Respira profundamente porque esto no es motivo de preocupación. Si alguna vez encuentras tu compresa o tampón impregnados en sangre de color casi negro es por una razón muy sencilla: se trata de sangre más antigua.

Ocurre porque cuando comienza el desprendimiento de óvulos del útero, al inicio de cada menstruación, no toda la sangre sale de inmediato. Hay sangre que se queda acumulada en las paredes uterinas y cuanto más tarda en salir, más oscura se vuelve. A veces llega a adquirir una tonalidad casi negra.

¿Hay que preocuparse por la sangre menstrual negra?

No obstante, si el sangrado es constante y siempre tan oscuro, puede ser indicio de algo más grave como la endometriosis. La doctora Urrutia (catedrática en ginecología y obstetricia) declara que en estos casos los síntomas, además de sangre oscura, son dolores muy intensos al mantener relaciones sexuales, cólicos frecuentes y dificultades para quedar embarazada.

Otro de los motivos por los que tu sangre menstrual es negra es que tengas algo en el conducto vaginal. Puede ser un tampón que hayas olvidado quitarte al final del ciclo, preservativos, juguetes sexuales... Estos pueden causar irritación en el conducto y hay que removerlos de inmediato suelen ir ligados también de estos otros síntomas: mal olor del flujo vaginal, picor en la vagina, erupciones genitales, dificultad a la hora de orinar e incluso fiebre.

Este color es también común si estamos en un proceso de postparto, recibe el nombre clínico de loquios sanguinolentos y es completamente normal.

La depresión y el estrés o la ansiedad también son factores que pueden tener como resultado que el color de tu menstruación se oscurezca. Esto se debe a que favorecen el proceso de oxidación de la sangre.

    Entonces, ¿puedo hacer algo si la sangre de mi periodo es negra?

    "Lo cierto es que no" Declara Urrutia. Aunque no descarta que los hábitos de vida saludables como dormir bien, hacer ejercicio con regularidad y comer alimentos de calidad puedan ser útiles para mantener el equilibrio hormonal, lo que se traduciría en una mayor y mas temprana expulsión de sangre acumulada en el útero.

    Si notas que este síntoma va acompañado de otros como los mencionados anteriormente u ocurre durante un embarazo, es recomendable que acudas al médico para hacer una valoración.