El conductor de un autobús en San Petersburgo, Rusia, perdió el control de manera intempestiva, y al girar embistió a varios carros hasta estrellarse contra el muro del puente que comunica Potseluev y Moika.
De los 15 pasajeros del autobús que cayeron al agua, cuatro personas fallecieron y otras cuatro se encuentran en estado de muerte clínica.
Según la agencia Sputnik en los operativos de rescate participaron 69 especialistas y 18 equipos. El Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia confirmó que el conductor fue detenido y es investigado por la extraña forma de conducir.
El autobús accidentado llegó hasta la vía de Moika a las 13:00 p. m., y en cámaras de seguridad quedó el instante de la caía al derribar la valla del puente.
Al caer en el río algunos pasajeros lograron escapar por el techo del bus, y antes que llegaran los servicios de emergencia varios testigos auxiliaron a los heridos.
El gobernador de San Petersburgo, Alexander Beglov, coordinó el trabajo de los socorristas, y ordenó crear una comisión para determinar las causas del trágico accidente.
Los medios de comunicación locales informan que “la empresa cuyo autobús cayó al agua en San Petersburgo ha sido sometida a responsabilidad administrativa 23 veces desde enero de 2022", informaron los tribunales de San Petersburgo”.
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