Mi vida con los chicos Walter

Tras sufrir una pérdida, Jackie se muda con los Walter e intenta adaptarse a la vida de pueblo, pero cambiar de hogar y de escuela trae nuevos retos.

Jackie acude a Katherine después de que los chicos le jugaran una broma tras hacer una apuesta, pero luego aprende que ellos manejan sus problemas a su modo.

En la fiesta de bienvenida, Alex y Jackie atienden juntos el carrito de sidra de los Walter con la ayuda de Cole, que trata de aceptar la vida sin el fútbol.

En el cumpleaños de Lucy, Jackie decide faltar a la escuela e ir a una fiesta en una casa del lago con Cole, donde juegan a una versión más interesante de verdad o reto.

Este año, Jackie no quiere ni pensar en el Día de Acción de Gracias sin su familia, pero una visita sorpresa le levanta el ánimo y le plantea una decisión difícil.

Antes de la fogata, Jackie se entera de la historia de Cole y Alex con otra chica. En la fiesta, varias relaciones se hacen cenizas.

Los rumores sobre los chicos Walter se disparan, y la rivalidad entre hermanos de Alex y Cole revienta. Más tarde, la familia se enfrenta a una desagradable emergencia.

Cuando Katherine gana un premio por su trabajo como veterinaria, su familia le da todo su apoyo…, con excepción de Cole, que emprende un camino de autodestrucción.

Jackie se pierde el rodeo de la feria del condado de Alex por asistir a una entrevista importante e intenta mantenerse alejada de Cole después de lo que le dijo.

Con la ayuda de los chicos Walter, Jackie planea hasta el último detalle de una boda en el rancho. Pero no hay preparativo que valga para lo que ocurre después.