Tiempos recios es la �ltima novela de Mario Vargas Llosa, para algunos, comparable con La fiesta del Chivo. Yo no me atrever�a a tanto, pero s� puedo decir que es una obra fundamental para todos los que por un motivo u otro nos sentimos atra�dos o emparentados con Guatemala. Y es que es esta magn�fica obra, Vargas Llosa nos desentra�a la historia de este bello pa�s que solo se puede explicar por la injerencia extranjera y por la ambici�n de muchos. Todo parte de la compa��a que ya hemos conocido en otras obras de Latinoam�rica como Cien a�os de soledad, la United Fruit, creada para saquear a los pa�ses productores de fruta y que estableci� un monopolio contra el que nadie pod�a, sin pagar impuestos, sin sindicatos, sin derechos, sin preguntas. Explotaci�n de materia prima y de personas, tratadas como esclavos del capitalismo estadounidense. al fin y al cabo, la historia de siempre. Y en su af�n de no perder este monopolio, la United Fruit no para ante nada y derroca a los presidentes de Guatemala, Jacobo �rbenz, por su ideolog�a progresista, que particip� activamente en la Revoluci�n de 1944, y despu�s a Castillo Armas. La United Fruit actu� �sobornando a autoridades y enga�ando a campesinos e ind�genas ignorantes, y negociando con dictadores corruptos gracias a los cuales �aprovechando su codicia o estupidez� hab�a ido adquiriendo propiedades que ahora sumaban m�s hect�reas que un pa�s europeo de buena contextura�. Consigui� el control del puerto, de la electricidad y el ferrocarril.Vargas Llosa nos acerca a unos personajes reales de carne y hueso mostr�ndonos sus sentimientos, no solo su pol�tica. Como en novelas anteriores, hace un retrato psicol�gico de los personajes pol�ticos. Arbenz aparece como un hombre justo que cree en la reforma agraria como medio para hacer salir a Guatemala de su pobreza. Cree de verdad en la justicia y en que todos los guatemaltecos merecen una oportunidad. Castillo Armas junto con los pa�ses extranjeros ser� qui�n le eche del poder, del que se retira elegantemente dando un discurso en el que acusa a los verdaderos culpable, la United Fruit y los Estados Unidos. Castillo Armas, coronel d�bil, cobarde, borrachillo y manipulado por su amante La Miss Guatemala, que nunca lo fue: �Todo el mundo hablaba mal del Presidente Castillo de Armas y, entre los muchos chismes que corr�an, nadie apostaba un quetzal por su vida�. Johnny Abbes, torturador dominicano, feo, fe�simo y malo mal�simo que no para de huir para enga�ar a su destino. Desde el principio, se inventan una incursi�n de la URSS y del comunismo en esta pac�fica tierra en que el sesenta por ciento de los habitantes son indios pobres y analfabetos despreciados por la minor�a blanca y donde pr�cticamente nadie sabe nada del comunismo. Este af�n de los prepotentes Estados Unidos por aniquilar el comunismo all� donde est� o incluso donde no est�, hizo morir a muchos guatemaltecos inocentes. A esto se une un ej�rcito siempre dispuesto a dar un golpe de Estado. Todo esto se narra con la habitual destreza de Vargas Llosa, con una prosa seria, pensada, destilada. Volviendo al pasado y resucitando en el presente, a veces el lector se siente perdido ante tanto militar, por no hablar del elenco de dictadores con que nos encontramos, Trujillo, Duvalier, Odr�a� Otro de los habituales recursos de Vargas Llosa es tener varios ejes narrativos, en este caso, el golpe de Estado, la historia de Marta Borrero y la historia de Castillo Armas. Muy interesante es la historia de c�mo Edward Bernays (que empez� su andadura en la United Fruit) crea el marketing, de c�mo se influye en el consumidor: �La consciente e inteligente manipulaci�n de los h�bitos organizados y de los opiniones de las masas es un elemento importante de la sociedad democr�tica. Quienes manipulan este desconocido mecanismo de la sociedad constituyen un gobierno invisible que es el verdadero poder en nuestro pa�s�. Y todo esto salpicado por una historia de desamor donde nos enamoramos y odiamos a Miss Guatemala, Marta Borrero, personaje inspirado en la guatemalteca Gloria Bola�os Pons, una mujer que hace se aprovecha de su belleza para vivir a costa de sus amantes, entre otros, Castillo Armas, que destroza la vida de su padre, su marido y su hijo, que se hace comentarista pol�tica en la radio, y que siempre sale indemne, mientras los dem�s caen muertos a su alrededor. Pobre Guatemala, su historia se me asemeja a un luchador que intenta levantarse una y otra vez, para volver a recibir un golpe certero que vuelve a mandarlo al suelo. Mientras le�a Tiempos recios, que cuenta la historia de Guatemala, s�, pero al fin y al cabo, la historia de la Guatemala del poder, de los pol�ticos, los militares y las familias ricas. Los ind�genas siempre olvidados. Cuando tienen la suerte de que el Gobierno les done tierras, se las vuelven a quitar. Se mencionan cuando aparecen el n�mero de muertos en las revueltas. Y sin embargo, he de decir que no hay ojos m�s bellos que los de los ni�os guatemaltecos. Enlace: HTTP://CITAENLAGLORIETA.COM + Leer m�s |