La NASA revela detalles de Elon Musk: ha contado cómo repostarán las naves de SpaceX en la órbita terrestre

La NASA y SpaceX mantienen una relación que ya dura muchos años y que está propiciando una explosión de ciencia y tecnología espacial como nunca antes se había visto. Muchas de las misiones de la NASA están apoyadas por la empresa de Elon Musk y algunas futuras dependerán de las capacidades de sus más ambiciosos cohetes. Ahora te contamos lo que sabemos acerca del repostaje de la Starship.

El repostaje de las Starship en el espacio

El cohete Starship, creado y construido por SpaceX, será uno de los protagonistas destacados del programa Artemis cuando la NASA ponga fecha al regreso del ser humano a la Luna, que como muy pronto está previsto que suceda en el año 2026. Sin embargo, antes de lanzar las campanas al vuelo hay que ultimar algunos detalles fundamentales para el éxito de la misión.

Tal y como se explica en el medio Ars Technica, estos cohetes serán también los responsables de la llegada del ser humano a Marte, aunque para poder conseguir su propósito, antes habrá que dominar ciertas tecnologías que aún no han sido probadas.

Imagen que la NASA ha mostrado recientemente acerca de la transferencia de combustible en el espacio

Amit Kshatriya es uno de los máximos responsables del Programa 'Moon to Mars' de la NASA y ha sido quien ha detallado, para medios de comunicación como el que mencionábamos anteriormente, uno de los procesos clave para que nuestra civilización pueda alcanzar Marte en las próximas décadas. Estamos hablando de la transferencia de combustible entre cohetes, algo que SpaceX ya tiene en mente desde hace tiempo y que ha sido detallado en la imagen que te mostramos sobre estas líneas.

Será el próximo año cuando Elon Musk, presumiblemente, ponga en marcha la primera prueba en órbita de transferencia de combustible, en la que participarán dos Starship. Por el momento, SpaceX ha probado el intercambio de combustible entre dos tanques de la Starship, en la más reciente prueba realizada, pero que nada tiene que ver con la dificultad de transferir combustible entre dos naves.

El proceso se iniciará con el lanzamiento de una Starship a la órbita baja de la Tierra, que será conocido como vehículo objetivo, y que deberá mantenerse en el espacio durante algunas semanas, hasta que la segunda Starship, que será el vehículo persecutor, sea lanzada. Este último será el cohete cargado de combustible, que tendrá que ubicarse 'panza con panza' con la otra nave para realizar el proceso.

El acoplamiento de ambos cohetes es uno de los pasos más complicados de este método de repostaje en el espacio, que recurrirá a los mismos puertos que SpaceX utiliza en la Tierra para cargar el combustible en la Starship. Existen muchos detalles técnicos sobre los que tendrán que prestar mucha atención para que la transferencia sea exitosa y para que el ser humano esté mucho más cerca de llegar a un nuevo planeta. Lisa Watson-Morgan, responsable del programa de alunizaje de la NASA, asegura que:

Tendremos que hacerlo unas cuantas veces. Tendremos que hacer los vuelos de transferencias más de una o dos o tres veces en mi opinión. Nunca hemos hecho esto antes (...) Creo que para todo el mundo, finalmente hemos dado con la tecla de que la mejor manera de ganar a la ecuación de los cohetes es a través del repostaje.

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