En 1978, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco, creó su célebre lista de Patrimonio Mundial –más conocida como Patrimonio de la Humanidad– que engloba monumentos y lugares naturales "de valor excepcional para la humanidad". A la primera lista de estos lugares excepcionales, que incluía la catedral de Aquisgrán, capital de Carlomagno, el Parque Nacional de Yellowstone, las islas Galápagos o la ciudad de Quito, se han añadido símbolos del patrimonio cultural y del genio artístico de la humanidad como las pirámides de Egipto, el Partenón de Atenas, la Roma imperial, las impresionantes ciudades mayas de Mesoamérica, la Gran Muralla china o el santuario inca del Machu Picchu.
Estos son algunos de los más importantes monumentos incluidos en la lista de Patrimonio de la Humanidad y los motivos que los llevaron a ser considerados obras cumbres el ingenio humano y a merecer una especial protección y preservación.