De Sherlock Holmes a Hercules Poirot: 12 películas míticas de intriga y misterio si te ha gustado ‘Misterio en Venecia’

"Quiero hacer una película de Alfred Hitchcock", declaró el maestro de la comedia Billy Wilder (1906-2002) cuando le encargaron la dirección de un thriller inspirado en la obra teatral de Agatha Christie.

Apoyado por un reparto sublime –Wilder consideraba a Charles Laughton "el mejor actor que ha existido nunca"– y un guion coescrito con Harry Kurnitz ('¡Hatari!'), el cineasta convirtió la trama, cuajada de personajes corruptos y mentirosos, en un prodigio del género que, con 66 años a sus espaldas, sigue inalterable. Un célebre y tozudo abogado criminalista de maltrecha salud (Laughton) defiende al acusado (Power) del asesinato de una rica anciana.

El chocante giro final del argumento, muy en la línea de Christie, fue el reclamo de la campaña publicitaria del film, que afirmó no sólo que los actores rodaron sin conocer las últimas páginas del guion sino que hasta la mismísima Casa Real británica, primeros en todo el mundo en ver el film en un pase privado, tuvo que firmar un contrato para no desvelar el desenlace.

(Por Julieta Martialay)

Unos cuantos años antes de que Rian Johnson revitalizara el género whodunit con sus 'Puñales por la espalda', su debut retorció los lugares comunes del cine negro transportando sus tópicos a una escuela de secundaria del sur de California.

Brendan (Joseph Gordon- Levitt) se pone la gabardina de detective pulp para investigar la desaparición de su exnovia Emily (Emilie de Ravin) en una historia en la que no faltan conspiraciones, drogas, acertijos, soplones, matones y, por supuesto, una femme fatale (Nora Zehetner) como un traicionero objeto de deseo. Lo fácil habría sido caer en una parodia de chavales de instituto jugando a ser un neo-noir transgresor, pero no. 'Brick' cambia el continente, pero respeta el contenido clásico.

(Por Fran Chico)

Los Ángeles, 1937. Un aparente anodino caso de infidelidad acaba destapando una trama de corrupción en un Los Ángeles tan luminoso como podrido.

Polanski –que se reservó un afilado rol– dirige un noir majestuoso, escrito por Robert Towne y sacado adelante gracias al empeño de Robert Evans, el elegante capo de Paramount, y un Jack Nicholson que borda su papel de detective en un argumento con giro final que conectaba con su vida real.

(Por Roger Salvans)

Cuatro años después de la sangrienta 'Carrie' (1976), De Palma cogía su cuchillo para trazar una historia de estilística extravagante. En un claro homenaje a 'Psicosis' de Hitchcock, la trama sigue los pasos (de tacón) de Angie Dickinson hasta su brutal asesinato. Junto a ella están Michael Caine y Nancy Allen, que por entonces mantenía una relación sentimental con el director.

Un erótico slasher donde la forma es más importante que el fondo, y donde la sexualidad corre por un peligroso sendero mientras se descubre quién es el verdadero criminal. ¿Lo mejor? La secuencia del museo, aunque De Palma prefería la del ascensor: "Mi mejor escena de asesinato."

(Por María Juesas)

Producida por Spielberg y con efectos especiales de Industrial Light and Magic de George Lucas (galardonados con un Oscar), el guion de Chris Columbus juega a ser la precuela del legendario método deductivo colocando su origen en la adolescencia del tándem formado por Sherlock Holmes y el doctor Watson, los personajes victorianos de Sir Arthur Conan Doyle.

En su época de estudiantes de un elitista internado, los asesinatos de empresarios británicos y de un viejo profesor del colegio sellan la alianza de los jóvenes y dan pie a una deliciosa aventura llena de giros imposibles, en la línea de 'Los Goonies'.

(Por Mariola Romer0)

Alfred Hitchcock quería rodar este thriller con ecos de terror sobrenatural, a partir de la novela de Pierre Boileau y Thomas Narcejac, autores también de 'Vértigo (De entre los muertos)', pero se le adelantó Clouzot.

Lo protagonizan el despótico director de un internado, su enfermiza esposa y su rebelde amante. Los tres, magníficos Meurisse, Véra Clouzot y Signoret, conviven en el ruinoso colegio en el que trabajan. Él las maltrata, y ellas urden un plan para acabar con esa situación. Unos profesores chismosos, críos que saben más de lo que parece y el retrato costumbrista de la Francia de provincia de los 50 refuerzan el suspense de una trama con final sorpresa.

Ojo al detective despistado, sirvió de inspiración para el popular personaje televisivo del teniente Colombo.

(Por Juan Pando)

Poco antes de embarcarse en la investigación de otro enigma religioso como el del Santo Grial de 'Indiana Jones y la última cruzada', Sean Connery se enfundó el hábito de franciscano para resolver, en una dupla detectivesca memorable junto a un jovencísimo Christian Slater, el misterio de las muertes de un grupo de monjes en una abadía italiana del siglo XIV.

Enmarcada por la portentosa fotografía de Tonino Delli Colli, esta perenne adaptación de la novela homónima de Umberto Eco se encomendaba al suspense medieval para hablarnos de erotismo y literatura a partir de personajes reprimidos como el inolvidable jorobado de Ron Perlman.

Su director, Jean-Jacques Annaud, admitió haber elegido a los actores más feos de entre todas las opciones del casting para que aquellos personajes de piel cetrina y coronillas rapadas parecieran ‘reales’ como los hombres que él veía en el pueblo donde residía. Al finalizar el rodaje, de regreso a su casa, algunos vecinos le preguntaron si realmente los consideraba tan feos.

Annaud respondió: "Sí."

(Por Javier Díaz-Salado)

Un belga, un norteamericano, un chino, una inglesa y un neoyorquino, los cinco detectives más importantes del momento, son invitados a la casa del excéntrico multimillonario Lionel Twain (encarnado por Truman Capote).

Durante la cena, los huéspedes descubrirán que van a ser testigos de un asesinato que deben resolver para ganar un millón de dólares, ¿quién será el primero en señalar al culpable?

Alec Guinness, David Niven, Peter Falk, Peter Sellers, Maggie Smith y James Cromwell conforman el reparto de esta deliciosa comedia que, en realidad, esconde una cuidada sátira sobre el género detectivesco firmada por Neil Simon, responsable de otros prodigiosos libretos como 'Descalzos por el parque' y 'La extraña pareja'. Si tienen alguna duda pregunten al mayordomo, el servicial James Señor Benson Señora.

(Por Ricardo Rosado)

Su argumento ha pasado a la posteridad como uno de los más enrevesados de la historia del cine. La maraña de asesinatos es tal que son célebres los telegramas que Hawks se intercambiaba con los guionistas, entre ellos William Faulkner, preguntándose quién había matado al chófer. Intentaron resolverlo yendo directamente a Raymond Chandler, autor de la novela original, quien respondió "Y yo qué demonios sé".

El propio escritor decía que una trama policiaca debe ser tan buena que se disfrute aunque alguien haya arrancado las páginas del final. Y eso es lo que sucede aquí, donde importan más los engranajes de la investigación que el resultado y, sobre todo, la arrolladora relación entre Humphrey Bogart, en el papel de Philip Marlowe, y Lauren Bacall.

Sus afilados diálogos, cargados de ironía y un sólo a medias encubierto erotismo (se habían enamorado ya rodando 'Tener y no tener') son difícilmente superables.

(Por Laura Pérez)

La única adaptación que satisfizo a Agatha Christie subió a bordo del tren capitaneado por Sidney Lumet a estrellas de la talla de Albert Finney, Ingrid Bergman (Oscar por su interpretación de Greta Ohlsson), Lauren Bacall, Anthony Perkins, Sean Connery, Jacqueline Bisset o Vanessa Redgrave.

La escritora reconoció haber visto en Finney al Hércules Poirot que creó en sus novelas. Sin embargo, el actor entró en el proyecto después de que Alec Guinness y Paul Scofield rechazaran el personaje por incompatibilidad de agendas.

(Por Juan Silvestre)

Michael Caine no era nadie y Laurence Olivier lo era todo en el cine cuando llegaron a esta película, la última de Mankiewicz, adaptación de la obra de Anthony Shaffer. El primero deseaba tanto trabajar con el maestro que apenas articuló palabra en su primer encuentro.

La trama: un famoso escritor de novelas de intriga aficionado a los juegos de ingenio quiere humillar al joven amante de su esposa. Con ese fin, lo invita a su mansión y le propone un plan de macabras consecuencias.

Caine protagonizó en 2007 el remake de Kenneth Branagh, esta vez en la piel del novelista, y Jude Law, en la de su rival. El resultado no estuvo a la altura de la obra maestra.

(Por Coral Chamorro)

Tras lucir su espléndido bigote en 'Asesinato en el Orient Express' (2017) y 'Muerte en el Nilo' (2022), Kenneth Branagh vuelve a convertirse en Hércules Poirot en esta adaptación que, como las dos anteriores, firmael guionista Michael Green (Logan).

En este caso, el original literario es 'Las manzanas', publicada en el Reino Unido en 1969 y una de las últimas novelas que Agatha Christie escribió con el detective belga como protagonista.

El film traslada la trama del Reino Unido y mediados de siglo a Venecia y la década de los 30, además de potenciar todos los elementos góticos de un caso que arranca cuando Poirot asiste a una sesión de espiritismo.

Michelle Yeoh, Jamie Dornan y Tina Fey completan el cast.

Estreno en cines: 15 de septiembre