CON�CENOS
Murcia es una ciudad fundada en el a�o 831 por Abd-Al-Rahman II en un enclave privilegiado, en el centro del
Valle del R�o Segura. De la importancia que alcanz� en la �poca �rabe da buena idea la muralla que la circundaba, algunos de cuyos restos a�n son visibles en diferentes lugares de la ciudad, que ten�a 15 m de altura y 95 torres. Una importancia que queda tambi�n de manifiesto en los numerosos hallazgos arqueol�gicos, como los de tipo palacial realizados en el Convento de las Claras, hoy
museo de Santa Clara.
La ciudad cristiana tambi�n ha dejado profunda huella en la fisonom�a urbana de Murcia. As�, dos de sus arterias principales, la
Plater�a y la
Traper�a, son a�n testigo de la intensa actividad gremial que se desarroll� en la urbe. Pero ser� a partir del s. XVII, y especialmente del XVIII, cuando Murcia alcance un esplendor urbano que la llevar� a expandirse m�s all� de sus murallas. Ser� �ste el momento en que se alcen las numerosas iglesias, mayoritariamente barrocas, que jalonan toda la trama urbana. Templos como los de la Merced,
San Miguel, Santa Ana, Las Claras, Santo Domingo,
Santa Eulalia o
San Juan de Dios, que unen a sus art�sticas arquitecturas un
importante patrimonio pict�rico y escult�rico, con obras entre las que destacan las realizadas por Francisco Salzillo.
PATRIMONIO
El primer templo de Murcia es su
Catedral, comenzada a construir a finales del s. XIV y que presenta elementos g�ticos, como la
Puerta de los Ap�stoles y la
Capilla de los V�lez; renacentistas, caso de la
Capilla de Junter�n, y barrocos, entre los que destaca su fachada, concebida a modo de gigantesco retablo por Jaime Bort, con una sabia conjugaci�n de escultura y arquitectura. Resa�able es tambi�n su torre, de 92 m de altura y construida en distintas fases entre los s. XVI y XVIII.Junto a la Catedral, el tambi�n dieciochesco edificio del
Palacio Episcopal y el antiguo P�sito del grano, conocido como
El Almud�, son otros buenos testimonios del auge constructivo alcanzado en la �poca rese�ada.
Murcia tambi�n atesora en sus calles y plazas magn�ficos ejemplos de la arquitectura del s. XIX, tales como el
Ayuntamiento, el
Teatro Romea y especialmente, el
Casino, un edificio construido en 1847, ampliado a partir de 1902 y recientemente restaurado, que contiene decoraciones de gran inter�s, como su sal�n de baile, el patio neonazar� o la biblioteca, sin olvidar su fachada, con una importante decoraci�n escult�rica.
El arte murciano va m�s all� de los l�mites estrictos de la ciudad. Magn�ficos ejemplos de arquitecturas barroca los tenemos en el
santuario de la Fuensanta o en el Monasterio de San Jer�nimo, conocido como "El Escorial Murciano", hoy sede de la Universidad Cat�lica San Antonio de Murcia.
MUSEOS
Toda esa riqueza art�stica e hist�rica queda patente en los
museos que posee la ciudad, como el
Arqueol�gico, el de
Bellas Artes o el
Salzillo, donde se pueden contemplar los pasos creados por el genial imaginero murciano para la procesi�n de la ma�ana del Viernes Santo, as� como su conocido Bel�n, punto de arranque de una de las tradiciones artesanas m�s arraigadas en Murcia.Otro museo, el
Hidr�ulico de los Molinos del R�o, es una de las pruebas palpables, al igual que los puentes que lo cruzan, sobre todo el denominado Puente Viejo, de la �ntima uni�n entre Murcia y el R�o Segura.
CONGRESOS
Sin embargo, Murcia no se ha quedado anclada en su pasado, sino que es tambi�n una ciudad moderna, dotada de todos los equipamientos e infraestructuras necesarios, con un amplio complejo universitario y con un
Auditorio y Palacio de Congresos que, unido a sus instalaciones hoteleras, la convierten en un lugar id�neo para la celebraci�n de reuniones y eventos de todo tipo.
FIESTAS
Todo ello en una ciudad que mantiene sus tradiciones en lo que a fiestas se refiere. As�, su
Semana Santa, con evidentes influjos de la huerta murciana, pone en las calles las esculturas de Salzillo y otros importantes imagineros. La huerta es tambi�n la protagonista del
Bando, uno de los principales actos de las denominadas
Fiestas de Primavera. Por un d�a, la huerta toma la ciudad, en una jornada en la que las vestimentas son prueba de la uni�n entre la ciudad y su huerta. El
Entierro de la Sardina, por su parte, es el colof�n a las citadas fiestas. Un desfile multicolor
declarado de Inter�s Tur�stico Internacional, con carrozas y miles de regalos para el p�blico que abarrota las calles murcianas. Como tambi�n lo hace en la
Feria de Murcia la Romer�a, en la que se acompa�a a la Patrona, la Virgen de la Fuensanta, hasta su Santuario.
GASTRONOM�A
La importancia de la huerta es palpable en la gastronom�a murciana, donde predomina el consumo de vegetales y hortalizas. Platos como el zarangollo, el pisto, la ensalada murciana, el arroz con verduras o con habichuelas, se complementan con las carnes, con el t�pico pastel de carne � el de cierva, signos de identidad de las m�s popular gastronom�a murciana.
NATURALEZA
Murcia es tambi�n un lugar excelente para practicar
senderismo. Son variados los itinerarios para poder conocer la huerta. Caminos que nos gu�an suavemente a trav�s de ella e inundan nuestros sentidos, la luz mediterr�nea, los alegres colores de los frutales, los aromas de albahaca y azahar y la sensaci�n de continua primavera. En los alrededores existen lugares de gran valor medioambiental como el
Parque Regional del Valle-Carrascoy donde se alza la ermita dedicada a la patrona de la ciudad, La Virgen de la Fuensanta y donde las hermosas vistas de la Vega del Segura son un deleite para la vista.