof�a, una reina que no quiso amigos
- Historia Constantino de Grecia, el rey que se carg� su propia corona
La muerte del pr�ncipe Miguel de Grecia (85 a�os) ha sido especialmente dolorosa para la Reina Sof�a. Porque nuestra Em�rita no pierde s�lo a un t�o muy querido para ella, sino que se queda sin uno de sus pocos y verdaderos amigos. Y es que durante d�cadas Miguel de Grecia ha sido una de las personas m�s cercanas a la madre de Felipe VI, integrante de ese reducido c�rculo de �ntimos que la han acompa�ado en sus mejores y peores momentos, con absoluta discreci�n. Un grupo con demasiadas ausencias ya, del que siempre formaron parte tambi�n el hermano de Do�a Sof�a, el rey Constantino, o su querid�simo primo el rey Miguel de Ruman�a, fallecido en 2017.
Miguel de Grecia, que era el �ltimo nieto vivo de los reyes Jorge I y la reina Olga de los helenos, falleci� el domingo en un hospital de Atenas. No era un miembro de la realeza muy conocido por el gran p�blico, a pesar de que ha estado siempre presente en todos los grandes acontecimientos tanto de la dinast�a griega como de la espa�ola. A nuestro pa�s viaj� en innumerables ocasiones para estar al lado de Do�a Sof�a -cabe subrayar que la relaci�n del pr�ncipe con el Rey Juan Carlos tambi�n fue casi siempre estrech�sima-, y no se perdi� citas tan especiales como las bodas de las Infantas Elena y Cristina, o la de los entonces Pr�ncipes de Asturias en Madrid, en 2004.
El pr�ncipe naci� en Roma en 1939. Sus padres fueron el pr�ncipe Crist�bal de Grecia y Dinamarca -el benjam�n de los mencionados reyes Jorge I y Olga- y de su segunda esposa, la princesa Francisca de Francia, hermana de Enrique, conde de Par�s.
El padre de Miguel muri� apenas unos meses despu�s de su nacimiento. Y, en plena Segunda Guerra Mundial, su madre tuvo que vivir sucesivamente en Larache (Marruecos), M�laga y, finalmente, Par�s, las tres ciudades en las que creci� el pr�ncipe. La fatalidad parec�a perseguirle y, al cumplir los 14, tambi�n perdi� a su madre, qued�ndose bajo la tutela de Enrique, el mencionado conde de Orleans. Aunque acud�a con frecuencia a Atenas, junto al resto de la familia real helena. Un tiempo en el que se afianz� la amistad �ntima con su sobrina Sof�a -nuestra futura Reina-, quien era sin embargo unos meses mayor que �l. Otro de los parientes cercanos del finado fue Felipe de Edimburgo, el marido de la reina Isabel II del Reino Unido.
Miguel de Grecia estudi� Pol�ticas en La Sorbona. Pero despu�s se afinc� definitivamente en la capital griega, donde sirvi� a su ej�rcito los primeros a�os. Cabe subrayar que, m�s que por su sangre azul, el pr�ncipe se gan� fama como reputado historiador y escritor de biograf�as y novelas hist�ricas, entre las que destacan t�tulos como Los �ltimos zares Nicol�s y Alejandra, Juana de Arco o La emperatriz del adi�s.
En su pa�s natal conoci� a la hija de un empresario griego, Marinna Karella -reconocida pintora-, con la que se cas� en 1965 en una boda con toda la pompa celebrada en el Palacio Real de Atenas, a la que asistieron numerosos miembros del G�tha. Se trat� de un matrimonio morgan�tico. Y, por ello, Miguel qued� desde ese mismo momento apartado de la l�nea sucesoria al trono griego, si bien �l afirmar�a siempre que fue �l quien renunci� a sus derechos de forma voluntaria. El hermano de Do�a Sof�a, Constantino, hab�a sido proclamado rey un a�o antes, y le mantuvo el t�tulo de pr�ncipe.
En todo caso, el hecho de que Miguel de Grecia ya no tuviera derechos sucesorios le permiti� mantener su nacionalidad y poder seguir viviendo en su pa�s tras la ca�da de la Monarqu�a, en el refer�ndum de 1973. En 1967, tras la revoluci�n de los coroneles, Constantino II y los suyos hab�an tenido que abandonar el pa�s, casi con lo puesto, y comenzar un largo exilio de casi cinco d�cadas. El hermano de Do�a Sof�a muri� sin poder recuperar su nacionalidad, negada por las autoridades de la Rep�blica helena, una lucha que hoy contin�a el actual titular de la dinast�a, el pr�ncipe Pablo. Miguel de Grecia ten�a una magn�fica casa en Patmos, que fue refugio en infinidad de viajes familiares para una Do�a Sof�a que nunca se ha sentido mejor que con sus parientes helenos.
Los padres de Miguel de Grecia est�n enterrados en el cementerio del Palacio Real de Tatoi, aunque de momento se desconoce d�nde reposar�n los restos del pr�ncipe. Su funeral se celebrar� el jueves en Atenas, con presencia indudable de toda la familia real helena y de la Reina Sof�a, y qui�n sabe si tambi�n la de Don Juan Carlos.