El ninguneo al ejemplar médico republicano Rafael de Vega en su propia tierra – Dominio público | Público
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El ninguneo al ejemplar médico republicano Rafael de Vega en su propia tierra

Rafael Pérez de Vega

Nieto del doctor Rafael de Vega Barrera

 

Doctor Rafael de Vega y esposa
Doctor Rafael de Vega y esposa

Zazuar es un municipio situado a 12 kilómetros del noreste de Aranda de Duero en la Ribera del Duero burgalesa, con poco más de 200 habitantes censados. Allí nació don Rafael de Vega Barrera, el 23 de abril de 1889, eminente médico y cirujano, pionero en reclamar el derecho universal a la salud y a la asistencia sanitaria pública y gratuita, principio fundacional que adoptaría años más tarde la Organización Mundial de la Salud.

El doctor Vega Barrera era hijo de Esperanza Barrera e Isaac de Vega y Ugarte, entonces médico de la localidad de Zazuar, quien también atendía a la cercana localidad de Quemada, a poco más de dos kilómetros. Ambos pueblos pertenecen al término municipal de?Aranda de Duero?(Burgos).

Don Rafael de Vega Barrera cursó los estudios de bachillerato en Burgos, en el mismo centro educativo donde lo hacían sus hermanos, el instituto del que su abuelo don Rafael de Vega y Areta era director. Su padre logró obtener la plaza de médico en Tardajos, localidad próxima a la capital Burgalesa, donde estuvo destinado varios años, con lo que pudo estar más cerca de sus cinco hijos.

En Valladolid estudió Medicina, como había hecho su padre y numerosos miembros de generaciones anteriores de la familia, desde la época de la reina Isabel II.?En el año 1916 llegó a Lugo después de conseguir brillantemente por oposición la plaza de director cirujano del hospital municipal. Al año siguiente de su estancia como titular facultativo en la ciudad gallega hace una denuncia pública calificando de indignante la situación del hospital de la localidad. Y escribe lo siguiente:

"Los pobres y los desposeídos?tienen derecho a la asistencia médica, porque el derecho a la salud es un derecho de todas las personas y ellos lo necesitan más"

Treinta y un años después la reflexión que el doctor de Vega Barrera llevó a la práctica en la medida de sus posibilidades, la tomó la OMS como principio y razón de ser de este organismo especializado de Naciones Unidas.

 Don Rafael de Vega Barrera fue un prominente médico y uno de los más célebres y dotados cirujanos de aquella época. Precursor de la medicina social, desde su prestigioso sanatorio particular y desde la dirección del hospital provincial de Lugo, su talento y capacidad profesional cobró fama en toda España, llegando a ser comisionado del Gobierno de la República en simposios y certámenes médicos de nivel europeo y mundial.

Aquellos que lo conocieron hablan del ser excepcional que fue en todas las facetas de su vida. Un hombre justo, un marido enamorado y muy familiar, un caballero en su comportamiento, de maneras exquisitas en el trato, pletórico de generosidad, rebosante de amor hacia sus semejantes.

Cristiano creyente, de una gran fe en Dios y en el ser humano, destacó, y todavía hoy es recordado en la ciudad de Lugo, por ser el benefactor de los pobres y desprotegidos a los que atendía en su consulta particular de modo gratuito, además de ser un cirujano al que se le atribuían unas manos prodigiosas, un mago del quirófano que atraía hacia su clínica privada a pacientes de toda España.

También fue político, presidente local de Unión Republicana y diputado en Cortes Constituyentes durante el periodo 1931-33. Un político honrado y entregado a la causa de conseguir de la política el mayor bien para la ciudadanía.

Sus ideas republicanas y la envidia de sus competidores profesionales lo llevaron, en 1936, a ser acusado de un delito de traición a la Patria y auxilio a la rebelión. Una acusación falsa, pretexto para someterlo a un escandaloso juicio sumarísimo -causa sumarísima de guerra nº330/36-, sin ninguna garantía procesal, basado en testigos igualmente falsos.

La condena a muerte, premeditada, a la que le sentenciaron se utilizó como escarmiento atemorizador de la población, por tratarse de la personalidad más relevante y querida del bando republicano lucense. Fue fusilado en la tapia del cementerio de Lugo el 21 de octubre de 1936.

Son varios los homenajes que se han realizado para reivindicar su emblemática figura en Lugo: una calle que lleva su mismo nombre, -Rúa Doutor Rafael Vega-, un busto en su misma calleun edificio residencialun mural y una placa conmemorativa y pabellón en el hospital Lucus Augusti. Además es considerado por el mapa de celebridades de Google como el personaje más notable del pueblo burgalés de Zazuar.

El doctor Rafael de Vega Barrera, es además el protagonista de "Sentencia" (Velasco Ediciones-2022), novela biográfica del periodista y escritor José Francisco Rodil Lombardía. La novela, narrada en primera persona, desde la cárcel de Lugo -hoy centro sociocultural O Vello Cárcere-, por el propio doctor, repasa su vida familiar y profesional y los entresijos del complot urdido contra él en 1936, en Lugo, así como la feroz injusticia de la que acabó siendo víctima.

Rafael de Vega Barrera tiene dedicada una página web, www.rafaeldevega.es, cuyo web máster es uno de sus nietos, Rafael Pérez de Vega. Esta página web refleja la biografía de su vida y su obra, así como los homenajes y artículos periodísticos de los que ha sido objeto.

Son múltiples los intentos que se han hecho por diversos canales y personas para homenajear al doctor Rafael de Vega Barrera en su lugar de nacimiento, la villa burgalesa de Zazuar. Ha habido varias solicitudes dirigidas al actual alcalde Agustín Villa Hernando, sin que hasta ahora hayan tenido respuesta alguna e incluso proponiendo que los gastos del homenaje corrieran a cargo de la propia familia

La última solicitud se cursó telemáticamente al ayuntamiento de Zazuar el 6 de febrero pasado, sugiriendo la colocación de una placa, un busto, la dedicación de un calle o plaza que sirviera para recuperar la memoria de este eminente médico víctima de la represión franquista, personalidad digna de figurar de un modo reconocido y destacado como parte del patrimonio histórico y humano de la villa de Zazuar.

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