Se acerca el 23 de abril, el día más esperado de Catalunya, y durante estas fechas, siempre gusta recordar la leyenda que rodea nuestra ansiada fiesta de la rosa y el libro. Probablemente ya la conozcas, la hayas leído en otros artículos, escuchado en el colegio o incluso visto en carteles y panfletos del día de Sant Jordi.
Seguro que ya conoces al protagonista de la historia, el valiente Jordi que, de cuatro espadazos, acabó con el dragón y salvó a la princesa. Lo que igual no tienes tan claro es el nombre de nuestra otra protagonista. Todos hemos oído hablar de ella, la hemos mencionado y la visualizamos en la leyenda, pero nunca nos habíamos planteado algo tan sencillo como esto: ¿Cómo se llama la princesa?
¿Qué dice la leyenda?
El caso es que a nosotros nos pasó lo mismo. De un día para otro nos surgió la duda, ¿cómo es posible que tengamos tan grabado el nombre de Jordi y nunca nos hayamos preguntado cómo se llama la princesa? Así que decidimos ponernos a investigar.
Hagamos un repaso por la leyenda: Hace mucho, mucho tiempo un terrorífico dragón decidió asentarse en la aldea de Montblanc y, como no podía ser de otra forma, las gentes del pueblo quedaron completamente atemorizadas. Con la intención de calmar la ira de esta criatura decidieron sacrificar cada día a una persona, que elegían mediante un sorteo.
Un día le tocó a la hija del rey, nuestra princesa, así que un caballero llamado Jordi (porque de este sí nos sabemos el nombre) se enfrentó al dragón y lo mató de cuatro espadazos. La sangre que derramó se convirtió en un rosal, del que Jordi cortó una rosa para regalar a la princesa (hasta ahora anónima).
Cleodolinda, Violant… ¿o simplemente no tiene nombre?
Resulta que, cómo suele ocurrir con las mujeres de las leyendas, no parece haber acuerdo en el nombre de la princesa, y ni siquiera está del todo claro si lo tiene. En la mayoría de versiones de la leyenda (como la que te hemos contado más arriba) esta aparece referenciada como «la princesa», sin más rodeos, sin nombre ni distinción ninguna.
Sin embargo, entre las versiones que sí la nombran, parece que el nombre más extendido es Cleodolinda. Y decimos el más extendido porque no es el único. Resulta que otro, al parecer bastante común, es Violant.
En la redacción de Barcelona Secreta no podíamos quedarnos con tantas opciones y tan pocas respuestas, así que nos hemos puesto en contacto con el Ayuntamiento de Montblanc, el pueblo en el que ocurrió toda esta hazaña según cuenta la leyenda. ¿Y qué nos han contado? Pues lo que más nos temíamos, que según la versión más tradicional de este municipio la princesa nunca jamás ha tenido nombre.
Sea como sea, si algo está claro, es que las leyendas cambian y evolucionan con el paso de los años, así que (por lo menos nosotros) desde ahora, mencionaremos el nombre a la otra protagonista de la historia favorita de Barcelona cuando contemos esta historia.