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Dictan cadena perpetua a marroquí por matar a jubilado británico

"Mataron a niños y yo maté a un anciano", declaró durante el interrogatorio.

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Dictan cadena perpetua a marroquí por matar a jubilado británico
La jueza Bobbie Cheema-Grubb durante una transmisión en vivo desde el Tribunal de la Corona de Teesside, al momento de sentenciar al marroquí Ahmed Alid, de 45 años. (AP)

Un marroquí solicitante de asilo que mató a puñaladas a un jubilado británico en venganza por la guerra de Israel contra Hamás fue sentenciado el viernes a al menos 45 años de prisión por lo que la jueza calificó de acto terrorista.

Ahmed Alid dijo a la policía después de su arresto que había matado a Terence Carney, de 70 años, en la ciudad de Hartlepool, en el noreste de Inglaterra, porque "Israel había matado a niños inocentes".

"Mataron a niños y yo maté a un anciano", declaró durante el interrogatorio.

Los fiscales indicaron que el 15 de octubre, ocho días después del ataque de Hamás a Israel que desencadenó la guerra en Gaza, Alid agredió a su compañero de vivienda, el solicitante de asilo iraní Javed Nouri, con un cuchillo cuando dormía. Nouri sobrevivió. Luego, Alid huyó corriendo, se encontró con Carney dando un paseo matutino y lo apuñaló seis veces.

El abogado de la acusación, Jonathan Sandiford, dijo que Alid le había revelado a la policía que "si hubiera tenido una ametralladora y más armas, habría matado a más víctimas".

Alid, de 45 años, había negado los cargos en su contra. Aunque reconoció haber apuñalado a los hombres, aseveró que no tenía intención de matar ni causar daños graves.

El mes pasado, un jurado del Tribunal de la Corona de Teesside declaró a Alid culpable de un cargo de asesinato, un cargo de intento de asesinato y dos cargos de agresión a agentes de policía durante su interrogatorio posterior al arresto.

La jueza Bobbie Cheema-Grubb condenó a Alid a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional durante 45 años al señalar que el agresor no había mostrado "ningún remordimiento o lástima genuina" por sus víctimas.

"El asesinato de Terence Carney fue un acto terrorista con el que usted esperaba influir en el gobierno británico", dijo la jueza. "Esperaba asustar al pueblo británico y socavar las libertades con que gozan".

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