Máxima de Holanda y su extravagante look para un nuevo acto: diadema con una enorme flor, vestido de encaje y collar de perlas

Solo ella puede lucir un look con tanta información y salir airosa. O no. Y es que Máxima de Holanda ha vuelto a apostar por uno de esos estilismos que odias o amas. La reina de los Países Bajos, siempre tan extravagante, ha elegido un atuendo de lo más vistoso para su visita a la región de Hogeland, en el que destaca, por encima de todo, un tocado en forma de diadema, terminado con una gran flor, una rosa color marrón que se llevaba casi todo el protagonismo.

Como decíamos, los reyes de Holanda se han desplazado la mañana de este martes hasta la zona de Hogeland, para conocer los municipios de Het Hogeland y Eemsdelta. Guillermo Alejandro y Máxima suelen realizar un par o tres de visitas regionales al año para descubrir más acerca de su país y mantener un contacto más estrecho con sus gentes. Son jornadas divertidas, en las que vemos al monarca y a su esposa participando en numerosas actividades. En esta en concreto han jugado al billar o han visto cómo se lleva a cabo la pesca de camarones.

Volviendo al look de Máxima, la reina ha recuperado de su armario un vestido de encaje de la firma internacional Elie Saab. Se trata de un diseño en color coral, de manga larga, cuello cerrado y largo midi. La argentina lo estrenó como invitada de una boda en Londres en 2017; lo volvió lucir unos meses después en su visita de Estado a Portugal; se lo vimos en la cumbre del G20 celebrada en Argentina en 2018; y también en la Casa Mayor Bosshardt del Ejército de Salvación en Ámsterdam, en 2022.

No es, por lo tanto, arriesgado asegurar que se trata de un vestido que le gusta, y mucho, a Máxima, teniendo en cuenta la cantidad de ocasiones en las que lo ha lucido. Pero, además, parece que el diseño tiene algo especial, pues otra royal ha caído rendida a sus pies y lo ha llevado en numerosos actos. Hablamos de Victoria de Suecia, quien lo lució por primera vez en el bautizo de su sobrino Alexander, hijo de Carlos Felipe y Sofía, y lo ha repetido muchísimo.

Por si el diseño no tuviera suficientes detalles, Máxima le ha añadido un tocado terminado con una gran flor. Pero eso no es todo. Siguiendo su estilo un tanto peculiar en ocasiones, la argentina ha elegido como joyas un vistoso collar de perlas de tres vueltas, con una flor en el lateral, con brillantes en la zona central, también color coral, a juego con unos pendientes. Llevaba, además, numerosas pulseras de diamantes y oro amarillo, y un anillo con una piedra naranja.

En cuanto al resto de los complementos, ha elegido unos salones de ante camel de Gianvito Rossi que ha coordinado con unos guantes de piel, y una cartera de mano a juego.

El look puede gustar más o menos, pero lo que está claro es que no ha dejado indiferente a nadie y que ha seguido los consejos de Isabel II, quien aseguraba que las reinas deben vestir colores fuertes y estilismos que llamen la atención para ser localizables con facilidad en los actos.