El Cádiz CF abrazó el objetivo de la permanencia en Primera División y ya se pone manos a la obra con la vista puesta en la temporada 2023/24 en la que de nuevo peleará por la continuidad en la máxima categoría del fútbol español, si es posible con menos sufrimiento.

Habrá incorporaciones a la plantilla para la nueva campaña con la idea de ser más fuerte en el largo tránsito de las 38 jornadas. Entre dos y cuatro fichajes es la previsión inicial realizada por el presidente, Manuel Vizcaíno, aunque el número puede ir cambiado a lo largo del verano en función de lo que vaya dando de sí el mercado.

Y el mercado ofrece una posibilidad que ya aprovechó la entidad cadista en la temporada 2021/22. Oussama Idrissi se unió al equipo amarillo en el mercado de invierno de ese curso cedido por el Sevilla y ayudó a conseguir una salvación que se había puesto muy complicada.

El neerlandés participó en una docena de partidos de Liga con el Cádiz CF (más de 900 minutos y un gol) y regresó al Sevilla con la satisfacción del deber cumplido y su futuro en el aire. El club hispalense no contaba con el extremo diestro (juega con la derecha pero suele ocupar la banda izquierda) para el ejercicio 2022/23 la entidad cadista volvió a intentar contar con sus servicios, pero nada pudo hacer frente a las mejores condiciones que le ofreció el Feyenoord, al que salió de nuevo en calidad de cedido y con el que ganó la Liga.

Idrissi jugó 38 encuentros en el Feyenoord (2.154 minutos), marcó siete goles y dio ocho asistencias. Ahora vuelve al Sevilla, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2025 aunque a priori con pocas opciones de quedarse.

El club con sede en el Sánchez-Pizjuán, que en su día pagó 12 millones de euros por el fichaje de Idrissi, pondrá en el mercado al futbolista con la idea de hacer un traspaso para recuperar la inversión que hizo por él. Si no es posible una venta, podría producirse una nueva cesión y en ese caso el Cádiz CF podría entrar en escena si ve necesario reforzar las bandas.