Volver a empezar (Herself) (2020), de Phyllida Lloyd

Dublín. Sandra ha tenido que huir con sus dos hijas de 6 y 8 años de su marido, Gary, un peligroso maltratador. Se verá obligada a alojarse en un hotel, mientras pide ayudas sociales para pagar el alquiler de un hogar, al tiempo que desempeña dos trabajos, limpiar un bar y ejercer de asistenta para Peggy, veterana médica que se recupera de una lesión de cadera. Ésta se apiada de ella, así que le cede un espacio en su amplio jardín, en el que Sandra podrá construir su propia casa, si cuenta con la ayuda adecuada. Se ofrece a echarle una mano Aido, contratista que tiene un hijo con síndrome de Down.

Phyllida Lloyd está especializada en películas protagonizadas por mujeres, pues estuvo detrás de Mamma Mía!, que arrasó en taquillas, y de La dama de hierro, ambas con Meryl Streep, que con la segunda ganó un Oscar. Pese a debutar con dos filmes tan prometedores, ha tardado más de nueve años en rodar el tercero, durante los que se ha dedicado sobre todo al teatro. Regresa con un proyecto claramente feminista muy adecuado para los tiempos del #MeToo.

El guión de Malcolm Campbell (La reina blanca), en el que también ha intervenido la actriz protagonista, Clare Dunne, quizás resulta un poco monolítico en su tratamiento de la violencia machista, sobre todo si se compara con el de otros títulos más complejos sobre el tema, como el español Te doy mis ojos. De esta forma, el ex psicópata no pasa de ser un cliché. Pero esto no quita para que el film funcione cuando retrata los esfuerzos de una mujer por recuperar la autoconfianza, y que descubre que siempre se necesitará de buena gente, y que por fortuna el mundo está lleno de ella. Resulta más apropiado el título original, “Herself”, que se podría traducir como “por sí misma”, y que sería irónico, que el español, Volver a empezar, idéntico al del famoso film de José Luis Garci.

Lloyd compone una narración un tanto agridulce, pero con toques positivos, y guiños al cine de Frank Capra. Dirige con maestría, y sobre todo logra que realice un gran trabajo todo el reparto. Pero le corresponde el mayor peso a la citada Dunne, irlandesa hasta ahora vista en papeles muy secundarios en títulos como Spider-Man: Lejos de casa, pero que como otros de sus compañeros ha trabajado con la realizadora sobre las tablas.