CRITICAS
1355 visionados 1 comentar

Death Drug (1978)

por en 12 agosto 2021
FICHA TÉCNICA
 
TÍTULO ORIGINAL:

Death Drug

PAÍS:

Estados Unidos

DURACIÓN:

73'

 

Imagínate. Corre el año 1986. Y eres Philip Michael Thomas (PMT). Estás gozando de un gran éxito, interpretando a Ricardo Tubbs en “Corrupción en Miami”. Y aún te quedan éxitos por delante. Como ser co-prota de Bud Spencer en la serie esa que ponían en Telecinco, hasta que te sustituyeron por el ruiditos de “Loca Academia de Policía”.

Esta carátula la tiene que haber hecho el mismo PMT. O sea, ¿la serie se llama “Extragrande”, ponen a este de prota y ponen a Bud Spencer TERCERO? Venga, hombre

Pero no estás satisfecho.

Resulta que Don Johnson cobra más que tú. Puede que por tema racial. Puede que porque sea más popular que tú. Pero el caso es que te jode. Decides sacar todo tu talento y ambición a lucir. Primero, te inventas el tema EGOT, insistiendo que lo serás al ganar un Emmy, un Grammy, un Oscar y un Tony. Y dices que lo vas a conseguir a los cinco años de empezar en “Corrupción en Miami”. En los 35 años separando eso de ahora, 13 personas han llegado a ser EGOT. Tú no eres uno de ellos. Ni siquiera has estado nominado. A ninguno de los premios.

Así que apuntas un poquito más bajo. Sacas un disco de reggae pop. Le pones de título el muy Coehlano “Living the Book of my Life”. Es decir, “Viviendo el Libro de Mi Vida”. O sea, “Viviendo mi Biografía”. Que, si existiese, (no existe), contaría tus vivencias. O sea, “Viviendo”. O, si queremos ser más dramáticos, con tal de aspirar a un E, un G, un O o un T, “Hey, No Me He Muerto. ¿Os Acordáis de Mí?”.

Sacas un single llamado “Just the Way I Planned It” (“Igualito a lo que planeé”). No lo compra ni el tato (es decir “No Igualito a lo que Planeé”). Decides cantarla en un episodio de tu serie, a modo de promo. En el episodio en concreto, estás de infiltrado “homeless”, y la cámara te sigue durante más de dos minutos mientras vas andando, cantando tu canción. O sea, que eres el único “homeless” fan de Philip Michael Thomas.

La escena empieza a la salida de una convención de dobles de Ted Lasso

No surte efecto. En la siguiente temporada, convences a los productores para colar otra canción tuya, “La Mirada” (tal cual), en un episodio de fondo. Curiosamente, en este episodio, compartes “cartel” con Randy Newman que, mira tú, está a un premio Tony de ser EGOT.

“Hay un EGO en mí… que seguro que le duele al tuyo”

No surte efecto. O sí. Porque, y puede que sea casualidad, pero justo tras este segundo episodio, Don Johnson decide que él también puede compaginar lo de ser poli en naúticos con soñar a salir algún día en “Tocata”. Y saca su propio disco, “Heartbeat”.

Y, sin llegar a ser “Thriller”, y sin llegar Don Johnson realmente a “canter”, vende lo que ni podías soñar tú.

Pues vaya mierda.

Buscando remedio y la carrera meteórica que te mereces, decides embarcarte en un plan osado.

Paso 1: Te haces con una peli vieja tuya que nunca se estrenó (no suena a gran cosa, pero USA no es España. Allí, generalmente, las pelis se estrenan).

Paso 2: La llenas de media hora de paja para mayor gloria de tu carrera musical.

Paso 3: ESTRENAS ESA MIERDA.

Y ahora, amigos, os voy a dar un paseo por esa mierda: “Death Drug”, o “Droja Mortal” (el título lo he puesto yo). Y no, ya no hace falta que os imaginéis que sois Philip Michael Thomas. La verdad, no sé ni por qué empecé eso. En mi defensa, estoy raro. Llevo semanas de mudanza, es tarde, y tras dos días sin una pizca de cafeína, me he tomado un Monster. Cosas que pasan.

La cosa empieza con PMT bajando una escalera de caracol, vestido igual que Tubbs en “Corrupción en Miami”. Porque es el que hace de Tubbs en “Corrupción en Miami”, y quiere que sepamos que es el que hace de Tubbs en “Corrupción en Miami”. Hay un ruido constante de fondo, como si un elefante se estuviera meando en una piscina desde un trampolín de 6 metros. Voy a ignorarlo.

Al carajo. Os voy a transcribir tal cual la chorrada que suelta ahora PMT, con mis pensamientos paralelos en paréntesis.

  • Hola. Mi nombre es Philip Michael Thomas. Soy actor. Puede que me hayas visto en películas (no, eres Tubbs), puede que en la televisión (que sí, eres Tubbs) o sobre el escenario (no, joder, eres Tubbs. Y no suspires así, que sé que estás pensando en tu EGOT). He hecho muchos papeles (bueno, pero principalmente Tubbs), desde médicos (hasta Tubbs), hasta soldados (o Tubbs) o el poli molón Ricardo Tubbs en “Corrupción en Miami” (hombre, por fin lo admite).
  • Da igual el papel que interprete un actor (como por ejemplo, Tubbs), requiere una cantidad increíble de disciplina (me río, porque sé lo que viene), concentración y, a veces, otras cosas que no se pueden definir (o sea, disciplina y concentración). A veces te toca un papel fácil (Tubbs), y a veces tienes que cavar hondo, hondo (esto lo ilustra con una especie de “fisting”)…

  • … muy hondo dentro de ti, y das con cosas que te fascinan hasta a ti (pero a las Academias no: ¿POR QUÉ? ¿POR QUÉEEEE?). Tuve la gran suerte de dar con un papel así, en una película llamada “Droja Mortal” (mira, por soltar lo que acabas de soltar sin reírte, ya te daba todos los EGOTS del mundo). El papel que interpreté era el de Jesse Thomas (o sea, muy hondo, muy hondo, pero que no se te olvide el apellido) un aspirante a músico…

Aquí PMT se va a un piano y lo empieza a aporrear y aullar como un borracho que no se va de un bar de madrugada. No sé con qué fin. ¿Es para que sepamos lo que es un músico? Porque cuando ha dicho que ha hecho de médico, no ha tenido huevos de hacer una vasectomía ni nada, y tampoco se ha dejado reventar por una granada al decir que había hecho de soldado. Pero bueno, que siga contándonos su puta vida…

  • Lo tenía todo a su favor: una carrera en auge, una esposa preciosa, y una beca para estudiar en el Conservatorio (¿Por qué me estás contando la peli que voy a ver en unos instantes, y que de hecho no estoy viendo ahora mismo PORQUE NO CIERRAS EL PUTO PICO?). Pero cometió un grave error (como, por lo visto, has hecho tú también, porque acaba de haber un corte muy cantoso): se metió en la droja (aquí vuelve a suspirar, mientras agita la cabeza, en plan “qué pena, Jesusito de mi arma”. Recordad: disciplina y concentración). Wack. A veces lo llaman polvo de ángel. El precursor de lo que ahora llamamos crack. Os lo digo: esta fue una de las experiencias más increíbles de mi carrera de actor (la otra fue Tubbs, TU ÚNICO OTRO PAPEL). Espero que disfrutéis de la dramatización (aquí empiezo a dudar de si lo que vamos a ver es una dramatización de su interpretación en “Droja Mortal”, y no la peli en sí, pero no, le pasará como a mí cuando escribo críticas, que solo puedo escribir “película” tantas veces, y para no repetirme, empiezo con “cinta”, “título”, “proyecto”, “peli”, “filme”… “dramatización”. Hmm. Puede que me la guarde como recurso).

Pero bueno, con esto me dejo de transcripción. Empieza, espero, DROJA MORTAL.

Bueno, sí y no. Ahora tenemos un prólogo (¿o lo otro fue prólogo y esto es prefacio?), claramente grabado en el 86, y no cuando se rodó la peli, en el que Paco Umbral presenta las noticias, y nos habla de la DROJA MORTAL.

“He venido a hablar de mi droja”

Por lo visto, vamos a ir en directo a un tío, al que le sale espuma de la boca, que se ha tomado la droja, y está atacando con un palo a patinadores.

“¡QUE NO ME PUEDO AFEITAR TRANQUILO CON TANTA RUEDECITA!”

Total, que el calvo va dando palos (y fallando), mientras una voz mal doblada hace del cámara de la tele, soltando cosas sin emoción en plan “oh, no, que alguien le pare. Para, tío. ¿Qué te pasa?”. Y me doy cuenta de repente que la mayoría de las ‘found footage’ son mejores que esto. Los patinadores paran al drojata, le pilla la poli, se escapa, y sufre el atropello más lento del mundo por un taxi. Pero que es suficiente para matarle. Y, con esto, por fin…

En menos de un minuto, sale PMT en créditos dos veces, en fuentes diferentes.

Una vez por disciplina, y otra por concentración

Nuestro héroe Jesse es un fontanero al que aceptan para el conservatorio, a la vez que una discográfica se interesa por su demo, y decide salir a celebrarlo asistiendo a un concierto de The Gap Band con su mujer, interpretada por la madre de Will Smith en “El Principe de Bel-Air”. Ahora toca tragarnos enterita una canción llamada “Menea tu Culito en la Disco”. Llevamos 12 minutos de peli, en los cuales hemos visto 3 minutos de peli.

Total que, a pesar de estar pasándolo en grande con su mujer y sus amigos, los únicos dos blancos en todo el antro, y su gran futuro en la música, Jesse se va al baño a comprar droja, en eso que llega un tío y le ofrece lo que Jesse cree que es un porro, y gratis. Jesse lo acepta. O sea, que Jesse ya tomaba droja. Lo cual me hace pensar que PMT se puede meter el discursito anti-droja del principio por el culo, ya que claramente quería decir realmente “compra mi mierda, que es de la buena”.

Jesse vuelve a la sala y, mientras sus amigos bailan, se toma la primera calada…

Esta es la cara que se te queda por no comprar tu droja en “Disciplina y Compasión S.A.”

El efecto es inmediato, y Jesse se queda mirando pasmao a una tercera blanca que acaba de entrar. ¡La ve como negra! Me quedo debatiendo si esto mejoraría o empeoraría las cosas si diésemos esta droja a los de VOX.

A la mañana siguiente, Jesse va a los de la discográfica, que enseguida le ofrecen gira en todos los estadios, apariciones en todas las televisiones, y números uno hasta decir basta. Lo típico al mostrar una demo, vamos. Jesse decide ir a celebrarlo yendo a visitar a su padre a la residencia para contarle que le mola la música. Y, al no decir nada el padre, Jesse, bueno, se viene un poco arriba.

“¿Para cuándo mi EGOT, eh? ¿PARA CUÁNDO?”

De allí, pasamos a un plano fijo de una tele, donde un comentarista nos explica que la carrera de Jesse va viento en popa, que van a hacer una película basada en su canción de éxito. Y ojo: este programa se supone que se emite EL DÍA DESPUÉS DE LA ESCENA QUE ACABAMOS DE VER. Pero bueno, ¿quién quiere lógica cuando tenemos en exclusiva el videoclip de Jesse cantando su hit, que se llama “Igualito a lo que Planée”- oh, no. Mierda. ¿No tendrán los santos huevos de-?

Pues sí, amigos. Es hora de tragarnos el puto videoclip de PMT con su cancioncita de los cojones. “¡Pero, Toni!”, estaréis diciendo. “Este vídeo es claramente de los 80. Parece la placenta de Kraftwerk”. Pues sí, este video es del 85. Empieza con PMT en plan pecholobo haciendo el robot, y luego señalando a la pantalla en plan “lo he clavao”. Luego le tenemos nadando en un río de modelos pintadas raras, como Freddie Mercury en “I Want to Break Free”, luego su cabeza aparece en la barriga siluetada de una embarazada, luego se multiplica y sus caras van alternando entre normales y calaveras. Y aún no ha caído en el infierno de la droja.

¿O sí?

Volvemos a los 70, y Jesse está tirado en el suelo, a un cheeseburger de ser David Hasselhoff.

Y cavando hondo como actor, muy hondo, muy hondo…

Así que ya no sabemos si ha pasado un tiempo, o Jesse, to fumao, ha soñado protagonizar un videoclip de los 80. O ha soñado eso, más la visita a la discográfica. O, y no recuerdo haber fumao nada, pero quizás yo estoy drojao y he soñado esta mierda de película. Le pilla su mujer, y le dice que huele raro. Él responde que es un after-shave, pero ella dice que no, que huele a producto químico. No como el after-shave, que es agua de manantial, no te jode.

Jesse va a cepillarse el pelo al baño, pero la droja le hacer alucinar con que su cepillo se ha convertido en un cocodrilo bebé…

…y reacciona con mesura.

Mientras tanto, su mujer mira la puerta del baño, preocupada. Supongo que está pensando que Jesse, con su tío y con su tía irá a Bel-Air.

Al día siguiente, vemos cómo Jesse está ‘colocao’ en el trabajo, y se acaba el porro de la otra noch-espera, que todo esto ha pasado… ¿CON MENOS DE UN PORRO? Mira que pensé que yo era un peso ligero, que con dos Champines me entrego a quien sea, pero esto es patético.

Jesse va a buscar a su colega del baño, que está jugando al tenis con un blanco, que es el que tiene el control de la droja (BLANCO TENÍA QUE SER). El blanco esconde la droja en el mango de su raqueta (y como no tiene nombre, y es el que provoca pedos en la gente, le llamo yo Roger Pederer), y el colega le dice a Jesse que ya no tiene lo que le dio la otra noche, pero que, si le interesa, le puede dar algo llamado Wack-no. No me jodas. Toda esta mierda y ¿Jesse AÚN NO HA TOMADO LA DROJA MORTAL QUE DA TÍTULO A LA PELI?

Pues ahora sí. Le da UNA CALADA DE MIERDA al wack ese. Y se lía la de Dios.

Jesse empieza a ver cómo tubos fluorescentes se convierten en serpientes, se vuelve paranoico y violento con sus compañeros de la fontanería…

…y yo empiezo a sospechar que me han colao champín en el Monster, porque esta escena es claramente del 78, pero la matrícula de Jesse acaba en “VCE”. Como “Miami Vice”. O sea, o PMT tiene poderes videntes, o yo lo flipo.

Pues nop. Estoy bien. Por lo visto, al acabar su carrera y al ver frustrados sus intentos de ser EGOT, PMT se convirtió en La Pitonisa Lola de Estados Unidos. Vueltas que dan la vida…

Jesse se mete cada vez más en la droja (vamos, que creo que se compra otro wack), y le pega una paliza a su mujer por preguntarle si quiere cenar pollo o bistec (se habrá hecho vegano sin avisar). Tras esto, va al estudio (ah, o sea que eso no era un sueño), donde cree ver a los de su banda haciendo muecas de querer matarle. Jesse se vuelve loco, se pone a gritar y a correr por el estudio, así que le cancelan el contrato.

Mientras tanto, la mujer de Jesse se entera de que está embarazada, y va a hablar con una amiga suya, que es doctora. Esta le explica que Jesse tiene que dejarlo ya, pero que, aunque lo deje, los efectos pueden tardar años en desaparecer (beneficio-precio decente, digo yo). La doctora casualmente tiene acceso a una sala llena de adictos al wack, y lleva a la mujer de Jesse para enseñarle los horrendos efectos que puede tener, como a este, que está atrapado en un bucle de “mi padre se ha tirado un cuesco y no hay quien lo evite”…

… o este otro, que paga su adicción siendo sodomizado todos los martes por el hombre invisible.

Mientras tanto, Jesse habla con su amigo, que le dice que su mujer está embarazada y que lo deje. Y, como es hombre, Jesse le hace caso, y va a decirle a su mujer que lo de la droja se ha wackabado. Se mete a desintoxicación, y todo bien, hasta que alucina con unas ratas entre las naranjas del Eroski, y se queda to loco.

“Una de las experiencias más increíbles de mi carrera como actor”

Luego, se le queda la vista como a Predator…

…y revisita TODA LA PELÍCULA DE NUEVO A CÁMARA LENTA.

La misma cara se me quedó a mí cuando me di cuenta que podía haber saltado directamente a esta parte en vez de tirar una hora de mi vida a la basura

Mientras corre gritando por el Eroski revisitando la peli en su cabeza, su vista deja lo de Predator. Ahora ve como a través del culo de una botella. Y todo el mundo parece o bien un mutante o bien la Duquesa de Alba. Y bueno, contar lo que ocurre después sería spoiler. Aunque, spoiler, le atropella un camión y le mata.

Pasamos a un telediario claramente ochentero, presentado por un enano desde la etiqueta de una botella de whisky…

…que nos cuenta que Jesse ha sido nominado al Grammy (¡A TRES PASOS DEL EGOT!) por un disco… que no llegó a terminar… porque le echaron y eso… bah, yo qué coño sé. Lo siguiente es la tomadura de pelo más grande de la historia del cine que no incluya el nombre “Martha”. El telediario dura siete minutos, en los cuales el presentador habla con una voz en off que está en la escena de la muerte (“no nos llega la señal” mis cojones treinta y tres), y luego entrevista a una rubia de bote que hace el papel de su vida como “mujer que está muy afectada por la muerte de Jesse a pesar de no haber salido en toda la película, porque esta escena se rodó 8 años después”. Ella nos explica que Jesse estaba muy contento antes de morir porque su disco, “Vientos de Comercio” (¿te puedes inventar cualquier título que quieras y te sale eso?) iba camino de doble platino (¿Y ENTONCES POR QUÉ SEGUÍA DE FONTANERO?). Y luego vemos el funeral desde un helicóptero. Aunque sospecho que es realmente un atasco.

Nace el niño, y unos años más tarde su madre le lleva al cementerio por el cumple de Jesse. Su mujer le cuenta a la tumba de Jesse que le puso el día anterior al niño el demo de Jesse (demo, disco de platino, mira, yo paso ya). El niño ve al camello (uhhh, ciclo sin fin). Y créditos.

A destacar, la labor de “Ladd McFartland”, o “Chico McTierrapedo” en inglés. Que encima hace boom. Si es que la vida ya es comedia.

Pero… Espera. Según Youtube, aún le quedan 5 minutos a est- ¡MIERDA! En un “fuck you” irónico a este fan de Marvel, ¡tenemos post-créditos! Y muy elegante, oye. La película sube hacia arriba, y viene desde abajo la pantalla de un televisor (que emite estático), que es apagado por PMT. Sí, amigos, nos avecina otra chapa. Chapa que paso de transcribir, porque bastante he sufrido. Nos habla de los horrores de la droja mientras juega al billar (ojo, un partido ya iniciado. O sea… ¿ha visto la puta peli o no?). Nos da las gracias por ver. Pero, sobre todo, nos da las gracias por escuchar. Me debería dar las gracias por no ir a buscarle.

Más créditos. Tu puta madre.

Dos cacas. Una por cada porro. O una por disciplina, y otra por concentración.

Comentarios

¿Te gustó? ¡Puedes apoyar a CINECUTRE con Patreon!

Become a patron at Patreon!

Comparte esto:
Nota del Crítico
Crítica


comentarios
 
Deje una respuesta »

 

Dejar una respuesta