El partido de exhibición de joko berri, modalidad que fusiona frontón y trinquete, que acogió ayer el frontón Toki Alai de Huarte sirvió para que los navarros Iker Espinal y Luis Sánchez Labat derrotaran a los especialistas Peio Larralde y Battitta Ducassou, pelotaris franquicia de Esku Pilota, la promotora rectora del circuito profesional en Francia. Vencieron por 33-40 un emocionante duelo de mano parejas y lo hicieron justo después de que en el primer partido de la función, de paleta goma femenina, la alavesa Nagore Martín y la francesa Maritxu Housset, pentacampeona de la especialidad en trinquete, derrotaran 40-25 a la también francesa Amaia Larralde y a la navarra Maider Ardanaz.

Partido de paleta goma femenina, con la abarrotada grada del Toki Alai de Huarte de fondo. | FOTO: JAVIER BERGASA

El frontón Toki Alai de Huarte se engalanó para la ocasión y fueron algo más de 400 las personas que abarrotaron el recinto para disfrutar de más de tres horas de espectáculo, tanto el que ofrecieron ellas al principio con la herramienta como el que dieron ellos después con las manos.

El partido de ayer fue especial para Luis Sánchez Labat, que recientemente conquistó la triple corona en el circuito profesional francés de trinquete al coronarse campeón del Parejas, título que añadió a los que ya tenía del Individual y del Superprestige. El navarro jugó en casa, aunque más especial resultó la experiencia para su compañero y paisano, un Iker Espinal que dejó una buena carta de presentación para los numerosos ojeadores de la empresa Esku Pilota que se desplazaron ayer hasta Huarte.

No lo tuvieron fácil Espinal y Sánchez, que llegaron a ir perdiendo por hasta seis tantos de diferencia superado el ecuador del duelo (27-21), pero un demoledor parcial de 1-14 (jugaron con gerriko azul) les permitió remontar y colocarse a cinco tantos del triunfo (28-35). De ahí al final del partido sólo tuvieron que controlar, eso sí, con enorme autoridad. Luis Sánchez estuvo sublime, mientras que Iker Espinal finalizó feliz y contento por el triunfo, pero sobre todo por haber ofrecido una buena imagen que le puede reportar un billete para probar fortuna en el circuito profesional francés de trinquete.