Tras las elecciones del pasado domingo 5 de mayo, José Raúl Mulino quedó como presidente electo de Panamá, siendo un político de larga trayectoria.
En la campaña, tomó impulso como el delfín del exmandatario Ricardo Martinelli, José Raúl Mulino pasó de ser candidato a la Vicepresidencia a aspirante al Ejecutivo, en reemplazo de su compañero de fórmula.
Es abogado, exministro de Seguridad y de Gobierno y ahora Presidente electo de Panamá, un cargo en el que pocos lo veían hasta hace unos meses.
La cadena local ‘tvn’ describió a José Raúl Mulino como un político “de pocas sonrisas, directo, pero leal”. No obstante, algunos lo retratan como un individuo con un enfoque firme. Las críticas en su contra subrayan especialmente la represión policial durante protestas antigubernamentales en el pasado, durante su mandato como ministro de Seguridad.
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Pero sobre todo, muchos lo ven como un líder cuya carrera política ha estado estrechamente ligada al exmandatario Ricardo Martinelli, hasta llegar a sucederlo en la carrera presidencial, la cual finalmente ha ganado.
Mientras algunos votantes lo ven como un aliado de Martinelli, otros lo perciben como un “títere” del expresidente, quien desempeñó un papel destacado en la campaña de Mulino a pesar de estar refugiado en la Embajada de Nicaragua en Ciudad de Panamá, donde solicitó asilo.
La juramentación de Mulino será el próximo 1 de julio para un período de cinco años.
#Urgente 🇵🇦 ¡EL SOCIALISMO ES DEROTADO EN LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES EN PANAMÁ!
— 🇪🇨 La Data Ec (@LaDataEc) May 6, 2024
¡Misión cumplida, Ricardo! dice el presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, al referirse a Ricardo Martinelli, líder del partido Somos Metas, quien fue inhabilitado en marzo . pic.twitter.com/EzQqFt2sg5
¿De dónde viene?
José Raúl Mulino nació el 13 de junio de 1959 en David, provincia de Chiriquí, en el oeste del país. Su padre, José Mulino Rovira, fue exgobernador de esa región, la cual limita con Costa Rica.
Sin embargo, durante sus primeros 17 años, Mulino vivió en la ciudad de Concepción, en la misma provincia. Más tarde, decidió estudiar Derecho y Ciencias Políticas, y se graduó de la Universidad Católica Santa María La Antigua en 1982.
Durante el gobierno del presidente Guillermo Endara, que gobernó entre 1989 y 1994, Mulino se desempeñó como vicecanciller.
El diario local ‘La Prensa’ destacó que su madre solía pedirle que sonriera, ante su carácter esquivo y seco, por el que fue apodado “Stalin”.
🇵🇦 #Ahora |“¡Misión cumplida carajo!”, mencionó el nuevo presidente de #Panamá, José Raúl Mulino. “Es una fecha, quizá la más importante de mi vida, donde cae sobre mis hombros y el de mi familia la más grande responsabilidad (..) conducir los destinos de la nación panameña”,… pic.twitter.com/HBqoW0tICy
— Noticias Tendencias (@ntendenciasec) May 6, 2024
Pero su ideología política dista de la del fallecido expresidente del Consejo de Ministros de la desaparecida Unión Soviética.
Mulino se autodefine como un hombre de “centro-derecha” y reconoce al empresario y ex candidato presidencial Samuel Lewis Galindo como su mentor político.
Asimismo, enfatiza su compromiso con “la ley y el orden”. En sus principales propuestas de campaña, resalta su intención de cerrar el paso del Darién, una peligrosa ruta utilizada por miles de personas en su intento por migrar hacia Estados Unidos.
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Además, Mulino promete revitalizar el progreso económico que, según él, su país experimentó en años anteriores.
Está casado con Maricel Cohen, con quien tiene cuatro hijos y cuatro nietos.
Ascenso político
Durante años, su trayectoria política ha estado estrechamente vinculada a la de Martinelli. Ocupó cargos como ministro de Seguridad y de Gobierno durante la administración de Ricardo Martinelli, entre 2009 y 2014.
Afirma que buscará revivir los “buenos tiempos” del gobierno de su mentor político, cuando Panamá emergió como líder en crecimiento económico regional y construyó el primer metro de Centroamérica.
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En julio de 2009, fue designado ministro de Gobierno (Interior) y Justicia por el entonces presidente. Posteriormente, en abril de 2010, Mulino asumió como ministro de Seguridad Pública. Durante su gestión, enfrentó desafíos, incluida la represión en julio de 2010 de protestas de trabajadores bananeros en la región de Bocas del Toro (Caribe), que dejaron dos muertos, decenas de heridos y más de un centenar de detenidos.
Su carrera también ha sido marcada por varios escándalos de corrupción. Al comienzo del gobierno de Juan Carlos Varela, que estuvo al mando del Ejecutivo entre 2014 y 2019, Mulino fue acusado de peculado en relación con la empresa italiana Finmeccanica, por presuntamente recibir comisiones por la compra de 19 radares.
Como resultado de estas acusaciones, fue detenido preventivamente durante siete meses hasta abril de 2016. Sin embargo, en agosto de 2017, la causa en su contra fue anulada.
La prensa local destacó que su caso fue invalidado debido a que la entonces fiscal anticorrupción Zuleyka Moore había llevado a cabo investigaciones sin la autorización judicial correspondiente.
Aunque Mulino ha afirmado que no olvida ni perdona este episodio de su vida, durante su campaña también prometió no “perseguir” a nadie.
Sin embargo, en lo que respecta a Martinelli, quien fue condenado por blanqueo de capitales y actualmente se encuentra alojado en la Embajada de Nicaragua en Ciudad de Panamá, Mulino declaró que hará todo lo posible por “ayudarlo” de acuerdo con la ley, después de que el Gobierno actual le negara un salvoconducto para viajar a Nicaragua.
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Después de votar en las elecciones de ayer domingo 5 de mayo, una de las primeras acciones de Mulino fue dirigirse a esa sede diplomática para visitar al expresidente.
De hombre leal a delfín de Martinelli
Mulino, quien era compañero de fórmula de Martinelli, se convirtió en candidato presidencial de los partidos centroderechistas Alianza y Realizando Metas tras la inhabilitación impuesta al exmandatario al recibir una condena de casi 11 años por cargos de corrupción y blanqueo de capitales.
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Hasta ese momento, Martinelli era el favorito para retornar a la Presidencia, una preferencia que rápidamente fue girando a favor de Mulino, como mostraron diversas encuestas.
El reemplazo fue autorizado inicialmente por el Tribunal Electoral, pero luego fue impugnado en una demanda ante el Supremo por la abogada Karisma Karamañites.
Finalmente, el pasado viernes 3 de mayo, solo dos días antes de los comicios, Mulino fue habilitado por la Corte Suprema de Justicia para participar como candidato.
El alto tribunal determinó que su postulación era constitucional.
“El pleno de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), por mayoría, declaró que no es inconstitucional el Punto Resolutivo Segundo del Acuerdo del Pleno 11-1 de 4 de marzo de 2024, proferido por el Tribunal Electoral (TE), y que fuera demandado por la abogada Karisma karamañites Testa”, señaló en ese momento un comunicado de la Corte.
Al emitir el dictamen, el máximo tribunal del país señalo que “la voluntad soberana del pueblo panameño” impulsó su decisión, enfatizando la importancia de preservar la democracia, la integridad institucional, la paz social y el derecho al voto de los ciudadanos.
