Felipe IV conocido como el Rey Planeta o el Grande, hijo de Felipe III y de Margarita de Austria, es uno de los Austrias menores que reinó en España y su imperio. Vivió entre 1605 y 1665, siendo rey durante 44 años, desde el 31 de marzo de 1.621, fecha en que murió su padre Felipe III. A continuación se puede ver la genealogía de la Casa de Austria, en donde se puede ver donde se sitúa Felipe IV y algunas referencias a otros matrimonios de algunas de las hermanas de los reyes que van a ser importantes posteriormente para la línea sucesoria.
Su primera etapa de reinado está marcada por su valido el Conde-Duque de Olivares, Gaspar de Guzmán, que realizó una reforma hacendística en que se introducían nuevos impuestos para hacer la recaudación más equitativa y para que todos los territorios contribuyesen en los gastos que generalmente recaía sobre Castilla. A estos nuevos impuestos se resistieron y también opusieron algunos sectores de la nobleza y Cataluña, que se negó a formar parte del proyecto de la Unión de Armas de 1626. En Aragón y Andalucía también existieron revueltas y conspiraciones, así como en Portugal que terminaron proclamando rey al duque de Braganza en 1640 que pasó a ser Juan IV de Portugal. Este firmó la paz con los holandeses y se inició la guerra de restauración portuguesa. En Nápoles y Sicilia igualmente se produjeron revueltas.
En el exterior, los conflictos eran múltiples. Tras la tregua de los doce años, las tensiones en los Países Bajos fueron en aumento. Como muestra de este periodo, Velazquez inmortalizó la rendición de Breda que concluyó el largo asedio de las tropas españolas. Los corsarios portugueses en represalia intensificaron sus ataques contra la flota de Indias y las posesiones españolas en Brasil.
En Francia, el cardenal Richelieu, durante el reinado de Luis XIII, inició una serie de acciones que acabaron en distintas guerras que trataban de reducir la hegemonía hispánica en Europa. Con Inglaterra también hubo enfrentamientos y estos terminaron buscando alianzas con holandeses y portugueses, así como con los franceses con quienes colaboraron en distintas batallas decisivas de la época.
Todo ello llevó a tener demasiados frentes abiertos y a la caída del conde duque de Olivares para pasar el propio Felipe IV a gobernar directamente. La paz de Westfalia y la paz de los Pirineos vienen a representar la pérdida de la hegemonía de España en Europa. El documental siguiente completa la historia de España durante la época de Felipe IV.