Esta isla de las Cícladas en el mar Egeo parece un lugar salido de un cuento de hadas, con casas color caramelo talladas en acantilados, aguas color zafiro y edificios color blanco tiza cubiertos con cúpulas color azul cobalto. Recorre las tranquilas playas de arenas negras o pasea por las calles de uno de los encantadores pueblos de Santorini (comienza en Imerovigli). Y no importa adónde te lleve el día, relájate en la hermosa Oia: Es famosa a nivel mundial por sus atardeceres, que pasan en bicicleta por un caleidoscopio de colores en su espectacular espectáculo nocturno.