Ginza es una meca de las compras a nivel mundial, pero este céntrico barrio también está lleno de establecimientos fundados hace más de cien años. Los centros comerciales y las boutiques de lujo se suceden de Nihonbashi a Ginza, y ya es toda una tradición comprar y disfrutar de un paseo por la zona mientras está cerrada al tráfico. Existen muchos hoteles de lujo y restaurantes (algunos, con estrellas Michelin) donde se puede disfrutar de la alta cocina que ofrecen sus expertos chefs. Ginza también es famoso por el ambiente nocturno de sus deslumbrantes clubes.

Existen incontables oportunidades de comprar en los barrios de Shibuya y Harajuku, sobre todo, en las tiendas centradas en la cultura japonesa de lo kawaii. Las zonas más de moda se encuentran alrededor del distrito central de Shibuya, la calle Takeshita, en Harajuku, y Omotesando. Si necesitas recargar las pilas después de tanta compra, puedes tomarte un respiro visitando el santuario de Meiji Jingu o el parque Sasaki. En contraste, Ebisu cuenta con una atmósfera más adulta, tranquila y liviana. En el museo de la cerveza Yebisu aprenderás cosas sobre la cerveza que dio origen al nombre del barrio y, en la zona circundante, podrás disfrutar comiendo en los populares establecimientos de tallarines.

En Ueno y Asakusa son palpables los vestigios de la historia y la cultura del periodo Edo. El espacioso parque Ueno es un lugar fantástico para relajarse y visitar distintos museos y galerías. En Ameyoko, que comienza frente a la estación de Ueno, se apiñan las tiendas de ropa, las pescaderías y las tiendas de alimentación. Las compras masivas de finales de año convierten este mercado en un hervidero de gente. El barrio de Asakusa se desarrolló alrededor del templo Sensoji y en su centro hay muchas tiendas que venden productos y ropa del antiguo Japón. Es un lugar excelente para comprar recuerdos. La zona también es célebre por sus distintos festivales anuales, y todo el distrito participa en el gigantesco festival Sanja de mayo.

No hace tanto tiempo, las zonas de Akasaka y Roppongi eran célebres por su vida nocturna y sus restaurantes, bares y clubes de primera calidad. Más recientemente, con la inauguración de Roppongi Hills, Tokyo Midtown y Akasaka Sacas, la zona se ha autoproclamado como el lugar más de moda a todas las horas del día y de la noche. El barrio alberga también el Centro Nacional de Arte, el Museo de Arte Mori y gran cantidad de galerías de arte de últimas tendencias.

Ikebukuro es una zona de desarrollo masivo con varios miles de establecimientos dentro de dos grandes almacenes y centros comerciales gigantescos donde se puede disfrutar de todo tipo de tiendas y alimentos gourmet. Sushine City, el edificio de 60 plantas situado en la entrada este de la estación, es un lugar emblemático dentro Ikebukuro y cuenta con un acuario, un planetario, un parque temático y un observatorio. El nombre popular con el que se conoce la parte occidental de esta zona es “calle Otome” (“calle de las chicas”), y alberga muchas tiendas que venden productos relacionados con anime de temática femenina. El área se ha convertido rápidamente en la sede mundial de la cultura otaku.

Haneda/Kamata es conocido por su aeropuerto y por los muchos hoteles que han surgido allí al aumentar los vuelos internacionales del aeropuerto de Tokio (Haneda). Pero también es una zona que alberga muchos santuarios y templos de origen antiguo, como el santuario Anamori Inari o el templo Ikegami Honmonji, que, en octubre, recibe la visita de más de 300 000 personas durante el festival budista de Oeshiki. La zona que rodea la estación de Kamata está llena de restaurantes y el bullicio se prolonga hasta bien entrada la noche. En particular, es conocida por sus muchos especialistas en los sabrosos gyoza.

Ochanomizu puede presumir de unos orígenes académicos que se remontan a Yushima Seido, donde se originó la educación japonesa moderna. El barrio ha mantenido su atmósfera universitaria con la existencia de varios campus. Si te diriges hacia Jinbocho, encontrarás establecimientos de venta de instrumentos musicales y de equipamientos deportivos, así como una zona de tiendas de libros usados, destinada tanto a los estudiantes como a cualquiera que se interese por la literatura y el arte. Akihabara es conocida por sus tiendas de informática y electrónica, y hoy es inmensamente popular entre los aficionados al anime y los videojuegos. Kanda es un distrito de oficinas donde se pueden encontrar gran cantidad de izakayas de precios razonables, llenos de trabajadores que comen y beben antes de volver a casa.

Yotsuya e Iidabashi son zonas que se desarrollaron alrededor del foso exterior del palacio imperial. Muy cerca, en Kagurazaka, existe un antiguo barrio rojo de fotogénica atmósfera que evoca el viejo Tokio. Se conservan las callejuelas empedradas de antaño y existen restaurantes de larga tradición con geishas, así como pintorescos cafés antiguos en edificios de valor histórico.