Carlos Luis Napole�n Bonaparte (20 de abril de 1808 � 9 de enero de 1873), primer presidente de la Rep�blica Francesa en 1848 y luego el segundo emperador de los franceses en 1852, bajo el nombre de Napole�n III, siendo el �ltimo monarca que rein� sobre este pa�s.
Nacido en el seno de la Dinast�a Bonaparte, fue hijo de Luis Bonaparte, rey de Holanda y de Hortensia de Beauharnais, hija de la emperatriz Josefina. Sobrino de Napole�n I, se hace heredero de los derechos din�sticos despu�s de las muertes sucesivas de su hermano mayor y de Napole�n II.
Su filosof�a pol�tica es una mezcla de romanticismo, de liberalismo autoritario, y de socialismo ut�pico, aunque en los �ltimos a�os fue insigne defensor del tradicionalismo y de la civilizaci�n cat�lica. Quiso significar una reparaci�n frente al anticlericalismo y el ate�smo de la Revoluci�n Francesa. Tuvo una pol�tica de expansi�n de la civilizaci�n cl�sica que cre�a Francia representaba, frente al surgimiento de Alemania y Estados Unidos, potencias emergentes de tipo protestante.
Primeros a�os
Luis Napole�n Bonaparte naci� en Par�s. La identidad de su padre biol�gico sigue siendo un tema de especulaci�n, dada la infelicidad del matrimonio de sus padres y manteniendo la reina Hortensia diversas relaciones extramaritales.
Su padre legal, sin embargo, s� fue el marido de Hortensia: Luis Bonaparte, Rey de Holanda, hermano m�s joven de Napole�n I, y su carrera pol�tica fue construida sobre el hecho de que �l era el sobrino de Napole�n I.
Despu�s de la derrota final de Napole�n I y su deposici�n en 1815 y la restauraci�n de la monarqu�a de los Borbones en Francia, por ley de 1 de enero de 1816, se destierra a todos los Bonaparte del territorio franc�s. La reina Hortensia se exilia a Suiza con sus hijos y compra, en 1817, el castillo de Arenenberg (Suiza), que domina el lago de Constanza.
El futuro emperador asiste al Liceo de Augsbourg y adquiere su primeros conocimientos marciales de un antiguo oficial de Napole�n I. En 1830, es voluntario en el ej�rcito suizo, donde obtiene el grado de capit�n de artiller�a en 1834.
El joven Luis-Napole�n residi� adem�s de en Suiza, en Alemania e Italia. Siendo joven, en Italia, �l y su hermano Napole�n Luis se implicaron en las protestas de los carbonarios, una organizaci�n de la resistencia que luchaba contra la dominaci�n austr�aca en el norte de Italia.
Napole�n III consigui� desarrollar una pol�tica exterior afortunada, al menos en la primera d�cada de su mandato. Si Luis Felipe se hab�a esforzado en mantener la paz hasta el punto de que muchos franceses lo consideraron un pusil�nime, Napole�n III hubo de calmar a Europa y convencerla de que otro Napole�n no significaba sumergir de nuevo el continente en la guerra. Todo cuanto ten�a que hacer era encontrar una guerra peque�a que satisfaciera a los sedientos de gloria en casa, pero sin inquietar a nadie en el extranjero. As�, se uni� a Gran Breta�a en una guerra menor contra Rusia en 1854, y en 1859 se empe�� en otra contra Austria. En 1860 parec�a que hab�a conducido bien los asuntos y se hallaba en la cumbre de la popularidad y el prestigio.
Sucesi�n del bonapartismo
Seg�n la ley de la sucesi�n que Napole�n I hab�a establecido durante el Primer Imperio, la prelatura para el trono imperial era: su descendencia leg�tima directa y luego sus hermanos y su descendencia. El primero en el orden sucesorio era su hijo: el Rey de Roma. Le segu�a Jos� Bonaparte, Rey de N�poles y de Espa�a, y despu�s Luis Bonaparte, Rey de Holanda, y sus hijos (Luciano Bonaparte, pr�ncipe de Canino, y sus descendientes estaban excluidos de la sucesi�n imperial).
Como Jos� no ten�a ning�n hijo var�n, y sus hermanos Napole�n Carlos Bonaparte (1802�1807) y Napole�n Luis Bonaparte (1804�1831) y su primo Napole�n II en 1832, le premurieron, Luis-Napole�n se convirti� el heredero de Bonaparte en la generaci�n siguiente.
Genealog�a
Carlos Mar�a Bonaparte
│
├──> Napole�n I (1804-1815)
│ │
│ └──> Napole�n II (1815-1832)
│
├──> Jos� Bonaparte Rey de N�poles. Rey de Espa�a.
├──> Luciano Bonaparte Pr�ncipe de Canino, excluido.
└──> Luis Bonaparte, Rey de Holanda.
│
└──> Napole�n Carlos Bonaparte (1802-1807)
└──> Napole�n Luis Bonaparte (1804-1831)
│
└──> Napole�n III (1832-1870)
│
└──> Napole�n IV (1870-1879)
Lucha por el poder
Siendo ya el heredero del bonapartismo y residente en el Reino Unido, volvi� secretamente a Francia en octubre de 1836, por primera vez desde su ni�ez, para intentar un golpe de estado en Estrasburgo. El golpe fall�, pero pudo escapar. Nuevamente, intent� otro golpe en agosto de 1840, cruzando el Canal de la Mancha con una peque�a nave con algunos soldados en Boulogne. Apresado, esta vez fue encarcelado en comodidad relativa en la fortaleza de la ciudad de Ham. Durante sus a�os del encarcelamiento escribi� los ensayos que denotan su ideolog�a rom�ntica, su liberalismo autoritario, y su incluso socialismo ut�pico. Consigui� escaparse de la prisi�n a Southport, Reino Unido, en mayo de 1846, cambiando la ropa con un carpintero que trabajaba en la fortaleza de Ham.
 Bismarck (con casco) y Napole�n III tras la Batalla de Sed�n
|
 Elecciones en Francia, 1848 |
 El Pr�ncipe-Presidente |
 El fusilamiento de Maximiliano I, por Edouard Manet.
|
Presidente de la Segunda Rep�blica
Ascenso al poder: Elecci�n democr�tica
Luis-Napole�n vivi� en Gran Breta�a hasta la revoluci�n del febrero de 1848, que depuso al rey Luis Felipe I y que estableci� la Segunda Rep�blica Francesa. Libre de volver a Francia, el 4 de junio 1848, es elegido (en 4 departamentos) y ocupa un esca�o en la Asamblea en septiembre.
El 4 de noviembre 1848, se promulga de la constituci�n de la II Rep�blica, y se presenta como candidato en la elecci�n presidencial, la primera al sufragio universal masculino en Francia. Luis-Napole�n gan� por abrumadora mayor�a, en las elecciones celebradas el 10 de diciembre de 1848, con 5.454.000 votos (el alrededor 75% de votos) contra los 1.448.000 votos de Luis-Eugenio Cavaignac, su rival m�s cercano.
Su abrumadora victoria fue debida a la ayuda de las masas rurales, a las cuales el nombre de Bonaparte signific� algo, contrariamente a los nombres de los otros competidores para la presidencia que eran desconocidos a las masas. Representaba entonces tambi�n la idea de rescatar el orden tradicional y la causa de la religi�n cat�lica, amenazada por los liberales.
La plataforma de Luis Napole�n significaba para los electores la restauraci�n del orden despu�s de los meses de la agitaci�n pol�tica, del gobierno fuerte, de la consolidaci�n social y de la grandeza nacional, a los cuales �l abrog� con todo el cr�dito de su nombre, especialmente con la memoria de su t�o Napole�n I, ya h�roe nacional de Francia.
El pr�ncipe-presidente
La constituci�n de la II Rep�blica estableci� r�gidas normas al ejercicio de la magistratura presidencial limit�ndola para un t�rmino de s�lo cuatro a�os, sin posibilidad de reelecci�n, a fin de evitar que un presidente abusara de su poder para transformar la Rep�blica en una dictadura u obtuviera una presidencia vitalicia.
En mayo de 1849 se celebran elecciones a la Asamblea nacional que ganan los mon�rquicos legitimistas. La presidencia de Luis-Napole�n est� as� marcada por su oposici�n a la pol�tica conservadora de esta Asamblea nacional: env�o a Roma de las tropas para dominar una rebeli�n contra el Papa; voto de la ley Falloux, favorable para la ense�anza religiosa, etc.
El 31 de mayo 1850, la Asamblea vota una ley electoral que abole el sufragio universal masculino y retorna al voto censitario, lo que elimina a tres millones de personas del electorado, entre las que est�n artesanos y obreros estacionales. Por otra parte, Luis Napole�n hace presi�n para aumentar la duraci�n de su mandato, mientras que la Asamblea nacional se opone a todo proyecto de reforma constitucional.
Finalmente, el 2 de diciembre de 1851, Luis Napole�n da un golpe de estado, present�ndose ante los franceses como defensor de la democracia �sufragio universal� frente a la Asamblea �censitaria�. La crisis es superada mediante la celebraci�n de un plebiscito popular que le es favorable y que aumenta su autoritarismo, que ejerce contra los republicanos extremistas y legitimistas y orleanistas.
El 14 de enero de 1852 se promulga una nueva constituci�n que refuerza los poderes del ejecutivo �duraci�n de la presidencia 10 a�os, reelegible� y disminuye el del legislativo que divide en tres c�maras: Asamblea, Senado y Consejo de Estado. Finalmente, mediante plebiscito celebrado en noviembre, Francia deviene un Imperio, que se proclama solemnemente el 2 de diciembre de 1852.
El Segundo Imperio
El Segundo Imperio fue un r�gimen pol�tico que a lo largo de los a�os, evolucion� del autoritarismo a la democracia:
El Imperio Autoritario (1852�1863)
Hasta 1860 Napole�n III gobierna sin oposici�n, en parte, por el control policial y la censura de prensa, y en parte por la mejor�a econ�mica de Francia. Asimismo, los triunfos en pol�tica exterior refuerzan la pol�tica del emperador.
La pol�tica exterior del Segundo Imperio
Tres directrices marcan la pol�tica exterior del emperador: el fomento del colonialismo, el apoyo a la unidad italiana y el intervencionismo.
-
Colonialismo:
Napole�n III impulsa el imperialismo franc�s, no s�lo con fines econ�micos �buscando materias primas y mercados�, sino pol�tico, a imitaci�n del Reino Unido. M�s que en �frica �donde continua la penetraci�n iniciada en el reinado de Luis Felipe I en Argelia y Senegal� , el emperador fija su atenci�n en Asia. Mediante el Tratado de Tien Tsin, en 1860, China se ve obligada a abrir sus puertos al comercio franc�s. Pero es en Indochina donde el Segundo Imperio pone en marcha una aut�ntica empresa colonizadora, con el pretexto de la expedici�n franco-espa�ola a Cochinchina �Vietnam y Laos�, el Imperio proceder� a su anexi�n entre 1862 y 1867 y a la ocupaci�n de Camboya en 1863.
-
Unidad de Italia:
El emperador es un decidido partidario de la unidad de Italia. Para ganarse el apoyo de Francia, Cavour, primer ministro de Piamonte, no hab�a dudado en participar al lado de Francia y el Reino Unido en la Guerra de Crimea (1854�56). En 1858 en la Entrevista de Plombi�res (Plombi�res-les-Bains), Cavour, promete la entrega a Francia de Saboya y Niza, que se lleva a efecto en 1860. Las tropas conjuntas de Francia y Piamonte consiguen grandes �xitos frente a Austria en las batallas de Magenta y Solferino, pero el temor a que el conflicto se extienda, hace que Napole�n III, firme por separado la paz de Villafranca en 1859. Los nacionalistas italianos se sienten traicionados por Napole�n III, siendo la �cuesti�n romana� la que crispe las relaciones del gobierno imperial con los cat�licos.
-
Intervencionismo
Guerra de Crimea
Rusia pretend�a el control de los restos del Imperio Turco �llamado �el enfermo de Europa��: los Balcanes y el control del estrecho de los Dardanelos. El Reino Unido, por inter�s comerciales, se opone y apoya a Turqu�a frente a los rusos. Francia se al�a con el Reino Unido e interviene en la Guerra de Crimea, que termina en el Congreso de Par�s en 1856, erigi�ndose Napole�n III como �el �rbitro de Europa�.
Guerra de M�xico
Desde su independencia en 1821, M�xico hab�a sufrido una guerra civil latente entre conservadores y liberales. Tras a�os de guerra entre ambos bandos , las finanzas de M�xico se encontraban en crisis por lo que Benito Ju�rez toma la decisi�n de suspender el pago de la deuda externa a Francia, Espa�a y Reino Unido. Los conservadores solicitan la intervenci�n exterior y ofrecen la corona de M�xico a Fernando Maximiliano de Habsburgo, Archiduque de Austria. Francia, Espa�a y Reino Unido env�an una fuerza para ejercer presi�n hacia el pago de la deuda. Realizadas las negociaciones a trav�s del ministro de relaciones Exteriores Manuel Doblado, Espa�a y Reino Unido se retirar�n, mientras que Francia permanecer�a con el objetivo de conquistar M�xico y convertirlo en una colonia. Pero sus ilusiones imperialistas se ver�an frustradas al sufrir su primera derrota militar en 50 a�os, ya que el cinco de mayo de 1862, en Puebla el ej�rcito mexicano le asesta una derrota que no s�lo sorprende al mundo, sino que revitaliza el esp�ritu nacionalista de los mexicanos. Aun viva la amenaza extranjera ya que las tropas de Napole�n III entraban al pa�s con el apoyo de los consevadores. Los liberales mexicanos resistieron mediante la guerra de guerrillas. El fin de la Guerra de Secesi�n de Estados Unidos en 1865, con el triunfo de los industriales del norte o "unionistas", Estados Unidos apoyar� al gobierno de Ju�rez con armamento y pretrechos ante la amenaza de tener como vecino a una potencia extranjera. ante las constantes derrotas infringidas por las guerrillas mexicanas las tropas de Napole�n III se retirar�n de M�xico y Maximiliano I ser� fusilado en el Cerro de las Campanas, en Quer�taro en 1867, ante la protesta de reyes y jefes de estado. La repercusi�n de esta derrota ser� importante para el Segundo Imperio.
La pol�tica interna del Segundo Imperio
Las fuerzas sobre las que se apoya el gobierno de Napole�n III son: el ej�rcito, la burgues�a y la Iglesia.
El Imperio Liberal (1863�1868)
Despu�s de un per�odo de transici�n, al fallarle los apoyos tradicionales �Iglesia y burgues�a�, el gobierno gira hacia la izquierda en busca de nuevos apoyos.
Dentro de esta pol�tica liberal est� el derecho de iniciativa del Parlamento (1860) y el control de los presupuestos por parte de las C�maras (1861). En 1864 se otorga el derecho de asociaci�n y huelga.
A partir de 1867, el malestar por la pol�tica exterior �fracaso de M�xico� e interior �crisis econ�mica� fuerzan las concesiones del r�gimen. En 1867 se concede al Cuerpo Legislativo el derecho de interpelaci�n y responsabilidad ministerial ante las C�maras. Asimismo, se suavizan las leyes de prensa �supresi�n de la censura previa� y reuni�n �anulaci�n de la autorizaci�n previa�.
El Imperio Parlamentario (1868�1870)
En las �ltimas elecciones de 1869 el avance de la oposici�n es evidente, acentu�ndose las reformas desde el poder. Se modifica la Constituci�n, fortaleciendo el parlamentarismo y se recortan las facultades constitucionales de la pareja imperial. Todas esta reformas fueron corroboradas por el pueblo en un plebiscito celebrado en mayo de 1870.-
Campa�as militares
La respuesta de Napole�n a la demanda de Rusia para influir en el imperio otomano llev� a una victoriosa participaci�n de Francia en la Guerra de Crimea (marzo de 1854�marzo de 1856). Tambi�n aprob� lanzar una expedici�n naval en 1858 para castigar a los vietnamitas y forzar a su corte real a aceptar una presencia francesa en el pa�s. El 14 de enero de 1858 Napole�n escap� a otra tentativa de asesinato.
En mayo-julio de 1859 la intervenci�n francesa asegura la derrota de Austria en Italia. Pero la invasi�n francesa de M�xico (enero de 1862�marzo de 1867) termin� en derrota y en la ejecuci�n del emperador de M�xico Maximiliano apoyado por Francia
En octubre de 1865 en (Biarritz), el canciller prusiano Otto von Bismarck obtuvo de Napole�n III que Francia se mantuviera al margen de un previsible conflicto austro-prusiano, mientras que Prusia se compromet�a a apoyar al Reino de Italia para conseguir la anexi�n de Venecia, en manos austriacas. Napole�n pens� que el conflicto ser�a largo y le brindar�a la oportunidad de actuar de mediador y tal vez conseguir ventajas territoriales. El emperador se comprometi� a mediar ante los italianos, lo que se consigui� con la alianza ofensivo-defensiva contra Austria firmada en abril de 1866. Pero Prusia derrot� f�cilmente a Austria en la Guerra de las Siete Semanas.
Forzado por la diplomacia del canciller alem�n Otto von Bismarck, Napole�n declar� el inicio de las hostilidades en la Guerra franco-prusiana (1870) que result� desastrosa para Francia y dio v�a libre a la conformaci�n del Segundo Reich. El Emperador fue preso en la Batalla de Sed�n (2 de septiembre) y depuesto por las fuerzas de la Tercera Rep�blica en Par�s dos d�as despu�s.
Matrimonio, hijo y familia
Casado con Eugenia de Montijo (condesa de Teba), una noble espa�ola de ascendencia escocesa y espa�ola, Napole�n III tuvo un hijo, Eug�ne Bonaparte (Napole�n Eugenio Luis Juan Jos�, 1856�1879), quien a su muerte se convirti� en jefe de la familia y fue llamado por sus partidarios Napole�n IV.
Exilio y muerte
Napole�n III muri� en el exilio en Inglaterra el 9 de enero de 1873. Est� enterrado en la Cripta Imperial de la Abad�a de Saint Michael (Inglaterra).
Legado del Segundo Imperio
Mal conocido en nuestros d�as, el Segundo Imperio corresponde sin embargo a una de las m�s formidables �pocas de desarrollo y de prosperidad que Francia hubiera conocido.
-
Econom�a
Al nivel econ�mico, el pa�s se dot� de infraestructuras modernas, de un nuevo sistema financiero, bancario y comercial y recobr� en 1870 su retraso industrial sobre el Reino Unido, en parte gracias a la pol�tica voluntarista del emperador y gracias a su elecci�n del libre cambio.
-
Urbanismo y ferrocarril
Napol�on III impuls� los trabajos del Bar�n Haussmann en Par�s, que hicieron de esta ciudad una de las capitales m�s bellas del mundo. Grandes secciones de la ciudad se demolieron y el trazado de viejas y complicadas calles se reemplaz� por anchas avenidas, seg�n direcci�n del Bar�n Haussmann (1809�1891), prefecto del Sena (1853�1870), con un efectivo sistema financiero que avanz� la idea de que las plusval�as generadas por los cambios deb�an beneficiar al ayuntamiento y no solamente a los propietarios de los terrenos afectados.
El Segundo Imperio vio la construcci�n de la red francesa de ferrocarril, aunque su dise�o radial no fue muy afortunado.
-
Artes
Este per�odo fue muy productivo a nivel literario, abarca de Flaubert a Sand o a los hermanos Goncourt (Edmundo y Julio). La �pera Garnier ilustra la importancia concedida del mundo del espect�culo, el elemento de la �fiesta imperial�.
Personalmente apasionado por historia (le debemos una Historia monumental de Julio C�sar), el Emperador tambi�n jug� un papel clave en la puesta en marcha de arqueolog�a moderna en Francia, con la creaci�n del museo de las Antig�edades nacionales de Saint-Germain-en-Laye.
-
Sociedad
Los progresos sociales fueron innegables: reconocimiento del derecho de huelga y de organizaci�n de los asalariados (antecedentes de sindicatos) concedidos en 1864, elevaci�n del nivel de vida de los obreros y de los campesinos, los comedores de beneficencia organizados para los pobres, primeros sistemas de jubilaciones y de seguros para los obreros, desarrollo de la educaci�n de masa, etc.
-
Otros
Bajo el impulso personal de la emperatriz Eugenia, se apoyaron los trabajos de Luis Pasteur y de Fernando de Lesseps, que respectivamente, acabar�n en la vacuna contra la rabia y en el Canal de Suez, inaugurado en 1867.
Enlaces externos
-
Commons alberga contenido multimedia sobre
Napole�n III.Commons
-
Napoleontrois.free.fr, excelente sitio dedicado a Napole�n (en franc�s)
-
La France �panouie de Napol�on III, web sobre los logros del Segundo Imperio (en franc�s)
Colaboradores de Wikipedia. Napole�n III [en l�nea]. Wikipedia, La enciclopedia libre, 2007 [fecha de consulta: 23 de diciembre del 2007]. Disponible en <http://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Napole%C3%B3n_III&oldid=13786448
