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La Justicia confirma cuatro a�os de prisi�n al futbolista Santi Mina por un delito de abuso sexual

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El TSJA s� que estima en parte el recurso impulsado por la defensa del acusado y rebaja la indemnizaci�n de 50.000 euros a 25.000 euros por el da�o moral causado a la v�ctima.

Santi Mina llegando al juicio, en 2022.
Santi Mina llegando al juicio, en 2022.Carlos BarbaEFE

La secci�n de apelaci�n de la Sala Civil y Penal del TSJA ha confirmado la sentencia de la Audiencia de Almer�a por la que conden� al futbolista Santi Mina a cuatro a�os de prisi�n por un delito de abuso sexual. Sin embargo, s� que estima en parte el recurso impulsado por la defensa del acusado y rebaja la indemnizaci�n de 50.000 euros a 25.000 euros por el da�o moral causado a la v�ctima.

La sentencia, contra la que cabe recurso ante el Tribunal Supremo, acepta los hechos probados de la resoluci�n de la Audiencia de Almer�a, que relataba los abusos sexuales que se produjeron en junio de 2017 en una furgoneta que estaba estacionada en las proximidades de una discoteca de M�jacar (Almer�a), donde pernoctaban y viajaban Mina y otro acusado con dos amigos m�s, seg�n ha informado el TSJA.

El fallo, que confirma de otro lado absoluci�n a D.G., incide en que no "hay ninguna menci�n expresa a que la v�ctima consintiese alguno de los actos abusivos descritos" pese a que el recurrente insiste que "hubo una interacci�n sexual consentida" que fue negada en todo momento por la v�ctima.

En esta l�nea, aunque suprime el concepto de "superioridad" introducido en el relato de hechos al hacer referencia a c�mo se aprovech� el espacio en el interior de la furgoneta en el que se dieron los abusos, apunta que "no hubo consentimiento viciado de la v�ctima", puesto que ni en el relato de hechos ni en la fundamentaci�n jur�dica de la sentencia de la Audiencia existe constancia de un consentimiento.

El Tribunal rechaza los motivos de apelaci�n del condenado, en los que indica que se vulner� su derecho a la tutela judicial efectiva porque la sentencia de la Audiencia de Almer�a no fue imparcial al valorar las declaraciones de la v�ctima. Adem�s, aunque defiende que existieron contradicciones en las distintas declaraciones de la v�ctima, la Sala explica que el relato de la v�ctima carece "de contradicciones relevantes en los aspectos esenciales".

Tambi�n descarta la secci�n de apelaci�n que la v�ctima actuara animada por un motivo espurio, que consistir�a en obtener una cuantiosa indemnizaci�n. En este sentido, indica que el testimonio de la denunciante "nos parece fiable, tambi�n apreciamos que persisti� en su incriminaci�n y aunque, en efecto, a�adiese hechos nuevos en su segunda declaraci�n, hemos descartado que ese extremo tuviese relevancia".

La sala rechaza el recurso de la acusaci�n particular, al que se adhiri� el Ministerio Fiscal, en cuanto a un aumento de la pena al entender que los cuatro a�os de prisi�n impuestos son proporcionales a la "fugacidad" de la conducta t�pica y a la "voluntad reparadora" evidenciada por el acusado, m�xime tras haberse descartado un abuso de superioridad o la participaci�n de su compa�ero.

As�, recuerda que la v�ctima no quiso reclamar ning�n tipo de indemnizaci�n cuando se le instruy� sus derechos en el juzgado, siendo ese precisamente el momento en el que la denunciante mencion� la segunda parte del abuso sexual reconocido en los hechos probados.

Respecto a la indemnizaci�n por da�os morales, la v�ctima ped�a que aumentase desde los 50.000 que recog�a la sentencia de la Audiencia hasta casi 117.000 para resarcir el da�o y su afectaci�n en su vida cotidiana, mientras que el condenado ped�a que se redujera hasta los 2.000 euros. Finalmente, el TSJA reduce la indemnizaci�n a 25.000 euros.

En este sentido, explica que debe mantener el criterio de proporcionalidad que mantiene la sala con supuestos de las mismas caracter�sticas, adem�s de tener en cuenta factores objetivos, como la fugacidad de la conducta enjuiciada, el deseo manifiesto de la v�ctima en su primera declaraci�n judicial de no percibir indemnizaci�n y la entidad de las secuelas reflejadas en el informe pericial de la psic�loga forense.

La Audiencia de Almer�a consider� que qued� probado el abuso sexual en junio de 2017 en Moj�car despu�s de que la v�ctima facilitara en la vista oral "un testimonio rotundo, abundante en detalles y coincidente en lo sustancial y esencial con lo que previamente hab�a manifestado en sede policial y en sede de instrucci�n".

La resoluci�n remarc�, adem�s, que el testimonio de cargo qued� "corroborado por distintos y definitivos elementos probatorios", entre ellos, el informe m�dico-forense que detall� lesiones extra genitales y genitales consistentes en equimosis y el pericial psicol�gico revel� que presenta sintomatolog�a ansiosa y depresiva grave relacionada con los hechos, "habiendo resultado muy afectada su vida cotidiana, sufriendo trastorno de estr�s postraum�tico cr�nico directamente relacionado con los hechos".

Asimismo, aludi� a "la declaraci�n de las testigos que dejaron claro que "lleg� claramente asustada, llorando, gritando y con un gran estado de ansiedad" y precis� que este hecho pudo ser presenciado "tanto por ambas testigos como por la facultativa que la asisti� en el centro de salud inmediatamente despu�s de la agresi�n".

El tribunal presidido por la magistrada T�rsila Mart�nez subray� que, frente a la "coherencia" del relato de la v�ctima, Santi Mina en su primera declaraci�n "neg� de forma categ�rica haberla tocado siquiera".

"Solo al encontrar ADN suyo en la cavidad vaginal, se ve obligado a modificar su versi�n de los hechos y reconocer que existi� penetraci�n vaginal", traslad� el fallo para fundamentar que la versi�n del futbolista tiene "poca credibilidad", ya que "resulta cambiante en funci�n del devenir de las diligencias de investigaci�n".

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