Virginie Efira no para. Después de un año dorado en donde ganó premios Lumière, Magritte y César por Paris Memories y Other People’s Children, la actriz belga-francesa nos regala otro tour-de-force actoral, esta vez como una madre luchando por recuperar a su hijo en All to Play For (Rien à perdre), un drama emotivo y complejo dirigido por Delphine Deloget.

El pequeño Sofiane (Alexis Tonetti) gime de dolor mientra su hermano Jean-Jacques (Félix Lefebvre) lo impulsa a toda velocidad, en un carrito de supermercado, hacia el hospital. Su madre Sylvie (Virginie Efira) no responde su celular porque tiene barra llena en el bar donde trabaja; es hasta que un par de policías vienen a buscarla y llevarla al hospital que se entera del incidente. Sofiane está bien, solo sufrió algunas quemaduras por intentar usar una freidora a la mitad de la noche, sin embargo, este percance pone en marcha una serie de eventos desastrosos para la familia. Preocupados por Sofiane, empleados del Servicio de Bienestar Infantil pronto llegan para llevárselo a una casa de acogida pese a los reclamos de su madre, quien a partir de este momento intentará vencer a un sistema contradictorio para reunirse de nuevo con su hijo.

Con Efira como nuestra guía, All to Play For nos conduce a un mundo frustrante, casi claustrofóbico, en donde un sistema supuestamente preocupado por el bienestar infantil crea cicatrices emocionales en toda una familia. Su accionar es inmisericorde pues castiga a Sylvie por ser una madre imperfecta, pero ¿qué madre es perfecta? 

En toda su soberbia, esta maquinaria institucional minuciosamente juzga cada detalle en la vida de Sylvie y asegura que ella es el problema; no importa todo lo que haga o diga, nada es suficiente para satisfacerlos. De hecho, da la impresión de que las cosas empeoran cuando intenga seguir sus reglas. India Hair (A Radiant Girl) es excelente como Mrs. Henry, la trabajadora encargada del caso de Sofiane, pues hay una combinación de dulzura y terquedad en su actuación que ayuda a exacerbar los sentimientos de desesperación hacia el sistema entero, pero también nos permite comprender que detrás de ese accionar hay humanidad y buenas intenciones.

Este sistema social es importante y necesario para asegurarle una buena calidad de vida a niños en situaciones complicadas. Deloget nos muestra que el problema no es su existencia sino la manera en cómo generaliza todo: atienden el caso de Sylvie de la misma manera como atienden todos los demás casos, ya sean de abuso o maltrato severo, y al hacerlo, se olvidan del trato humano, de solucionar un caso específico con características específicas. 

Deloget es muy inteligente en la manera en cómo nos adentra en la vida de Sylvie para crear a un personaje tridimensional y plantear cuestionamiento sobre sus aptitudes como madre. Es terca, desorganizada, trabaja por las noches y tiene un complicado historial familiar que incluye a un hermano inestable (Arieh Worthalter), pero también demuestra una y otra vez el amor que tiene hacia sus hijos. La película te muestra su vida, su entorno y sus relaciones familiares para que te conviertas en juez de su predicamento: ¿es mala madre? ¿Bienestar Infantil tiene razón? ¿Están llevando las cosas demasiado lejos? ¿Qué papel juega el amor en un caso así?

Virginie Efira es impresionante. La complejidad del guion y la frustruación de Sylvie es transmitida a la perfección gracias a una actuación llena de pequeños y grandes detalles que te sumergen en la historia y te hacen empatizar con el descenso a la locura por el que está atravesando esta imperfecta mujer. Ya sea explotando en un grupo de ayuda, viendo con orgullo a su hijo tocar la trompeta o aguantando las ganas de gritar frente a un juez, Efira da cátedra de actuación.

Pero All to Play For no solo se enfoca en cómo la ausencia de Sofiane impacta en Sylvie, sino también en Jean-Jacques, quien es llevado a la vida por un Félix Lefebvre (Summer of 85) vulnerable y encantador. Jean-Jacques está en plena adolescencia y está atravesando por su propia crisis de identidad, así que entre querer recuperar a su hermano y lidiar con una madre cada vez más desesperada, su vida sufre un cruel desbalance, y Lefebvre está ahí para hacernos empatizar con el caos emocional de su personaje.

Con ayuda de sus antecedentes de documentalista, Deloget forja una obra absorbente, poblada de personajes tan imperfectos como auténticos, en donde se cuestiona el significado de la palabra “fracaso” para la sociedad y los sistemas que la conforman.

“All to Play For” tuvo su estreno mundial en Un Certain Regard en Cannes 2023.

Foto de portada cortesía de THE PR FACTORY.