Julian Reichelt: Despedido el director de ‘Bild’, el mayor periódico de Alemania, tras una investigación sobre acoso sexual | Sociedad | EL PAÍS
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Despedido el director de ‘Bild’, el mayor periódico de Alemania, tras una investigación sobre acoso sexual

El poderoso grupo mediático Axel Springer echa “con efecto inmediato” a Julian Reichelt tras publicarse varias informaciones sobre su relación inapropiada con mujeres jóvenes de la redacción

Bild Julian Reichelt
Julian Reichelt, director de Bild, en una foto tomada en 2017.CLEMENS BILAN (EFE)

El grupo mediático alemán Axel Springer ha despedido este lunes “con efecto inmediato” al director del diario Bild, Julian Reichelt, tras las revelaciones publicadas en medios alemanes y, especialmente, en The New York Times, acerca de un posible caso de acoso sexual y de relaciones inapropiadas en la redacción de este diario sensacionalista, el más leído del país.

En una nota de prensa, la compañía le acusa de no haber separado “lo privado de lo profesional” y de haber mentido a la junta directiva. Las primeras acusaciones contra Reichelt se conocieron hace meses, pero Axel Springer abrió una investigación y concluyó que no había motivos para apartarle de su puesto. Ahora, un día después de que The New York Times publicara detalles sobre su relación con una becaria, la compañía ha decidido despedirle.

En marzo el semanario alemán Der Spiegel publicó que la editora de Bild investigaba varias quejas internas sobre el comportamiento de Reichelt con las trabajadoras. El director, de 41 años y que llevaba en el puesto desde 2017, se marchó de baja unos días pero volvió tras conocerse el resultado de una investigación interna, en la que participó el despacho de abogados Freshfields, que concluyó que no había violado ninguna norma aunque sí determinó que había “mezclado su vida personal y profesional”.

Axel Springer asegura este lunes que “en el contexto de una investigación reciente de los medios, la compañía ha tenido conocimiento de nuevos indicios sobre el actual comportamiento de Julian Reichelt”. En la nota asegura que durante la investigación llevada a cabo en marzo “nunca hubo denuncias de acoso sexual o agresión sexual” sino “denuncias de relaciones amorosas con empleadas de Bild e indicios de abuso de poder en este contexto”. La empresa asegura que entonces llegó a la conclusión de que el director “cometió errores, pero no errores imperdonables. Los que hubieran justificado un despido inmediato no pudieron probarse y Julian Reichelt los negó”.

The New York Times publicó ayer detalles de la investigación interna de la primavera pasada. Relata por ejemplo que en 2016, cuando tenía 36 años, Reichelt inició una relación con una empleada de 25. “Si se enteran de que tengo un lío con una becaria, me echan”, le dijo a la mujer en noviembre de ese año, según declaró ella durante la investigación. Poco después le ofreció un puesto destacado en la redacción para el que ella sentía que no estaba preparada, relata el diario estadounidense a partir de las transcripciones de las declaraciones. “Así funciona siempre en Bild”, dijo la mujer a los investigadores. “Quien se acuesta con el jefe consigue un trabajo mejor”.

Der Spiegel se refirió en marzo al “sistema Riechelt”, que consistía en que el director invitaba a las becarias a cenar vía Instagram. Sin ofrecer detalles, relató que de repente algunas empleadas eran promocionadas a puestos destacados y que también con rapidez caían en desgracia. La publicación calificó la relación de Reichelt con las periodistas como “un secreto a voces” y señaló que las mujeres exigían anonimato para contar su experiencia por miedo a las consecuencias. “Reichelt ha creado una cultura del miedo en la redacción que ahora dificulta el esclarecimiento de los casos”, escribieron los periodistas de Der Spiegel que destaparon la historia. Titularon el reportaje “Follar, promocionar, despedir”.

Axel Springer, editora también del diario Die Welt y que recientemente ha comprado los medios estadounidenses Business Insider y Politico, explica en la nota de prensa que en la compañía no existía un reglamento sobre las relaciones entre empleados. En general, las empresas alemanas no tienen este tipo de normativa. Tras la investigación de la primavera, la junta directiva ha decidido “que en el futuro debería existir la obligación de revelar de manera transparente las relaciones personales en el lugar de trabajo que pudieran desencadenar un conflicto de intereses”, asegura.


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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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