Mauricio Ruffy fue uno de los hombres más aclamados dentro y fuera del octágono después de su magnífico debut en la UFC contra el veterano Jamie Mullarkey, al que propició un arrollador knockout técnico en el primer asalto del UFC 301 en Brasil. El nativo de Sao Paulo, de 30 años, fue premiado con uno de los bonus de la noche de 50.000 dólares, se llevó comparaciones con Conor McGregor y fue elogiado notablemente por Dana White, CEO de la compañía.
"¡Este tío es una BESTIA absoluta, uno de los mejores debuts de la historia de la UFC!", exclamó el creador de la UFC en sus redes sociales, compartiendo la espectacular secuencia que desencadenó el triunfo del nuevo ídolo local en el Jeunesse Arena de Río de Janeiro, en Brasil.
Ruffy, con un historial variado en las artes marciales mixtas profesionales, llegaba al mayor combate de su vida con un balance de 10 victorias y una derrota en las MMA, ganándose su oportunidad en el evento numerado en Brasil tras su victoria sobre el ruso Raimond Magomedaliev en las Contender Series de 2023. En sus primeras declaraciones sobre la lona, precisamente quiso apuntar al actual rey del peso ligero y compatriota de su anterior rival, el campeón Islam Makhachev.
"Disfruta de tus días arriba del todo. Sé que estás enfadado porque gané a tu amigo, pero disfruta mientras puedas, porque un nuevo rey está viniendo", espetó en el octágono, desatando la locura entre el público local. Algo más tarde, ya reposado y duchado tras su espectacular debut en la UFC, Ruffy demostró tener la cabeza amueblada al ser preguntado sobre las comparaciones con Conor McGregor.
"Creo que no puedo compararme con Conor todavía. El tío ha tenido una historia enorme con la UFC, y yo intento fijarme en él. Es el tipo que ha enseñado a todo el mundo cómo vivir de las luchas, y solo puedo agradecer a los aficionados que me comparan con él", sonreía Mauricio Ruffy, una nueva promesa para las artes marciales mixtas brasileñas.
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