Contexto social, económico y político - Primera mitad del siglo XX (1900 1950)
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Contexto social, económico y político

5. EVOLUCIÓN URBANA DE LA VILLA DE CANGAS

5.1 Primera mitad del siglo XX (1900 1950)

5.1.1 Contexto social, económico y político

El análisis de este capítulo se centra en la entrada en el siglo XX, partiendo desde el año 1900 hasta el año 1950, período marcado por la emigración a América y la guerra civil española, con sus respectivas consecuencias tales como muerte, hambruna, cartillas de racionamiento, etc. El espacio urbano será caracterizado a través de los planos cartográficos de 1938 y 1940, junto con el vuelo fotogramétrico americano A (1945-9146).

Los datos afirman que en el casco viejo de la villa de Cangas habitaban 2248 residentes en el año 1900 y en total en este mismo año Cangas posee 8.011 habitantes. (Hernández Borge, 1974).

Fig.80 Evolución de la población en algunos municipios de la costa de Pontevedra 1845-1900. Las columnas (1) y (2) presentan la tasa de crecimiento anual acumulativa.

A cultura mariñeira e unha cultura tradicional. Unha gran parte da poboación carece de

instrucción formal, vive nun sistema de símbolos, crenzas, valores e mitos que se transmite

comunitariamente, e onde a escala ten un papel marxinal; a cultura escrita e minoritaria

(Santos Castroviejo, 2005).

Fig.81 Evolución poblacional de 1900 a 1950 en la comarca.

Esta época, tanto Galicia como la villa de Cangas están caracterizadas por un total predominio de la configuración espacial de marcada naturaleza rural, con un completo dominio del sector primario a nivel económico y una alta tasa de analfabetismo de más de la mitad de la población. La economía familiar estaría basada en su práctica totalidad en la agricultura y

Durante la primera mitad del siglo XX, la población gallega mantenía su carácter mayoritariamente rural, el cual, de forma lenta irá evolucionando en favor de los núcleos urbanos y no será hasta bien entrada la década de 1940 cuando este cambio comience a surtir efecto (Lage Picos, 2003).

Las causas de este desarrollo no sólo se deben buscar en los movimientos naturales de la población, sino en la propia configuración económica del municipio, dado que el lento crecimiento de la población en Galicia, con el retroceso originado por la emigración y los fuertes desplazamientos poblacionales dentro de la misma Comunidad Autónoma, acaban produciendo un despoblamiento del espacio rural en favor de las áreas urbanas, repercutiendo de manera positiva en la villa de Cangas.

La emigración como respuesta a la incapacidad del tejido productivo gallego para emplear

a su población, desde mediados del siglo XIX hasta los años cincuenta del siglo XX, se había

dirigido preferentemente hacia los países de América Latina, afectando especialmente a las

comarcas costeras. (Lage Picos, 2003, p. 114)

Fig.82 Grafico de salidas y retornos de emigrantes a America.

A principios del siglo XX, la emigración gallega hacia el continente americano se convierte en un hecho. La Gran Depresión estadounidense de 1929 conllevaría el debilitamiento del comercio y descenso de los flujos internacionales de capital, junto a un cambio en las corrientes migratorias que se dirigirían hacia América del Sur. Posteriormente existirá un considerable descenso en dicha emigración con la Guerra Civil Española (1936-1939), y después, con el surgimiento de la Segunda Guerra Mundial (1939 y 1945), debido a la dificultad que dicha situación bélica generaba para poder salir de España o por el contrario la imposibilidad de encontrar un sitio estable a donde ir como ocurre con la etapa de la Segunda Guerra Mundial (Barreiro Gil, 1990).

Fig.83 Barcos zarpando con emigrantes hacia América desde el puerto de Vigo.

La siguiente tabla muestra mediante datos estadísticos el numero de personas que emigraron entre 1882 y 1967, viendo los puntos cumbre entre los años 1902 y 1932 correspondiendo a la población gallega un 60% del total de las salidas.

Fig.84 Movimientos migratorios españoles a Latinoamérica (1882-1930).

A la hora de destacar las principales causas que originaron la emigración en Galicia se debe señalar como principales causas “la desfavorable estructura de la propiedad (predominio del minifundio), el bajo nivel de instrucción, la escasez de cooperativas, la débil industrialización, etc.” (Borge, 1974, p. 61), como destaca el autor Hernández Borge y continua afirmando que “La emigración repercute desfavorablemente, sobre todo en el campo, envejeciendo la población que queda, al emigrar más los jóvenes que los mayores, y acentuando los desniveles entre la población de uno y otro sexo por emigrar más los hombres que las mujeres” (1974, p. 61).

Aínda que toda esta zona dos mares de Vigo e Pontevedra non é predominantemente

emigrante, emigrase tamén a América, onde vive algún rico facendado que mantén

relación con Cangas. Ademáis a navegación e a Mariña de Guerra sempre favorecen as

viaxes e estadías en Cuba, Arxentina, Filipinas e outros países e ribeiras. (Santos Castroviejo,

2005, p.15)

Fig.85 Puerto de Cangas (1910).

Sin embargo en la villa de cangas no afectaría de igual modo gracias a su condición de pueblo costero y a la ventaja con respecto de las zonas interiores que sufrían en mayor medida esta situación de éxodo.

“Entre os anos 1900 e 1936 a poboación de Cangas medra intensamente. Despois dun periodo de estancamento da poboación na segunda metade do século XIX” (Santos Castroviejo, 2005, p. 249)

Durante esta etapa, el crecimiento medio anual en Cangas se encuentra por encima de la media española, ratificando la existencia de una serie de factores diferenciadores en la villa que impulsan el desarrollo.

Las causas de este desarrollo no sólo se deben a los movimientos naturales de la población, sino en la propia configuración económica del municipio, dado que el lento crecimiento de la población en Galicia, con el retroceso originado por la emigración y los fuertes desplazamientos poblacionales dentro de la misma Comunidad Autónoma, acaban produciendo un despoblamiento del espacio rural en favor de las áreas urbanas, repercutiendo de manera positiva en la villa de Cangas.

A principios del siglo XX y hasta el comienzo de la guerra civil española, Cangas sufre un crecimiento intenso gracias en parte a la importancia de su integración en el área económica de Vigo, fácilmente identificable en el sector pesquero, siendo éste el pilar estructural sobre el que se establece la villa.

“A principios de siglo encontramos en Cangas bien diferenciada la Ribera, el arrabal marinero que vive solo del mar, da parte de arriba, habitada por mañeiros tamen, xeralmente con outros recursos, ademáis de persoas doutros oficios e profesións” (Santos Castroviejo, 2005, p. 11).

Este área está completamente ligada con el sector pesquero y la necesidad de mano de obra, tanto en el trabajo de extracción de productos del mar, pescados y mariscos, como en las industrias relacionadas con el sector, principalmente la fabricación de conservas de pescado, pero también otras industrias, tales como el desarrollo de redes que actúan como frenos a la emigración.

Fig.86 Fábricas y empleados en las industrias marítimas de Galicia.

En vísperas de la Gran Depresión de 1929, España no formaba parte del conjunto de países desarrollados y sin embargo si mantenía algunos rasgos o características de los países atrasados. Pero a pesar de ello, España vivía desde comienzos del siglo XX, un importante desarrollo a nivel económico y social, y como afirma Barciela (2009): “El avance, lento pero sostenido, en la agricultura; el éxito en la incorporación de las nuevas tecnologías propias de la segunda industrialización; la modernización del sector terciario y de la Administración pública; el progreso de la urbanización; el aumento del nivel educativo de los españoles y la paulatina apertura al

Fig.87 Volumen de comercialización de ganado vacuno en Galicia (1842-1931)

Sin embargo durante el primer tercio del siglo XX, la agricultura en Galicia continúa entregada a los cultivos y técnicas tradicionales, predominando el policultivo minifundista, y sobre éste, el sistema establecido de cargas que organizaba el contrato foral. Los productores agrarios gallegos no participarían en el uso de la producción de mercancías hasta la segunda mitad del siglo XX, donde prevalece aún la práctica de un policultivo de subsistencia. Las crisis agrarias de subsistencia persisten y tienen consecuencias catastróficas sobre los habitantes.

El problema de ese atraso está condicionado por “la rutina de las prácticas agrarias, el bajo nivel económico, las deficiencias del sistema de cultivos y su frecuente inadecuación a las condiciones climatológicas y edafológicas, y por último, en la ausencia de modernización de la agricultura gallega” (García-Lombardero, 1983, p. 147).

Galicia tenía la necesidad de un profundo cambio destinado a solucionar su evidente atraso económico. Para ello era necesaria la desaparición del estado ruinoso en el que se encontraba la agricultura y economía gallega, siendo imprescindible la profunda reforma de las estructuras imperantes, dado que en gran medida eran ellas mismas las causantes del desequilibrio originado entre las necesidades de la población y la capacidad del sistema económico para poder satisfacerlas.

Entre las causas que han promovido este proceso de articulación social que encarna la del mercado podemos encontrar, entre otras: el aumento de las importaciones de granos, que contribuyen a atenuar las crisis y a unificar los precios; el mayor volumen de realización de las obras de construcción y mejora de las líneas férreas y caminos, y los efectos que, a través del comercio exterior, tiene sobre la agricultura y economía gallegas en general el proceso de crecimiento económico que están conociendo los países europeos, especialmente Inglaterra y, en menor grado y más tarde, la propia España. (García-Lombardero, 1983, p. 136).

Durante el primer tercio del siglo XX se produce en Galicia una evolución espectacularmente positiva en el sector primario, gracias al volumen de ganado vacuno comercializado. Las circunstancias del mercado eran totalmente favorables para Galicia dado que gozaba de una situación inmejorable con casi el completo monopolio del mercado inglés hasta la entrada de las producciones cárnicas de Argentina, Nueva Zelanda y la posterior obtención prácticamente en exclusiva del abastecimiento de carne de ternera a Madrid y Barcelona.

La transformación generada en la agricultura de gallega durante el primer tercio del siglo XX es esencial dado que como afirma García-Lombardero (1983):

No puede caracterizarse de otro modo una dinámica transformadora de la sociedad

agraria gallega que afecta a todas las manifestaciones de la vida cotidiana: la tierra (la

redención de los foros), el trabajo (la emigración y la anulación de excedentes laborales que

facilitan la introducción de innovaciones tecnológicas), el capital (la ampliación de las

actividades comerciales, las remesas de los propios emigrantes y el aumento de la capacidad

de acumulación de las explotaciones agrarias), la organización social (el impulso del

asociacionismo y sindicalismo agrario de cualquier naturaleza) y la organización de la

producción (especialización productiva bajo un nuevo modelo de cálculo

económico). (García-Lombardero, 1983, p.145)

No obstante el efecto de la Gran Depresión, junto a la incertidumbre creada por el establecimiento de la República, generaría un estancamiento entre los años 1929 y 1935, pero, a pesar de las dificultades económicas, el factor crucial que desencadenaría el conflicto bélico civil sería el problema generado por la desigual distribución de la propiedad agraria. (Barciela, 2009).

La crisis mundial de 1929, repercutiría en España en años posteriores y continuaría con la guerra civil de 1936 a 1939, frenando las salidas migratorias, estableciendo un panorama muy complicado en el que poder prosperar dadas las pocas posibilidades establecidas, augurando un futuro

Bajo el régimen franquista se vivirá un período de represión total a nivel social, donde la población se encontraba sumida sin ningún tipo de libertad de expresión, con un control total de las instituciones y los medios. Además de la falta de libertades, la regresión económica hará mella en la población, condenando a gran parte de la sociedad a un estado de pobreza y hambruna, unido a la implantación de una medida temporal de índole económica que se mantendría hasta el año 1950, las denominadas Cartillas de Racionamiento, las cuales servían para aprovisionar los alimentos de primera necesidad para la población, pero este método enseguida comenzaría a mostrar problemas de escasez y deficiencias en su sistema- funcionamiento.

El crecimiento vegetativo en la provincia de Pontevedra es de signo positivo con

tendencia a aumentar, Sólo ha habido un ligero descenso en el período 1911-20 (influido

por la gripe de 1918) y un incremento pequeño en Ia década 1931-40 (debido a la guerra

civil). (Hernández Borge, 1974, p. 59)

Sin embargo y a pesar de la emigración, los cambios políticos, los problemas económicos y los conflictos originados por el estallido de la guerra, los indices de población en la provincia de Pontevedra son destacables, ya que éstos han aumentado constantemente desde 1900, como lo demuestran las estadísticas globales y los índices de crecimiento, observando únicamente un pequeño descenso en la década de los 40-50, debido al período autárquico vivido que, coincidiendo con el final de la guerra, acaba siendo una fase muy complicada de hambruna, cartillas de racionamiento, etc.

A comienzos del siglo XX, las instalaciones de salazón comenzarían a dejar paso a las fabricas conserveras, como asegura Santo Castroviejo “as fábricas de conserva en lata de aceite veñen sustituíndo dende hai uns anos ás da salga” (2005, p.16), originando el protagonismo de la actividad industrial e instalando grandes fábricas en el municipio, lideradas por los empresarios catalanes Massó, aportando un impulso más al sector pesquero imperante en la zona, pero no sería hasta el año 1941 cuando se inaugure la fábrica conservera Massó en Cangas, la cual disfrutaba de los últimos avances tecnológicos de la época en su sector, proporcionando así un foco de trabajo enorme aportando un gran número de puestos de trabajo en la villa, generando más de a más de 1000 puestos directos, propiciando un polo de crecimiento en el área muy destacado.

Durante el transcurso del primer tercio del siglo XX, se produce la fase de incorporación de la producción agraria gallega en el entorno del mercado capitalista, de un modo rápido fuerte e intenso, de tal forma que después se verá obligada a efectuar un pausa entre los años 1936 y los últimos años de la década de 1940, para establecer así una modernización productiva de la agricultura gallega (García-Lombardero, 1983).

Fig.88 Cangas (1940)

El crecimiento de la población gallega con una forma de vida tradicional asentada en núcleos rurales hasta el año 1950, favoreció que el sistema agrario obtuviese una mano de obra abundante, estableciendo de este modo uno de los pilares básicos de la resistencia de esta estructura.

Todo ello se aprecia en los datos estadísticos entre los años 1900 y 1950, donde se produce en Cangas un crecimiento considerable, que coincide con un momento de despegue demográfico en España, de forma constante, aunque moderada hasta la segunda mitad del siglo XX.

“A partir de 1950, por el contrario, la situación se irá modificando de forma cada vez más acelerada” (Lage Picos, 2003, p. 114).

El éxodo de la población rural, en la búsqueda de mejores expectativas económicas y mayores posibilidades laborales, originan el desplazamiento de grandes grupos de población hacia zonas litorales, donde ya había llegado la industrialización, convirtiéndose así en los primeros ejes de atracción. Desde el momento de la aparición de las industrias de salazón hasta las posteriores fábricas conserveras, junto al fuerte desarrollo de la actividad pesquera en la villa, fueron las causas de atracción poblacional que ocasionaron el importante crecimiento de esta área durante el presente período. Todo ello unido al vínculo que asociaba a la villa de Cangas con el área metropolitana de la ciudad de Vigo y su enorme desarrollo industrial, fomentando una mayor concentración de población.

5.1.2 Trazado viario

Hasta finales de siglo XIX el sistema general de comunicaciones y medios de transporte era insuficiente e inadecuado y estaba, además, afectado por un crónico mal estado, no sería hasta el primer tercio del siglo XX cuando esta situación se revertiese.

La red de comunicaciones existentes en Cangas a nivel general, se basaba principalmente hasta comienzos del siglo XX en el antiguo Camino Real, apoyado por los caminos comarcales que la unían con las parroquias anexas de Coiro y Darbo entre otras, hasta el año 1912 que se lleva a cabo la construcción de su vía principal C-550, la actual PO-551, la cual regulaba y estructuraba la villa destinando el tráfico rodado de la villa hacia Coiro, Moaña, Bueu o Marín y también hacia las grandes urbes como Vigo o Pontevedra. La vía PO-315 también tenía un papel importante dentro del ayuntamiento ya que fomentaba las conexiones municipales internas hasta Bueu, pasando entre distintos ayuntamientos como Darbo, O Hío y Aldán.

Fig.89 Plano de la comarca del Morrazo donde destaca el espacio urbano de la villa de Cangas (1941)

F1g 90 Plano con las vías pr1nc1pales del nú cleo h1stór1 co y el espac 1 o urbano de la villa de Cangas con la expansi ón hacia los barnos de O Forte y O Salgueirón

El casco antiguo de la villa de Cangas poseía dos vías principales de comunicación, una que fluía por todo el borde costero de un extremo a otro del núcleo desde Méndez Núñez Eugenio Sequeiros y paseo de Castelao hasta Eduardo Vicenti, finalizando en la Avenida Montero Ríos, convergiendo con la actual vía principal PO-551 y la otra surgía del Camino viejo de San Roque, atravesando el Barrio do Costal desde la actual calle Álvaro Guitian, pasando por la calle de Singulis hasta toparse con la calle Real, ramificándose por un lado hacia el cementerio y entrando en el Barrio do Señal por otro a través de la calle Benigno Soage hasta converger en la actual calle Lirio, donde confluía con la vía que transcurría por la costa comunicándose entre sí por una serie de calles transversales, ejerciendo como división Norte- Sur del núcleo antiguo y sectorizándolo en cuatro partes con la división Este-Oeste de la calle Real.

La trama viaria del núcleo primitivo es interesante y prolífica, gracias a sus ramificaciones y cambios de cota, debida principalmente al lugar en el que se asienta y al desarrollo histórico sufrido.

Si se observa con detenimiento la figura 90 se pueden interpretar las múltiples características que difiere la trama en el barrio del Costal de la del barrio del Señal.

Fig.91 Mujeres lavando la ropa en el puente del Señal 1954

En el año 1936, conincidiendo con el final de la guerra civil, se realizaron cambios en los nombres de las calles por parte del bando vencedor, en el que aparecen nombres de militares o

El Areal pasa a avda. del Capitán Galán y García Hernández, luego avda. de José Antonio y

en la actualidad Daniel Castelao. La estrella pasa a Alcalá Zamora, y luego (a

continuación), vuelve a Estrella. Xesteira pasó a 13 de septiembre, después a 14 de abril y

luego Valentín Losada. La calle Real pasa a República y luego (después) a calle Real. La

calle Martínez Anido pasa a plaza Salmerón y luego volvió a tomar el anterior nombre.

Alfonso XIII pasa a plaza de la Libertad. (Vázquez Marinelli, 2007, p. 94)

Fig.92 Villa de Cangas a comienzos del siglo XX donde se destaca la zona del mercado y la vía principal C-550

La construcción en 1912 de la vía C-550 (actual PO-551), junto con la C-315 (PO-315), constituirían una clara línea de crecimiento artificial con una proyección y realización en torno a ésta, al comienzo de su fase de extensión, además de ejercer como límite y barrera de expansión, conteniendo el verdadero núcleo urbano entre sus márgenes.

La función de las líneas de crecimiento no es sólo la de constituir un trazado sobre el que

vendrían a alinearse los elementos construidos, por poco que se lo permitan sus propiedades

tipológicas, sino que realmente consiste en ordenar el tejido de una y otra parte, regular los

crecimientos secundarios y las densificaciones, en una palabra, proporcionar una estructura.

Con la antigua carretera comarcal C-550 (actual PO-551) y la carretera de Aldán (actual PO-

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